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White Girl

Drama Una universitaria de juerga por Nueva York, en busca de droga y emociones fuertes, encuentra algo auténtico a lo que aferrarse y que podría perder más pronto que tarde. (FILMAFFINITY)
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Críticas 16
Críticas ordenadas por utilidad
8 de febrero de 2020
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
White girl es una peli que intenta...y vamos al grano: ¿intenta qué cosa? ¿Cual és el objetivo de todas las negras aventuras de esa prota? Porque se entiende claramente su intención, pero queda demasiado nublada la intención de las cámaras que la siguen.

La mirada narrativa decide, con cierta lógica, mostrar el mundo desde los ojos de esos jóvenes. El efecto es un arma de doble filo, porque la fluidez de las acciones está todo el tiempo aligerado frente a la enervante falta de propósito de los personajes. Los diálogos expresan esto de manera clara: ninguna de sus conversaciones tiene la más mínima consistencia. Son situacionales, de emoción inmediata y pasajera. Que el porro estaba fuerte, que qué buen viaje nos pegamos, que qué mal le cayo a fulana el último trago. Nadie tiene más nada para decir, y ésto le cae fatal a la solidez argumental. Todo el tiempo la peli pareciera estar por desintegrarse como si de una pompa de jabón se tratara.

Hasta que surge el conflicto y la protagonista desnuda una emoción un poco más sólida. Surge un propósito desde su voluntad y la trama se deja ver un poco más. A modo de autosacrificio, la prota se inmola una y otra vez para conseguir esa maldita plata. Pero sigue siendo tan "naif" e irresponsable que muchas de sus desgracias saltan como sucesos fácilmente evitables. El acto de entrega por parte de ella siempre oscila entre lo conmovedor y lo lastimoso.

La escena final desorienta un poco: no queda claro si se pretende dar un mensaje o si solo funciona a modo de resignación definitiva por cambiar el curso de las cosas. Entonces, White girl termina por someterse a las limitaciones serias de una jóven demasiado ocupada en no afrontar las cosas con verdadera puesta a tierra; hundiéndose en su propia falta de mérito.
Juan Rúas
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4 de diciembre de 2016
11 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
- Película sobre yonquis, mucha merca, cannabis, promiscuidad, camellos y todo el rollo decadente underground.

- White Girl presenta de trasfondo la decadencia de la generación de la posmodernidad yanqui, caracterizada por la carencia de filtro en cuanto al uso de las drogas psico activas y el sexo.

- Morgan Saylor hace un sorprendente trabajo como yonqui, promiscua y miserable adolescente; el cameo del veterano Chris Noth da poder a la historia; los demás actores de la cinta son amateurs, nada que resaltar.

- El argumento de la cinta pudo haber dado para más (spoiler), por lo que la directora perdió una buena oportunidad para crear un laberinto sin salida en la vida de la yonqui. Pudo ser un thriller para el recuerdo.

- Película de excesos (tal vez lo mejor de ella), sin censura ni filtro para abordar temas y situaciones de la vida postmoderna.

- Quizá resulta un poco ingenua en la forma en que se "resolvieron" algunos asuntos del argumento.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Héctor A Martínez
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20 de diciembre de 2016
8 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
'White girl' es una película más de tantas sobre la adicción a las drogas, con un guión visto mil veces: consumidor social que se convierte en adicto y acaba hecho un trapo, el que pierde una cantidad grande de cocaína y lo persigue quien se la proporciona, etc.

La peli se deja ver porque el argumento es simple y está lleno de caras bonitas y cuerpos jóvenes copulando, pero no busques nada más allá.
echulin
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3 de julio de 2019
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
White Girl.
Para mí la película es un retrato de la vida de alguien. En todo momento me sentí como un espectador que camina de la mano de los protagonistas, viendo lo que les pasa, pero sin entenderlos, como alguien que ves de lejos o que ves en una foto; sin ver realmente a la persona, solo lo que hace o hizo.
Creo que no hay ninguna profundización en los personajes, sobre todo de Leah, el personaje principal. En ningún momento entendí si realmente quería a Blue, o si únicamente estaba interesada en él porque era la única persona que le daba muestras de afecto. Jamas entendí el porque de sus adicciones, porque no tocaba fondo con nada, porqué podía continuar cargando más y más sin parar, sin toparse con pared o al menos haciendo consciencia por unos segundos. No sería necesario saber toda su historia, pero al menos si que pasa dentro de ella y el porqué de las decisiones que toma. Simplemente se le hace cool?, quiere pertenecer?, tiene una verdadera adicción?, le importa alguien además de sí misma?, tiene miedo?...
Simplemente no pude empatizar con el personaje y para mi, en una película de esta clase, es clave el poder entenderlas. Por ejemplo, en la película Cara de Ángel, de Vanessa Filho, podemos entender y empatizar perfectamente con los personajes, sin la necesidad de que tengan muchos diálogos. De alguna manera, su actuación, sus pocas palabras, sus preocupaciones, sus gestos, hacen que como espectador, yo haya podido empatizar al cien por ciento; pude comprender a cada personaje desde sus zapatos y esto, siendo una realidad sumamente ajena a la mía.
Sin duda, es una película que retrata el estilo de vida del mundo de las drogas, el sexo, el abuso y el alcohol de una niña joven, sin embargo, creo que me falto poder profundizar dentro de su personajes. Para mí fue más como un montaje de situaciones de la vida de alguien.
Alexa HDZ
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4 de diciembre de 2016
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sin duda lo más llamativo de la cinta es la interpretación de Morgan Saylor, en un papel que busca distanciarse del personaje de Dana Brody en "Homeland" A la pobre le cayeron palos por todos los lados por la tercera temporada, injustos palos que correspondían a los guionistas que no supieron qué hacer con su personaje. Escarmentada y dolida vuelca toda su furia y su talento aquí, dando vida a una universitaria neoyorquina, que en el verano, entre curso y curso se lanza en busca de emociones fáciles y fuertes. Drogas, alcohol, música, violencia, pandilleros latinos, abogados sin escrúpulos, su personaje se sumerje en una espiral de sexo. A la actriz no le importa salir desnuda en repetidas ocasiones y en grabar escenas de alto voltaje sexual.

Los que la comparan con la "Kids" de Larry Clark,.. para mí no está a la altura de aquella, quizá porque tampoco busca parecerse a ella. No busca trazar un perfil de la actual generación "millenials" tan sólo busca contarnos un pedazo de la vida de una joven que busca emociones fuertes, las encuentra, la exprime y a cambio sacrifica su ingenuidad.

Lo mejor es la actriz. Si buscaba distanciarse de su odiado personaje en "Homeland" lo ha conseguido. Si buscaba demostrar que tiene talento para ser actriz (la cruz de todos los niños contratados para dar vida a un personaje en una serie) lo ha conseguido.
Rufus T Firefly
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