Zyzzyx Road

La vida moral y mundana se podría reducir a un por delante o por detrás. ¡No sean mal pensados! Me refiero simplemente a eso que hace que los mortales declaren guerras, salgan vendiendo intimidades prostituyéndose, se hagan deportistas o se lancen a realizar cualquier cosa denominada ‘artística’ con un fin tan loable como egocéntrico y egoísta. Es decir, que su nombre figure ostentoso en un sitio donde el resto de seres mundanos les puedan observar durante la eternidad. Aplicado al mundo de arte cinematográfico o ganas algo (ya sea un festival, premio comercial o cierta reputación de índole gafapasta, friqui, cultureta o proge) o tu nombre acabará en un entrada anónima de imdb. Eso, o eres más malo y/o popular que Ed Wood o Uwe Boll y la legión de aspirantes es tal que no merece la pena intentarlo.

John Penney ha hecho algo (involuntariamente todo hay que decirlo) que ha cambiado la popularidad de una cinta de 0 al 250 por cien, ¿Cómo? ¿No se puede entrar por detrás o por delante en el libro Guinness? “Zyzzyx Rd.” únicamente será recordada como una película anecdótica: sí, es la famosa película que menos ha recaudado en la historia del cine, 30 dólares para ser exactos; aunque al parecer un miembro del equipo y una amigo suyo asistieron al único cine donde se estrenó, por lo que realmente su recaudación es de 20 dólares.
A John Penney, director y guionista, no le dio tiempo a llamar a sus familiares.

Con lo que ha sacado en taquilla no le da ni para una hora en un psiquiatra recién licenciado.
Recordar que el cine fue Highland Village Park Theater in Dallas, Texas. Se proyectó durante seis días y fue debido a las regulaciones del Screen Actors Guild para cintas de bajo presupuesto, a que no iba a ir directamente a DVD sumando también problemas de distribución a nivel americano. El resultado final ha sido un fenómeno mediático único en la historia (dudo que alguien lo intente de nuevo en EEUU, la familia de John Penney estará allí para boicotearlo).

“Zyzzyx Road” es una película bastante mala por mucho que el director haya querido vender la moto con el premio a la mejor película en Miami Independent Film & Music Festival. Salen Katherine Heigl y uno de nuestros viciosos favoritos adictos a los refajos de pago, Tom Sizemore.
Aparte de presentar un consolador como arma asesina la cinta aporta poco o nada y utiliza la esquizofrenia como toque argumental de reiterados giros imposibles. Piérdansela si pueden. Mala, por delante y por detrás