Por eso le doy un nueve.

Hasta Wall-E, creí que Pixar había llegado a lo más alto y no podía superarse a sí misma.

Y me llegan con esto, que me queda ¿tengo que bajarle un punto a Wall-E porque no le puedo dar un 11 a Toy Story 3?

No tengo la menor idea si alguien vaya leer esto, y no me importa, aunque me doy cuenta que algunos escriben como si las masas siguieran ansiosas sus comentarios, o si algún prestigioso diario se diera una vuelta por acá de vez en cuando buscando críticos harto conocedores...

Pixar toma una historia y un cierre predecibles, y no sólo nos lo cuenta de la manera más entretenida posible, si no que nos acaba sorprendiendo con todo eso!

¿La trama, situaciones y personajes son trillados y 100% Hollywood?, sí!, ¿El Final es predecible?, sí! ¿La película es más para adultos que para niños? SÍ!!!!

¿Eso realmente importa? para nada!, Pixar tiene tres palabras mágicas contra eso; CREATIVIDAD, ORIGINALIDAD y NARRATIVA.

Lecciones que serían muy didácticas pero aburridas con la típica historia de princesas cantantes de Disney -y hay lecciones aquí tanto como para niños como para adultos-, y una historia simple -que no aburrida-, son narradas magistralmente, y los niños, quizá algo asustados a ratos, saldrán felices dispuestos a cuidar mejor sus juguetes unos, o incluso a donarlos los otros.

Quizá los que buscan historias grandilocuentes, de esas que sólo los grandes conocedores del cine entienden y nadie más, saldrán decepcionados, ellos se pierden del hecho que el cine es para entretener a las masas, y que el arte no se valora por la cantidad de tomos en los que se apoye, si no la cantidad de corazones que llegue a tocar, y esta película es arte, arte y entretenimento puro, y eso, al menos para mí, hace de la gente de Pixar logre lo que muchos con años de estudio, y otros con más dólares que inventiva, simplemente no logran.

Esta película logra dos cosas que busco. me toca, y por otro lado, estimula mi imaginación, pocas películas lo han logrado.

Más aún, he de confesar que hace bastantes años que una pelicula no lograba emocionarme realmente, y Toy Story 3 lo logró.

Michael Bay no decepciona a nadie, ni a fanáticos ni a detractores.

Quizá (quizá) el peor error sea ir al cine con la esperanza que Bay intente retomar el camino del bien luego de sumirse en el lado oscuro, ganándose el título del director más efectivista, prefabricado y predecible de la actualidad (pero el más redituable de este grupo), si van con esas espectativas, o si siempre han sido detractores de Bay, les espera una violación visual de casi tres horas. Si les encanta el cine de explosiones, tomas espectaculares, trama archiconocida, y predecible, y el cine para desconectarse, pasarla bien y olvidarse de la realidad un rato, Bay no los defraudará.

Lo bueno.

Acción, mucha acción, tomas espectaculares de las que uno espera en una cinta de acción 3D, más villanos, más robots, y casi tres horas para olvidarse del mundo. Los dinobots, aunque exagerados, cumplen su papel de darle algo de frescura a una trama demasiado prefabricada, además de una (una más) inyección de espectacularidad.

Lo mejor.

Un 3D bien aprovechado en tomas espectaculares (nadie va a ver a Shakespeare en 3D ¿O Sí?), Mark Wahlberg, quien no sólo ha dado muestras de ser un héroe de acción, sino que tiene una tesitura más amplia en drama y comedia (aunque incluso se podría decir que se le desaprovecha). Nicola Peltz, no está tan buena como Megan Fox, pero aún es bastante guapa, y es un poco mejor actriz que ésta (pero sólo un poco) y que la barbie parlante de Rosie Huntington. Las referencias a ciertos elementos clásicos de transformers que los fanáticos más antiguos agradecerán (spoiler)

Lo malo.

Escribir "Michael Bay" ya nos anticipa una serie de defectos (o virtudes, al gusto) que no decepcionan, cada cliché de Bay es potencializado; al grado que se autoreferencia (no faltará quien diga "esto ya lo vi en Armaggedon, y no estará muy equivocado), más aún, Bay se da el lujo de tomar pincelada de quienes han intentado seguir sus pasos en el cine de bluckbusters de robots y destrucción sin sentido.

Lo peor.

Una vez más, fuera de Optimus Prime y a ratos Bumble Bee, el resto de los robots no pasa de ser una pila de pedazos de metal destinada a ser destruída, más de una vez te preguntarás cual es ese robot, como diablos se llama, qué está haciendo ahí en específico, y si acaban de destruir al que crees, aunque se moderaron un poco las tomas de "pelea.pedazos de metal volando-no sé cual robot es cual" y se ralentizaron algunas tomas, este problema subsiste. Dos grandes actores como Stanley Tucci y Kelsey Grammer desperdiciados en villanos unidimensionales, previsibles e intrascendentes (nuevamente, nada que no sorprenda de Bay). La cinta es demasiado largo, algunos (no habituados a Bay o al 3D) se quejaron de dolor de cabeza tras la violación visual. La presentación de los Dinobots peca de absurda y tardada (otra cosa es verlos en acción).

Lo raro.

Los dinobots me recordaron la obra del escultor coreano Yong Ho Ji (no me extrañaría que estuviera entre las "influencias" de Bay).

Sigo en spoiler.

El inicio es más que elocuente, una comunidad casi de cuento de hadas, colores, casitas de madera, jardín, mucha risa y alegría, casi a la perfección el paradigma que nos vende la TV del american way of live (aunque la película sea europea).

Y sin embargo, todo es una sucia careta que sólo esconde los arraigados prejuicios de la sociedad, y dónde el normal resulta ser el raro, simplemente porque procede según le va dictando su corazón.

Me extraña que esta película tenga tan pocas críticas, será que el prejuicio contra la homosexualidad prevalece 13 años depués.

Pero como siempre digo, libérese de sus prejuicios, y esta película le ayudará a hacerse un profundo sicoanálisis respecto a su rol en la sociedad, yendo más haya de la homosexualidad.

¿Soy realmente correcto con mi proceder?, ¿cuantas caretas tengo que ponerme cada que me planto ante la sociedad?, ¿Hago lo que quiero o lo que los demás quieren que haga?, ¿hago lo correcto o lo que los demás consideran correcto?, como digo, más allá de la homosexualidad, pareciera que todos tenemos algo guardado.

Creo que todos podríamos identificarnos con Ludovic en el aspecto de esos sueños de niño a los que tanto nos dijeron "no", que nosotros mismos de adultos acabamos por decírnoslo también.

Lo único que no acabé de digerir fueron las fantasías en el mundo de las hadas, vamos, nunca he sido gran fan de Disney, pero si se centra en la determinación de Ludovic ante la adversidad, eso pasa a un plano muy secundario.

La animación es mala, y la forma en que se plantean los prsonajes, es pésima, además, la temática es típica de película de acción americana. y de las malas.

Aparte, el doblaje de la versión que vi era peor que pésimo, el Sonic Boom era traducido como "sonido bum", y Guille los arrojaba como si fueran chinampinas.

Lo peor es que en una ocasión vencen a Bison arrojándole un tambo encima, y en una ocasión Chun Li apaga un incendio con unas patadas giratorias, riículo.

En la segunda temporada, hacen a Guille de lado y se centran más en Ryu y Ken, aunque dándole más importancia a Ken (el gringo, claro) y menos patética que la primera.

Saludos.

Recién cité esta película por sus efectos de mala calidad, es mala, y he de decir que no me acuerdo ni en qué termina, no llega ni a palomera, si quiere que su hijo el día de mañana sea fresa, emo, punk, friky, o el equivalente futuro de alguna de las actuales tribus urbanas, no dude en mostrársela.

Creo que me quedé dormido, no estoy seguro, la pasaron en TV, creí que era una película directa para TV, no puedo creer que la pasaran en cine, y menos en 3D. En mi casa no hay niños ya, soy el más joven, y en edad que las tías dicen "ya deberías de sentar cabeza hijo", así que no creo que vuelva a verla nunca, ni para ver el final.

Saludos.