Tu£sday

Narrada con una estética de serie inglesa de ladrones finos (tipo la muy entretenida de BBC, “Hustle”), tenemos a Philip Glenister y John Simm (imposible no esbozar una sonrisa de reconocimiento al volver a encontrarnos con los Gene Hunt y Sam Tyler de esa joyita llamada “Life in Mars”), como Earl y Silver, jefe y uno de los integrantes de una banda de muy profesionales ladrones de bancos conocidos como, “los cowboys” (Busch y Billy son los westernianos nombres de los otros 2 miembros de la banda).
Por otra parte tenemos a William (Linal Haft), un tipo al que su mujer le está poniendo los cuernos con su jefe y aunque le lleven les demonios traga por cobarde y julandron que es (como la vida misma).
Y por ultimo tenemos a 2 empleadas del banco, que ante una conversación telefónica que una de ellas oye accidentalmente sobre una esmeralda como un puño que va a estar en el banco, empiezan a tener ambiciosas ideas.
Lo que aquí se nos cuenta de forma un tanto farragosa (que no confusa si te tomas la ímproba tarea de seguir con atención la trama) es lo que paso dentro de ese banco el día que las tres facciones (cowboys, cornudo y empleadas), convergen el mismo día (el martes del título) con la intención de dar el golpe, narrada a través de saltos en el tiempo adelante y hacia atrás a modo de recreación de las declaraciones de todos los implicados ante el interrogatorio a que son sometidos por los detectives Laurel y Hardy (Gregor Truter y James Barriscale) tras ser todos ellos detenidos en el interior del banco (salvando las distancias, al estilo “Plan oculto 2006”), que al finalizar te deja con la sensacion de que has asistido a una insustancial y cortita (74 minutos sin los créditos finales) nadería que si bien no llega a molestar en excesivo, en ningún momento llega a dar la sensación de estar ante algo decente y a la que ni el reclamo de su a priori atractivo argumento y lo atractivo de contar con Philip Glenister y John Simm la salva de dicha calificación.