Urban Hymn

Jamie es una adolescente que vive en un centro de menores junto a su amiga Leanne, traspasando el límite y con una existencia poco convencional hasta la llegada de una nueva trabajadora social, Kate. Nos encontramos ante un film de cine social en el que se plantea el futuro cerrado de dos adolescentes perdidas en medio de la maraña burocrática, burocracia que tiene más interés en prolongar y contemporizar que en romper la situación y abrir nuevos caminos. Paradójicamente el cine social es interesante para personas que están interesadas en el tema, lo conocen y tienen sensibilidad en este aspecto; aquellos que no tienen interés y están poco concienciados no van a ver estas películas... Mi crítica contiene aspectos positivos y negativos, vayamos con los primeros.
El cine bajo mi punto de vista es empatía hacia personas alejadas de tu entorno, de tu medio, de tu sociedad, te acerca a realidades lejanas y diferentes, te transporta geográfica y psicológicamente por lo que Urban Hymn es un magnífico ejemplo para conocer el mundo de los adolescentes en centros sociales, para entender como son "educados", controlados, asistidos, ayudados, vigilados, estudiados, etc.; la película ayuda a reflexionar acerca del papel de la (no) familia, del abuso de drogas y alcohol, del papel de los tutores y asistentes sociales, de la violencia, de cómo es imposible despertar en la gran mayoría de ellos el menor atisbo de inquietud intelectual. El film es realista, emocionante y nos acerca a una realidad social que no se toca habitualmente en el cine.
Como aspectos negativos comentar que la estructura discursiva es la habitual desde hace siglos: Planteamiento, nudo y desenlace; el director transita por los caminos trillados del cine más convencional, no hay riesgos en cuanto a la estructura formal; Urban Hymn es una historia repetida dentro de la cinematografía, el guión es demasiado evidente y el desarrollo muy previsible; la música, que tiene un peso específico notable dentro del guión, no es nada del otro mundo, no entiendo esa obsesión de poner un piano en la mayoría de los coros, la mayoría de los coros son sin piano; tiende por momentos a la moralina fácil.
Vistos pros y contras aconsejo el film a los interesados en el cine europeo, el cine social (la película debe mucho a Lindsay Anderson, Tony Richardson y Ken Loach) y el cine que trasciende las vidas corrientes de la mayoría. Los apasionados de la ciencia ficción, tema bélico... ¡Va a ser que no...!

Ya se ha perdido la cuenta de las películas que se han hecho sobre este tema. Parece como si se quisiera crear mala conciencia en los espectadores responsabilizando a la sociedad de las desgracias de los marginados, cuando en realidad son personas tremendamente egocentristas para quienes todo el mundo tiene la culpa de todo menos ellos, importándoles un carajo llevar la infelicidad a los que tienen al lado. Los esfuerzos que deben hacer los educadores son muy loables y casi heroicos. De ahí a hacernos creer que a estas personas se las puede rehabilitar con el boxeo, el ejército o la "música" ratonera, media un abismo. Ya está bien de que se nos haga tragar una hora y media de demagogia pseudo ejemplarizante comercial que no lleva a nada..