Informe sobre la conducta del profesor Ishinaka

Bonita y agradable película del director japonés Mikio Naruse, algo alejada de los temas y modos de sus mejores producciones -fundamentalmente melodramas protagonizados por mujeres-. Dividida en tres episodios, unidos por la figura del respetado profesor Ishinaka, es un compendio de pequeñas anécdotas aparentemente intrascendentes pero que desembocan en tres sucesivas historias de amor descritas en el momento del encuentro, fruto del azar y la casualidad. Barnizadas con un suave humor, la película es un humanizado canto a la apacible y sencilla vida en el campo en contraste con la ajetreada y deshumanizada vida urbana. De las tres historias “La gasolina enterrada”, “Historia de una discusión” e “Historia del carro de heno” es la segunda de ellas, la mejor de todas y por si sola constituye una pequeña obra maestra, en la que la llegada de un espectáculo de bailarinas al pequeño pueblo provocará una discusión entre padres e hijos. Pese a su carácter menor, es una película muy disfrutable y, para los amantes del maestro Naruse, una cita obligada e ineludible puesto que cada brizna de la producción de este irrepetible director tiene siempre interés.