Tras ver 'Señales' tu visión del mundo puede cambiar. Puedes dejar de mirar siempre hacia adelante para, de vez en cuando dirigir tu mirada hacia un lado, incluso girar completamente el cuello y mirar atrás. 'Señales' nos ayuda a no despreciar los pequeños momentos que vivimos, lo que vemos, escuchamos, olemos, saboreamos o tocamos. Nos ayuda a ser partícipes de nuestras experiencias vitales para transformarnos en seres más completos y mejores. Para hacer mejor nuestra vida a medida que la vamos viviendo. Magistral.

Un aplauso por aquellos que hacen las cosas con honestidad.
'Los Pitufos' es una película hecha con honestidad. Con grandes profesionales. Sin pretender aturullar a los adultos con continuos guiños que los niños no entienden, teniendo incluso más derecho que otras producciones infantiles (Pixar y Dreamworks) debido a los añitos que ya acumulan los pequeños seres azules.
Una película infantil con personajes con los que los niños se puedan identificar (Pitufo Torpe), secundado por los Pitufos más carismáticos (Papá Pitufo, Pitufina, Filósofo, Gruñón y la nueva incorporación (valiente)), con unos adultos correctos en su papel de anfitriones (Neil Patrick Harris y Jayma Mays) con personajes excesivos, barrocos (Sofía Vergara) y con un malo GENIAL (con mayúsculas).
Gargamel (Hank Azaria) da una lección de interpretación de comedia sublime. El ochenta por ciento de la película se lo pasa dialogando (en realidad 'monologando') con personajes que realmente no existen (Azrael y Los Pitufos) con una intensidad y credibilidad pasmosa.
Una película es buena, no por ser trascendente y épica. Ni profunda y emocionante. Ni por tener un sorprendente final.
Una película es buena cuando es honesta. Cuando cumple lo esperado.
'Los Pitufos' es buena.
PD: Al menos una nominación al Globo de Oro al actor de comedia para 'Hank Azaria' sería también honesto (y justo).

La película merece toda la suerte del mundo en los Oscar. Es encomiable la valentía al dar relieve a un tema olvidado e ignorado, como tantos otros que suceden en esos países que actúan como meros figurantes en esta mala película en que se ha convertido nuestro mundo.
Iciar Bollaín nació para hacer cine.
Alberto Iglesias es un genio.
Karra Elejalde, excelente.
Juan Carlos Aduviri, todo un descubrimiento.
Luis Tosar, lo siento, pero se ha tragado un palo el tío.