Heroes es como las demás series de moda, las más vistas (como Prison Break, Lost, 24 y alguna que me olvido). Es decir, un producto que podría ser interesante pero que se convierte en mediocre al ser comercial.

La idea original de la historia es muy buena, interesante, pero todo se desvanece ante una trama exageradamente estirada (para que vos, amable espectador, consumas 845 capítulos y te saquen todo el jugo posible a lo largo de cuantas temporadas te aguantes), con muy malos actores, ademas de estar mal elegidos para cada personaje (el que definio el casting me parece que se tendria que mudar de serie, mas precisamente a la celda sin luz de Prison Break!) y un guión bastante dificil de creer en sus giros. Pero mas allá de todo, no es una serie mala ni mucho menos, tiene algún que otro atractivo, es muy agradable a la vista y medianamente entretenida (esto es muy subjetivo igualmente) pero lo que a mi no me hace consumir esta serie es básicamente la exageracion de la duración de la historia. Esto es algo que no soporto, porque lo considero una burla hacia el espectador, el querer exprimirlo a ver cuanto capítulo se trague, lo que provoca inverosimilitud y una consecuenta disminución de la calidad. En manos de Showtime, la productora de Weeds y Dexter, esta hubiera sido una tremenda serie.

No se equivoquen, esto no es Lost ni Prison Break ni Heroes, ni ninguna de esas series comerciales sobrevaloradas que engañan continuamente al espectador. Me sorprendió que en una crítica positiva de Dexter se la compare con esas series tramposas y engaña-espectadores (por no decir otra cosa). Dexter es un espectáculo inteligente, bien narrado, bien actuado, realista y creíble, a la vez que ameno a pesar del tema macabro que trata. Y con unos toques humorísticos finos y de calidad, bien sádicos e irónicos. Tal como ocurre en la otra joya de Showtime, Weeds.

Dexter desborda calidad por todos lados. Tanto en sus actores, excelentes todos en su rol, desde el protagonista hasta los secundarios (Masuka es un genio) hasta por la puesta en escena, pasando por un guión bien planificado, bien dosificado, bien desarrollado, original y con mucha sorpresa, sin caer en salidas tramposas o muy licenciosas como ocurre en otras series como las que nombre anteriormente. Aunque claro está, nada es perfecto.

Desde el inicio, se nota que Showtime (productora de esta serie) no busca una serie que se consuma a sus espectadores, como esas series con 25 capítulos por temporada y 45 temporadas, cuyo guión parece que se va escribiendo capítulo a capítulo y dando vuelta en círculos en el desarrollo de la trama, sino que ofrece un buen número de capítulos (12) que no sature ni alargue excesivamente la trama, evitando una disminución automática de la calidad.

Sobre el protagonista, creo que está muy bien lograda la relación que éste tiene con los espectadores. Creo que se lo puede ''dejar querer'', incluso por momentos uno se ríe de sus comentarios o de sus acciones, sin llegar nunca a la banalización.

Por último, siempre creo que es necesario aclarar en las críticas de las series hasta que capítulo y/o temporada uno vió, porque la valoración a veces decae con las temporadas, o puede subir también. Por mi parte, terminé de ver la primera temporada completa.

Cuando a la fecha ya se hicieron 834.651 películas con la 2º Guerra Mundial como contexto, se supone que las nuevas deben mostrar algo diferente. A Los Falsificadores le falta emoción (¡y cuánto!), ritmo, verosimilitud (mirá que para tirar al diablo una historia que fue real...) y actuaciones. Quizás sea que, como he dicho antes, ya se han hecho tantas películas de la 2º GM que uno espera otra cosa. Pero Los Falsicadores me resultó una película totalmente innecesaria, y que no la puedo agarrar desde ningún sentido. No transmite ni provoca nada. Hasta con películas de 2 o 3 puntos te puede pasar que te quedás pensando en ellas unos minutos, pero a ésta como sacás el DVD del reproductor, la olvidás. Lo único que se aprecia es que no está contaminada por lo comercial, y resulta en una buena cantidad, auténtica.

Considero que esta película es una obra importante dentro de la historia del cine, pero también creo que en gran parte ese mérito se debe al momento en que fue realizada. Es para admirar el coraje y lo oportuno de Chaplin y los que hicieron esta película de hacerla en ese momento histórico, pero considero que la misma no es tan brillante como se la considera.

Los gags, hoy en día, resultan un tanto tontos. Que es algo que se repite en mucha películas clásicas. Hoy ya no nos reimos por ej. de que le caiga un huevo en la cabeza a un tipo, secuencias como la del avión, que Chaplin se viva cayendo o situaciones similares. Por mi parte, prefiero un humor un poco más elaborado. Además, los gags son repetitivos hasta casi el hartazgo y la burla resulta muy exagerada. Está bien que se parodie a Hitler y Cia., pero hoy en día me resulta un tanto tonto el humor que se utilizó en ese momento. No es muy irónico, es más bien simple, directo y algo banal también. No hay mucho para pensar, no hay mucho de ironías bien elaboradas, sino más bien humor simple. En general vemos a Hitler hacerse el tontito. Está bien, hay algunas escenas interesantes como la competencia de egos con Mussolini pero no muchas más que resulten críticas ácidas, irónicas y finas.

Gran parte de mi nota se la lleva el coraje de hacer una película como ésta en ese momento y el gran discurso final de Chaplin como el barbero, porque después considero que la película me resulta un tanto mediocre por el tono humorístico desarrollado. También considero que le sobra metraje.

Esperaba mucho más de esta película. Por las calificaciones, por las críticas (solo una ''negativa'' entre tantas), porque Wilder ya es uno de mis directores favoritos (solo vi 6 o 7 películas hasta ahora, pero quiero seguir viendo todas), y porque mismo durante el trascurso de la película parece venir lo ''bueno''. Pero a mi gusto, no termina de llegar. La historia me parece muy plana, no tiene demasiados giros dramáticos. Desde el principio hasta el final no es mucho mas que ver a un alcóholico tomar y tomar y caer y caer, sin siquiera intentar cambiar su destino. No me termina de cerrar, aunque reconozco que el tema del alcoholismo está tratado muy seriamente, que la película se deja ver tranquilamente, que los diálogos son muy buenos y que la actuacion de Milland es soberbia. Es una buena película pero no más que eso.