Al volante y a lo loco

"The Fast Lady" es una simpática y amable comedia británica que tuvo un gran éxito en el Reino Unido cuando se estrenó, situándose entre las doce producciones británicas más exitosas de la temporada cinematográfica de 1962/63.

Al igual que su antecesora "Genevieve" (1953), trata sobre el gusto de los británicos por los coches antiguos porque, el verdadero protagonista del film no es el escocés pelirrojo Stanley Baxter que interpreta al tímido joven que debe aprender a conducir un coche antiguo de carreras para ganarse el favor de una Julie Christie en uno de sus primeros papeles cinematográficos. Tampoco lo es Leslie Phillips, en su habitual papel de mujeriego sin escrúpulos, que supone la antítesis de Baxter al que intenta ayudar por interés. El verdadero protagonista de la película es "The Fast Lady", es decir el coche modelo Bentley Red Label Speed ​​de 4,5 litros de 1927 que da título y cuya presencia llena la pantalla.

Entre los secundarios podemos destacar a James Robertson Justice, en el papel del severo padre de Julie Christie, un actor británico de gran presencia que siempre está bien. Además hay muchos cameos de actores británicos de la época muy populares en su país, como Frankie Hower, Bill Fraser, Oliver Johnston, Danny Green, Fred Emney, Clive Dunn, Bernard Cribbins, Eddie Gray y Dick Emery. En una escena de carreras de autos aparecen los pilotos Graham Hill y John Surtees.

Aunque el guión no sea gran cosa y seguramente resulte un poco anticuado, "The Fast Lady" es una comedia simpática y muy entretenida que se ve con agrado gracias a algunas buenas cualidades que ya hemos comentado anteriormente.