Haz click aquí para copiar la URL
You must be a loged user to know your affinity with Plácido Eldel Motocarro
Críticas 647
Críticas ordenadas por utilidad
Críticas ordenadas por utilidad
9
2 de abril de 2021
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando el mundo se encuentra patas arriba, cuando la vida vale menos que las balas usadas en detenerla, mientras los poderosos conspiran; un sólo hombre, un policía del ejército de ocupación alemán en Varsovia (Omar Sharif) se empeña en hacer justicia al cadáver de una prostituta polaca, brutalmente asesinada por las manos de un psicópata; además las sospechas recaen en tres generales alemanes.

Éstas son las premisas de una historia de misterio en la que los fríos y azules ojos de Peter O´Toole, dan una prueba más de su genialidad como actor. Estamos ante uno de esos magníficos relatos que tanto abundan en la escuela británica del séptimo arte.

La película se ve del tirón, engancha hasta el final.

Indaga en la perturbación mental y en la psicopatía, como empezó a hacerse en el cine llamado psicológico en la década de los sesenta, tras Psicosis de Alfred Hitchcock (daré un ejemplo de esto en el spoiler).

Además de O´Toole y Sharif, un elenco de estupendos secundarios, entre los que destacaría al siempre eficaz Donald Pleasence, completan el reparto que tan bien interpretan la trama de esta filmación.

La recomiendo fervientemente, sobre todo a los amantes del cine policiaco de investigación.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La trama psicológica alcanza su cenit en la escena en la que el personaje de O´Toole, visitando un museo en la ciudad de París, se siente reflejado en un autorretrato de Vincent van Gogh.

En el final de la película se representa la ironía de cómo un ya anciano criminal de guerra, que siente orgullo por las miles de muerte que ha causado sin que la justicia de los hombres se preocupe por ello, se ve obligado a suicidarse por la perseverancia del espíritu de un hombre al que asesinó hace ya muchos años en la Francia ocupada cuando iba a ser detenido por el asesinato de dos mujeres olvidadas, mientras los generales se detenían unos a otros en el transcurso de un golpe de Estado, tras el atentado a Hitler en la guarida del lobo.
28 de septiembre de 2023
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con, no demasiada espectacularidad, y, bajo presupuesto, pero con una brillante narrativa y una esplendorosa fotografía, Maté, nos conduce hasta el desfiladero de las Termópilas, donde el rey Leónidas de Esparta junto a trescientos espartanos más y unos pocos aliados, defenderá a Grecia y a la civilización occidental, de la satrapía persa que representan, el Rey Jerjes y su hueste de Inmortales… Y en la voluntad de unos pocos hombres, en el valor de sus convicciones; se cimentará, una concepción del mundo, que terminará por circunnavegarlo y con el tiempo, a orbitarlo. Imponiendo su visión filosófica, a través, primero de Grecia, luego de Roma y después de los grandes imperios europeos, tras la era de las exploraciones, a lo largo de todo el Globo…

…Pero quizá me extendí demasiado, en explicaciones históricas, cuando, en realidad, lo que vamos a ver, sólo es una excelente película de aventuras sobre una batallas donde las flechas cubrirán el sol, algo, que no importará, demasiado, a los bravos espartanos, que se limitarán, a luchar a la sombra.
22 de agosto de 2022
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Siempre recordaré, en este drama policiaco, a Romy Schneider bajo una gabardina de charol negro, color que hacía resaltar la belleza de sus ojos, o bajo un sombrero de caballero, con sólo a ella debajo, mientras se bañaba, posando y sonriendo ante una cámara fotográfica manejada por Michel Piccoli, quien junto a la actriz alemana compusieron a la pareja de personajes con más química entre ellos que pocas veces más he hallado en una pantalla. Pero además de esta deliciosa añoranza, “Max y los chatarreros”, es un magnífico policiaco francés, aunque está más cerca de “la nouvelle vague” que de aquel cine galo de acción, generalmente protagonizado por Belmondo o Alain Delon. Y aunque no es un thriller trepidante, tampoco es una película lenta. En ella, recorremos un café al que no le faltan similitudes con el de “Irma la dulce”, y hallamos una partida de gin que me retrotrae a otra similar en “El apartamento”. No me atrevo a dilucidar si son homenajes o simples coincidencias (me gustaría pensar lo primero). O esto, tal vez, sólo sea, el producto, de haber visto demasiado cine de aquellas épocas.

Una historia que al final nos conmueve, una trama en la que todos sus personajes no dejan de ser víctimas, ya sea por ellos mismos o por las circunstancias. Un cuento de gánsteres y policías, donde no es fácil determinar entre buenos y malos, o dónde se halla más la deslealtad, si en los antros del hampa o en los buros policiales.

Pero sobre todo es un drama. Un drama en el que se va dibujando una atracción entre dos personajes que en un principio se relacionarán por un puro interés egoísta, y que según se acercan al final, desatarán sus pasiones, sabiendo que jamás llegarán a buen puerto.
25 de mayo de 2021
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Al final de su carrera, Yul Bynner, participó en algunas películas de bajo presupuesto y con mero interés comercial, y he aquí que una de ellas, en concreto “Almas de metal” (Westworld, Mundo del oeste, en su título original), se convertiría en una obra de culto en la ciencia ficción. En mi opinión esta calificación no es siempre garantía de buen cine, y éste es uno de esos casos; aunque es de justicia reconocerle su originalidad, su sorpresa inicial. La sorpresa de hallar un parque de atracciones para adultos en el que desinhibirse de los bajos instintos. Pero esto se aguanta sólo durante media hora, y una vez desatados los acontecimientos su relato sólo sigue interesándonos durante un rato más, perdiéndose en, la mitad restante, buscando sorprendernos con un final que nunca encuentra.

Se la nota su bajo presupuesto sobre todo en unos elementales efectos especiales, y en los parcos decorados, situación que resuelve; con sencillez y falta de pretensiones.

Película para mitómanos talluditos, entre los que me hallo, e interesante para que la echen un vistazo, a quienes les gustase la serie Westworld (año 2016), cuya primer temporada, yo al menos, hallé interesante. Éstos, cuando sean jóvenes, seguramente les decepcionará pero al menos sabrán que no hay nada nuevo bajo el sol, y que la mayoría de las veces, en el mejor de los casos, sólo mejoramos lo que ya fue inventado; en el caso de la narrativa, el teatro y el cine; seguramente desde las tragedias griegas sus obras no han hecho más que repetirse.

Le otorgo un siete, pese a sus deficiencias ya mencionadas, en honor al grato recuerdo que de ella tengo, y de la impresión que me produjo a una tierna edad, algo, que marcó hacia ella una subjetividad de la que no puedo, ni quiero, prescindir; pero sí de la que creí correcto avisar.
29 de mayo de 2021
7 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me senté a ver esta película creyendo que vería otro remedo a socaire de “Pánico en el estadio” (Charlton Heston, 1976), como fue la también rodada al año siguiente a ésta, “Montaña rusa”, algo que tampoco me hubiera desagradado, pues ambas me gustaron. Pero, ¡ostia!, “a socaire” sí, pero sólo eso; ésta es muchísimo mejor. En ésta se definen los personajes. Unos personajes con motivaciones, motivaciones creíbles, convocadas por las destrucciones personales causadas por los horrores de las guerras. Un agente israelita (Robert Shaw) que actúa por patriotismo y que esboza también un pasado de dolor pero al que aún le queda la suficiente compasión como para no matar a una mujer a sangre fría. Una mujer (Marthe Keller) fuerte y decidida, convencida de una causa que jamás traicionará. Una causa que ésta abrazó a raíz de un sufrimiento, del recuerdo de una destrucción familiar que causaron sus enemigos. Un hombre (Bruce Dern) destruido durante un despiadado cautiverio de seis largos años y por el olvido, la incomprensión, y el desprecio de sus compatriotas.

Personajes que vemos transcurrir en un elaborado thriller muy bien conducido, muy en el estilo de los años setenta, por John Frankenheimer. Y cuando parece que este relato ya comienza a hacerse largo se nos aparecen unos veinte últimos minutos finales, electrizantes. Unos veinte minutos con una concatenación de escenas de acción a una velocidad impresionante a un ritmo frenético, y si excluimos su limitación con ciertos efectos especiales, una tan bien encadenada, larga, e impresionante secuencia tan sólo es comparable con aquella tan fascinante que se rodó, casi dos décadas más tarde, en “Heat” (1995, Robert de Niro, Al Pacino).

Una sorpresa escondida, una cinta concebida para ser una segundona pero que se rebeló a su destino, y al menos en profundidad, sobrepasó con creces a su hermana mayor.
Más sobre Plácido Eldel Motocarro
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para