'Sully' es la historia de un hombre que merecía una película, el capitán Chesley Sullenberger; le doy las gracias al gran Clint Eastwood por haber llevado a la gran pantalla este relato que, eso sí, no me ha parecido (ni mucho menos) de sus mejores trabajos. Tom Hanks cumple con creces en el papel de un atormentado piloto que, a pesar de haber salvado a 155 personas aterrizando de manera forzosa un avión comercial en el río Hudson, verá como los medios de comunicación y las corporaciones implicadas en el caso harán lo que sea por sacar tajada del asunto. Clint Eastwood critica con fiereza a la prensa, siempre interesada en generar opinión pública a toda costa con tal de avivar el debate y sacar provecho; y a las empresas que todo lo enfocan desde un prisma frío, calculado, burocrático, siempre alejándose del aspecto humano.

La reflexión acerca de la actuación del capitán Sully en el accidente invade la trama y el espectador elige jurar lealtad al personaje interpretado por Tom Hanks, pues se muestra (tal vez de manera demasiado evidente) cómo hizo todo lo que pudo cuando el resto de alternativas al aterrizaje en el río se desvanecieron. La película falla aquí, pues se vuelve previsible (sí, es un biopic, pero se espera más) y el drama flojea cada vez más. La subtrama de la esposa de Sully y los flashbacks se vuelven prescindibles, pues no aportan ni volumen al protagonista(la primera) ni una llave para abrir una puerta más adelante (los segundos).
El tercer acto es el más pobre de los tres, con una resolución poco convincente, o como mínimo poco "dramática", asemejándose los minutos finales más a un reportaje que a una película.

Por último, los efectos especiales: El avión volando chirría mucho, resultándome imposible creerme varias de las secuencias que en teoría deberían ser más espectaculares.