La escena en la que Bruce trae la luna con una soga invisible es tremenda.
La escena en la que Bruce hace que el comentarista hable mal, es para morirse de la risa.
Una de las escenas que me hizo reir es el reportaje a la viejita en las cataratas.
Y para empezar, te atrapan con el reportaje a la panadería (muy bueno, aunque espero que esa leche sea falsa, no es bueno desperdiciar así cuando tantos desearían tener una gota de lo que tiraron ahí) y el final: "y no se olviden que la vida que salven, puede ser la mía..."

La pelea en el hielo es tremenda (la desesperación de la gente que está por caerse al agua, ese ruidito del hielo "crash, crack, crac" es emocionante).
La actuación de Keira es impresionante (cuando Arturo le arregla la mano, ¡Qué dolor!)
No se si estoy muy de acuerdo con el Arturo que eligieron, pero me termina cayendo bien.
Las partes en que la emoción te llena de dolor, de amor, de rabia, de ganas de que sean libres, de lástima, de compasión... sobran en esta película.

Las partes mejorcitas de la película son donde aparece el jinete sin cabeza.

Los tornados son sensacionales. Y la mejor cuando el tornado hace volar a una vaca y a un camión.

Ridley Scott hizo de Orlando Bloom todo un Russel Crowe, y eso no está bien, aunque es mejor un Orlrussel Bloowe que el Orlando original.
Las partes de amor las encuentro muy parecidas a las de Glaiador, la parte del principio de esta palícula (esa parte en que van en caballo en medio de una - tarde o madrugada, con Ridley uno nunca sabe lo que es) y la imagen es muy azul (que eso me gusta de Scott, pero tampoco la pasión para que lo use en todas sus películas; y esa nievecita que cae despacito sobre los actores, es muy común de Scott).
En fín, si les gustó Gladiador (pero si les gustó mucho), entonces no pierden el tiempo viendo esta película.