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Deadwood (Serie de TV)

Serie de TV. Western. Drama Serie de TV (2004-2006). 3 temporadas. 36 episodios. Ambientada en los Estados Unidos, en la época de la fiebre del oro (1876). Poco después de la última acción del general Custer, en Black Hills surge una ciudad fronteriza, que es testigo de la implacable lucha de los pioneros por el poder. Entre los colonos había gente muy heterogénea: un hombre de leyes retirado, el intrigante propietario de un salón, el legendario Wild Bill Hickok o ... [+]
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Críticas 64
Críticas ordenadas por utilidad
7 de febrero de 2018
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Las críticas me resultan un poco repetitivas (excepto una que incide en la mala higiene de todo el pueblo), por eso no insistiré en las bondades de la serie (ambientación, personajes, interpretación, trama principal, subtramas y bla bla bla) e intentaré aportar algún nuevo punto de vista.

Todo el mundo parece hacer hincapie en el personaje de Al, y coincido en que al principio de la serie Deadwood es su tablero de ajedrez y él mueve las piezas sacrificando peones, alfiles o lo que haga falta, pero la fiebre del oro atrae demasiada competencia...

Tolliver, su rival/aliado según convenga, es un buen contrapunto, pero no termina de gustarme. En cambio el "escudero" Dan(lleva con Al un rollo especie "Quijote-Sancho"), el doctor, el socio judío y Trixie la prostituta están totalmente a la altura.

Hay algunos personajes muy buenos que me parecen desaprovechados, como el amigo de Bill, el marido-socio de la dueña de la mina, la jefa del burdel, el dueño del hotel o el geólogo-sicópata, que lo hacen muy bien, pero parecen personajes de conversación de "Red Dead Redemption".

Y por último hay bastantes personajes caricaturescos, prisioneros de su rol, como Calamity Jane, Pequeño General Negro, el Editor del periódico... lo que los hace demasiado encasillados y previsibles.

Un personaje que me decepciona es Bullock, que empieza muy duro y muy centrado, pero termina sufriendo un trastorno bipolar (lo mismo está serio, que alegre, que tranquilo o que furioso, soltando los puños a veces sin aparente lógica).

Y para terminar, hay bastantes referencias a incendios (jefe de bomberos, el carro antiincendio, las inspecciones a locales) sin que aparentemente tengan mucho que ver con el resto de la trama, lo que me hacía intuir que en un momento dado habría un incendio. No es un espoiler porque la serie se canceló antes de rodar el incendio (real que arrasó el pueblo real) en la cuarta temporada, pero de haberse rodado apuesto a que empezaba en el bar donde está la estufa, ya que la apagan por estar muy cerca de la pared y luego hay clientes que se quejan de frío. También para eso sirve una serie inacabada, para que cada uno se monte su propia historia.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
PanchoColate
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13 de junio de 2019
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La verdad que la serie es interesante para pasar el rato y quedarse un tiempo pensándola, pero nada mas, creo que pudo haber sido mas grande aun si fuera menos confusa en los diálogos y toda la trama relacionada a la anexión del pueblo, no se termina de entender mucho el asunto por lo innecesariamente complicado de algunos diálogos "claves", también hay actitudes confusas de algún que otro personaje que no terminan de cuadrar. El titulo se refiere a que nunca pasa algo a gran escala o un hecho que como puede ser una venganza que se va cocinando a fuego lento durante las temporadas hasta llegar al final, tal vez su atractivo sea que justamente no busca eso, ser un western tradicional, pero a pesar de que las historias de cada personaje que en definitiva son las que adornan la serie no alcanzan para generar mucho interés, llegado un punto uno la sigue viendo esperando que pase algo rompedor y recién en la tercera temporada con la llegada de cierto personaje se empieza a poner picante la cosa pero solo se queda en eso, tensiones que duran poco. Es una serie chocante que supongo busca generar asombro en el espectador al nivel de incomodarlo constantemente y lo logra muy bien, un bicho raro que hay que ver mas allá de que no sea perfecta, definitivamente lo mejor de la serie son sus personajes, si no serian tan buenos y carismático seria un bodrio.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Cinefilo44
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2 de mayo de 2020
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tuve bastantes reticencias cuando, al ser animado a ver la serie televisiva Deadwood, me dijeron que se desarrollaba en el Oeste. A estas alturas, una de indios y vaqueros no invitaba a pasar grandes veladas. Pero a los pocos capítulos el enganche se antoja bastante fácil con esta serie. Los vasos de whisky (a una media de un chupito por minuto) o el eterno barro de la calle resultan de lo más creíble en esta historia del nacimiento de un pueblo en plena fiebre del oro americana, una ciudad sin ley ni orden ni nada que tenga que ver con una convivencia civilizada sino todo lo contrario, se presenta un tiempo y un lugar en que simplemente toserle a alguien podía suponer un tiro en el estómago. Pero sobre todo es la maestría con la que se enlazan la traición con la venganza, la crueldad con el honor, el amor imposible con el putiferio rastrero, y en definitiva toda la amalgama de pasiones y sentimientos humanos buenos y malos habidos y por haber, lo que hace de esta serie un placer cinematográfico ineludible.

Personificando, el auténtico cebo de la serie es el personaje interpretado por Ian McShane, un actor que se come la pantalla, a los demás actores -y eso que el plantel es muy bueno- y a todo lo que se mueva por Deadwood. Impresionante. Además, los escenarios, el vestuario y la ambientación en general es excelente.

Así que era cierto. En el siglo XXI, "una del Oeste" se revela como una de las mejores series de esta década. Y eso que al acabar la tercera temporada la productora cerró el grifo del dinero y nos dejó con la miel en los labios.
Flashboy
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2 de febrero de 2013
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"Deadwood" es una serie atípica desde su planteamiento y magistral desde su realización (no en vano es un producto con la marca HBO con todo el cariño y buen hacer que eso implica).

Nos situamos a finales de 1800 en un pequeño pueblo de paso que está fuera de todo ámbito geográfico y legal de los nacientes estados unidos y donde se pueden encontrar múltiples posibilidades de expansión por los colonos y las minas de oro. La salvedad con otro tipo de productos ambientados en el mismo periodo de la historia de EE.UU es que aquí no hay camisas almidonadas, jeans impolutos, revólveres brillantes y el buen corazón del que hacen gala mucho de los personajes principales de los western clásicos (El hombre que mató a Liberty Valance, La Diligencia, Solo ante el peligro, Río Bravo…), en Deadwood prima la rudeza, la ley del más fuerte, el ocre, la madera, la suciedad y el polvo, el ambiente está tan logrado que se puede mascar.

Los personajes que se nos presentan en sus tres temporadas son geniales, además contamos con el plus de que muchos de ellos fueron reales y así asistiremos de primera mano al asesinato de Wid Bill Hichcock (en lo que supuso la creación de la jugada de póker la mano del muerto, jugada ganadora que cuenta la leyenda tenía en su mano antes de esparcir sus sesos por el tapete).

Sin duda alguna si vamos a hablar de personajes hay que quitarse el sombrero y taconear ante Al Swearengen el dueño de uno de los salones del pueblo y desde este mismo momento uno de mis personajes favoritos en cuanto a ficción se refiere. Un hombre forjado a sí mismo cuya única meta en la vida es enriquecerse emborrachando a sus parroquianos y ofreciendo a sus señoritas, un hombre mordaz, ácido y con una peculiar visión de la vida que cuenta con una lengua tan afilada como los cuchillos que maneja con tremenda soltura... un personaje 10 que Ian McShane se apropia como una segunda piel.

También tendríamos que destacar al Sheriff Bullock que Timothy Olyphany compone con gran acierto, un tipo que resuelvo sus problemas a golpes y que tiene ciertos problemas con su abrumadora personalidad, su mirada congelaba a la de un hombre dicen las historias sobre él.

Y para acabar destacaría también el trabajo de Robin Weigert como Calamity Jane (si bien su historia dista mucho de la verídica, ya lo verán) tenemos a una antiheroína de toma y daca además de una máquina de soltar tacos, emborracharse y escupir.

Para resumir, "Deadwood" se trata de una de las mejores series de los últimos años tan recomendable para seguidores del género wesern como aquellos que quieran disfrutar de algo nuevo y sobre todo distinto realizado con valentía y saber hacer. Es una lástima que la serie cerrará sus puertas tras la tercera temporada dejando varios cabos abiertos y que no se concretaran aquellas películas que iban a contarnos el desenlace final de esta banda de forajidos de leyenda, prostitutas de gran corazón y sheriffs violentos.
Luke_Cage
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19 de marzo de 2020
7 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una pena, la verdad.

Me encanta la historia y la época... he leido casi de todo... he estado acampado en Blackhills, he trabajado en Deadwood... y me he llevado un chasco con esta serie.

Muy buena fotografía para un guión tremendamente flojo que bien podría ser una telenovela venezolana. Salvo un par de capítulos en general tiene muchos altibajos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
txumintxu
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