Raptada

Por lo general las películas de carretera, suelen ser bastante decentes, ya que las situaciones que plantean, no deja que decaiga, y esta no es la excepción, suceden cientos de cosas constantemente, no te da un respiro, y te mantiene pendiente de las reacciones de cada uno de los personajes, estos podría decirse que toman giros absurdos por momentos, pero realmente el guión está tan bien estructurado, que uno no considera incoherente las reacciones de los mismos, por más que por más que de un minuto a otro, hagan lo contrario a lo que se creía que harían.
La historia que cuenta algo casi obligado en las películas de carretera, un secuestro, lo hace de una forma tan dinámica, y con unos diálogos increíbles, lejos lo mejor de la película, su guionista que también es el director, logra un gran trabajo, cada personaje tiene su momento de gloria, su frase certera.
Su humor negro, es excelente, realmente hacia rato que no me reía tanto con una película, se me salían las carcajadas.
Tal vez lo que más no sé si flojo, pero innecesario de la misma, es todo el gore que tiene, realmente eso le quita un poco de intensidad aunque suene contradictorio, ya que esos baños de sangre, esa espectacularidad de la violencia, le resta impacto.
Muy bueno el detalle de que toda la acción transcurra en la camionera, sin que la cámara se baje en 1 solo minuto de esas 4 ruedas.