El héroe (C)
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22 de agosto de 2010
12 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me ha impresionado bastante esta cruda historia. El mensaje es claro: ofendemos a quienes nos quieren ayudar. Seguro que todo el mundo ha estado en la situación de querer ir con buena intención a ayudar a alguien y, a cambio, sólo obtienes desprecio y maldad por parte de la otra persona. En estos cinco minutos se refleja muy bien el mal fondo que pueden llegar a tener algunas personas que hacen daño gratuitamente y sin arrepentimiento. La bondad cada día es menos apreciada.
Hay tanta verdad en este cortometraje...
Saludos!
Hay tanta verdad en este cortometraje...
Saludos!
27 de agosto de 2010
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es verdad, es un gran corto, con gran moraleja-metáfora.
En sí, lo que pude apreciar e interpretar fue, en una corta frase "ninguna ley de nación sabe de la ley de la vida". Hay muchas cosas, quizá infundadas y más basadas en nociones y corazonadas, que no importan aparentemente y estoy seguro que más de una persona ha tenido el presentimiento, en un caso de la vida real, sobre tragedias y demás miserias futuras.
Creo que lo superlativo está en la lograda animación: sombría, oscura y desoladora, de hecho creo que el capitalismo nos va convirtiendo poco a poco en esos seres robóticos que se mueven en masas sin saber donde ni porqué, y mucho menos de poder disfrutar el simple respirar.
Brillante.
PD: lamento haberme puesto algo sentimental pero es el resultado de este gran corto...
En sí, lo que pude apreciar e interpretar fue, en una corta frase "ninguna ley de nación sabe de la ley de la vida". Hay muchas cosas, quizá infundadas y más basadas en nociones y corazonadas, que no importan aparentemente y estoy seguro que más de una persona ha tenido el presentimiento, en un caso de la vida real, sobre tragedias y demás miserias futuras.
Creo que lo superlativo está en la lograda animación: sombría, oscura y desoladora, de hecho creo que el capitalismo nos va convirtiendo poco a poco en esos seres robóticos que se mueven en masas sin saber donde ni porqué, y mucho menos de poder disfrutar el simple respirar.
Brillante.
PD: lamento haberme puesto algo sentimental pero es el resultado de este gran corto...
10 de julio de 2012
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mi gusto por la depresión alcanza sus límites, sin embargo este drama me es inadmisible en grado mayúsculo, será por su eficacia para transmitir la frustración, el cansancio, la apatía e incluso la tristeza plasmada en rostros y resultado de la rutina a la que se nos somete sin remedio.
El hoy afamado director recrea a la perfección una estación del metro de la Ciudad de México en las denominadas horas pico –indicios evidentes del tercer mundo bajo el cual se clasifica este país–, en el que a través de los trazos, iluminación y sonidos reafirma todo el desgano colectivo, en el que desarrolla una historia que podría romper con la exposición inicial y al que para no desentonar concluye en la misma tónica de fracaso.
Las escenas son un calco de lo visto en dichas estaciones, donde puede ocurrir absolutamente todo, un encuentro con la muerte o bien ser acompañante de la frustración.
El hoy afamado director recrea a la perfección una estación del metro de la Ciudad de México en las denominadas horas pico –indicios evidentes del tercer mundo bajo el cual se clasifica este país–, en el que a través de los trazos, iluminación y sonidos reafirma todo el desgano colectivo, en el que desarrolla una historia que podría romper con la exposición inicial y al que para no desentonar concluye en la misma tónica de fracaso.
Las escenas son un calco de lo visto en dichas estaciones, donde puede ocurrir absolutamente todo, un encuentro con la muerte o bien ser acompañante de la frustración.
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