Haz click aquí para copiar la URL

El secuestro del vuelo 375

Drama. Acción. Thriller Nonato (Jorge Paz) es un trabajador que, en 1988, se rebela contra el presidente de Brasil y las dificultades de un país en crisis al orquestar el secuestro de un avión comercial y atacar el Palacio de Planalto. Frente a esta situación, Murilo (Danilo Grangheia), el piloto del avión, se hace responsable de la vida de más de cien personas a bordo y, a pesar de toda la tensión creada por el secuestrador dentro del avión, ejecuta la ... [+]
Críticas 2
Críticas ordenadas por utilidad
12 de febrero de 2024
Sé el primero en valorar esta crítica
"O Sequestro Do Voo 375" es una correcta cinta brasilera, basada en una historia real, transcurrida en los años 80.
La cinta sabe utilizar bien la historia de la cual se nutre, y con ello es capaz de mantenerte tensionado en todo momento. Cuando menos sepas del caso real, mejor, ya que creo que la experiencia se potencia.

Me pareció correctas las actuaciones, y el rodaje del filme. Lo único que considero que podría haberse mejorado, es el uso de los efectos especiales, los cuales en ocasiones, cortan con el realismo de la película.

En síntesis, la cinta brasilera es una buena propuesta para disfrutar, aunque no la considero tan memorable como otras películas en aviones.

Seguime en @cine.delmundo para mas películas internacionales.
DEATHRACE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de febrero de 2024
Sé el primero en valorar esta crítica
Película brasileña que cuenta el caso de un secuestro de un avión, sucedido en 1988. Dirigida por Marcus Baldini. Le falta profundizar en el contexto y las características de los personajes.

Por Nicolás Bianchi

Originalmente titulada O sequestro do voo 375, este film brasileño ofrece un resultado dispar. Por un lado, su propuesta es atractiva, ya que, de por sí, una historia sobre el secuestro de un avión ofrece tensión y suspenso. Ahora bien, no están del todo bien desarrollados distintos elementos que hubieran servido para que el espectador se involucre más.

La trama es muy sencilla. Brasil ha salido hace poco de una dictadura, pero la inflación corroe al proceso democrático. El poder adquisitivo del salario se cae a pedazos y, entonces, los militares suponen una presencia amenazante. En este contexto, un obrero desesperado de nombre Nonato (Jorge Paz) secuestra un avión pilotado por Murilo (Danilo Grangheia) con el objetivo de estrellarlo en el Palacio del Planalto para asesinar al presidente José Sarney.

El principal activo de Nonato es una pistola que pudo ingresar al avión porque el aeropuerto desde el que despegó el vuelo no contaba con detector de metales. Mientras tanto, en tierra el caso es gestionado por distintos personajes en una torre control. Allí destaca Luzia (Roberta Gualda), una joven que intenta empatizar y negociar con Nonato para resolver este episodio.

La otra solución posible es la que ofrecen los responsables de la fuerza aérea. Según un protocolo que estos personajes citan, si se dan ciertas condiciones el avión debe ser derribado. Por este motivo, el vuelo comercial secuestrado por Nonato es escoltado por un avión caza de guerra. Entonces, la película propone un doble juego de tensión que se da tanto dentro del avión como en distintas discusiones que se producen entre miembros del gobierno, trabajadores civiles como Luzia y militares.

Ahora bien, en ningún momento el accionar de Nonato deja de parecer disparatado y absurdo. Quizás haya sido así en la realidad, pero hubieran venido bien algunos elementos más para comprender esto en la película. Se mencionan la pérdida de trabajo, los problemas para mantener a la familia y la vida dura en un barrio carenciado. El film no se toma la molestia de elaborar por qué este personaje decidió hacer algo así en un contexto en el que millones de personas viven las mismas circunstancias.

En cambio, se centra casi por completo en el accionar heroico del piloto Murilo. También es dispar lo que la película ofrece visualmente. En este sentido, están mejor resueltas las escenas en las que se puede ver al avión volando o maniobrando desde fuera que todo lo que sucede dentro. Por ejemplo, algo relativamente sencillo como un disparo de un arma de fuego se presenta de manera precaria.

En definitiva, El secuestro del vuelo 375 no consigue ajustar las clavijas de una narración estirada y predecible. Quizás le falte un concepto más interesante. Por ejemplo, la reciente La sociedad de la nieve (2023) gira en torno de la idea de cooperación para resolver un problema. Aquí, simplemente, se muestra a un piloto con gran destreza para realizar algunas maniobras arriesgadas en el aire durante una situación compleja.

Está en Star+. Contacto: [email protected]
El Golo Cine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow