Muchos critican a Spielberg por ser un "director comercial", y lo pongo entrecomillado porque sería harto discutible (¿acaso Hitckock no llenaba las salas de cine?).
No voy a discutir que Spielberg sea una mina de oro, pero tampoco se puede discutir que después de ver esta película la imagen del aventurero haya pasado a ser la del Dr. Jones con su gorro y su látigo (aunque el atuendo haya sido copiado en otra película "El tesoro de los Incas", así como alguna escena como la del mapa de la Sala de Almas).
¿A ver cuánto directores pueden hacer una película divertida, entretenida, con la acción y el humor justo, y que durante dos horas no te deje ni pestañear y cuando sales del cine te parece que has sido tú quien has estado estabas en la selva o en el desierto?.
Parece que ni no haces algo transcendental y con mensaje no eres un buen cineasta y la película no pasa de ser un producto de simple consumo.
La saga de Indiana Jones, y esta película por encima de las otras tres, te recuerda que el cine es, por encima de todo, entretenimiento, y si encima lo haces con esta calidad, pues mejor que mejor.
TODO UN CLASICO que será revisitado por nuestros descendientes y seguro que apreciada como se merece.

Película pretenciosa y mala donde las haya. No la salva ni la presencia de Al Pacino, absolutamente salido de tono e histriónico (véase la esperpéntica y hasta estúpida escena final). Si lo que se quería hacer era criticar el sistema judicial, con las absoluciones por defectos de forma, la búsqueda del poder y el dinero antes que la justicia o lo absurdo de las leyes que se aplican, bien podría el Sr. Jewison y sus guionistas haberse exprimido más el cerebro y no realizar una película con tópicos y lugares comunes, a veces salidos de tono.
Si eres un fan del Sr. Pacino, mejor no lo veas en esta película para que no baje muchos puntos en tu escala, y si no te gusta, eso que te ahorras.