No voy a aventurar nada de la trama, en todo caso previsible para el espectador avezado en este tipo de películas. Tan solo querría hacer mención a las críticas relativas al uso de la tecnología CGI. En mi opinión las escenas con el oso, si bien mejorables en algún aspecto relativo al movimiento del animal, alcanzan un estándar considerable a nivel de realismo en expresión y pelaje, es decir, me parecen sumamente convincentes y no desmerecen del conjunto de la película. En cuanto a Predator, es simplemente perfecto, su realismo (una vez se hace visible, claro está) es absoluto, y tienes la sensación de estar delante de un ser real.

Tengo una mínima queja con algunos detalles en peleas letales, en donde no queda claro qué ha pasado, y como acaban heridos algunos personajes. Pero por otro lado, se agradece que no exista un morbo excesivo y las escenas no sean en verdad cruentas. Esto hace que la película sea apta para niños a partir de, quizás, 12 años, aunque siempre va a depender de cómo encajen las escenas de violencia explícita; en todo caso no más cruentas, a mi entender, de las apreciables en la saga de El Señor de los Anillos de Peter Jackson, por ejemplo.

En relación al actor protagonista, en mi modesta opinión Malek se parece a Mercury como un huevo a una castaña... eso sí, con bigote. Curiosamente, Malek actuando como el Mercury de los 70 (con pelo largo y sin bigote) es más una réplica de Mick Jagger que del cantante líder de Queen. Pero hay dos rasgos que son definitivos a la hora de no "ver" a Freddie Mercury en la película: el ya comentado aspecto físico de Malek, tanto su cara, con un exceso de facciones delgadas y ojos saltones (y claros), como su cuerpo, demasiado delgado y bajito en comparación al resto de la banda, algo que llama especialmente la atención en la etapa de los 80, cuando Freddie, ahora con bigote y pelo corto, se caracterizaba por tener una cierta corpulencia que para nada se aprecia en la película... Y el segundo aspecto que para mí consigue que en ningún momento llegue a creerme que estoy frente al cantante originario de Zanzíbar es la falta de carisma de Malek; si algo caracterizaba a Mercury era su capacidad de "comerse" al público, de transmitir potencia y simpatía a la vez... con una sonrisa totalmente cautivadora, mientras que Malek, a pesar de sus encomiables esfuerzos imitando los gestos del cantante, llegó a hacerme creer durante el Live Aids que tenía enfrente a un joven Antonio Alcántara haciendo la imitación de su vida. Lo siento, pero no. Esta es la única razón por la que la película no se merece una puntuación más alta por mi parte: una actuación encomiable que no ha conseguido traer a la gran pantalla al genio de Mercury.

Por lo demás, los guionistas, con el beneplácito de los productores Brian May y Roger Taylor (parece que John Deacon ha mostrado poco interés en la película), han cambiado diversos hechos en el transcurso del metraje, seguramente intencionadamente para conseguir mayor fluidez y ritmo, que sin embargo para algunos resultan chocantes. Por ejemplo, la banda nunca se molestó con Freddie porque él deseara grabar un disco en solitario, de hecho, por aquellos años, Roger Taylor ya había grabado un disco aparte de Queen y Brian May haría lo propio. Tampoco se reunieron a causa del macro-concierto Live Aid, ya que por aquellas fechas, de hecho, se encontraban de gira. Finalmente, a Mercury se le diagnosticó el SIDA en 1987, dos años después del Live Aid... la licencia, no menor, que se han tomado en la película ha sido relacionar la considerada mejor actuación de rock de todos los tiempos, la efectuada por Queen durante ese concierto, con el hecho de que Mercury supiera y hubiera hecho saber a sus compañeros de banda el diagnóstico de dicha enfermedad. Para algunos críticos, se trata de hecho de un gesto bastante deplorable.

He echado en falta también una mayor presencia de la inventiva y el genio como compositor de Mercury durante la película... Un músico tan excepcional, no solo vocalmente, sino también como compositor, acompañado de una banda también sobresaliente, debiera haber mostrado mucha más musicalidad, mucha más genialidad.... y quizás le habría dado menos protagonismo a su introversión y sus miedos/inquietudes ante su despertar homosexual.

Finalmente, me hubiera gustado que hubiera habido alguna referencia a la participación de Queen en la banda sonora de la película Los Inmortales, de Russell Mulcahy, la cual sí fue un acicate para que el grupo se reuniera y regresara musicalmente a sus orígenes épicos, con cortes como Who Wants to Live Forever, Friends will be Friends, o One Year of Love. O el hecho fascinante de que Mercury, sabiendo que le quedaban pocas semanas de vida, compusiera y grabara en el estudio sin parar para darle a sus compañeros todo el material posible para futuros discos... Así, Innuendo se publicó el año de su muerte, y Made in Heaven 4 años después, con joyas como la canción que le da título al álbum, It's a Beautiful Day o I was Born to Love You.