Orquídeas para mi esposa

Interesante peripecia que oscila entre la comedia y el drama que sirve a A.B. Crevenna para presentar una historia cotidiana de corte costumbrista en el contexto de la gran ciudad.
La película está filmada con mucho esmero, con sobresaliente profesionalidad, siempre tiene en cuenta los detalles y la técnica narrativa resulta muy eficaz a pesar de su sencillez.
También la ambientación y la banda sonora contribuyen a resaltar la faceta romántica de la trama y a proporcionarle empaque y altura cinematográfica.
J. Mistral y M. López desempeñan sus papeles de forma convincente y con gran sentido de adecuación a la intención de la obra.

Le ha pasado muy mal el tiempo, rancia por donde se la mire, la historia es terriblemente machista, aunque se deja atisbar una tibia critica hacia el machismo, pero muy leve, y siempre la esposa tiene que terminar cediendo y perdonando.
Lo mejor, la química de los protagonistas, y Maricruz Olivier, en su primer rol de importancia en el cine, su carrera sería muy irregular, y lamentablemente no supieron aprovecharla del todo en los últimos años del período de oro de la cinematografía mexicana, sino recién cuando está empezaba a decaer, ella comenzó a despuntar, pero aquí ya se ve su enorme talento y gran belleza.
Lo peor, los diálogos realmente imposibles, que hacen que las interpretaciones sean en general muy acartonadas.