Esta película reúne varios buenos ingredientes. Por una parte la parte personal de alguien a quien han despedido y que se preocupa por los demás.

Por otra parte un intento de robo y atraco, su preparación, la estrategia, todos los pasos a seguir durante el proceso. La acción del acto y la intriga que siempre ofrecen estas situaciones.

Todo ello aderezado con humor. Estando juntos Ben Stiller y Eddie Murphy no podía ser de otra forma.

Podemos valorar muchas cosas pero yo me quedo con que es una serie mítica, de esas que pasan los años y la seguimos recordad. Quizás no sea la mejor serie, ni la más elaborada pero se sigue recordando.

Es más Emilio Aragón y Lydia Bosch formaran parte siempre del recuerdo de mucha gente gracias a esta serie.

Emilio es un tipo inteligente y que siempre ha sabido llegar a la gente y hacer con su show y sus papeles que sean momentos agradables cuando él ha salido en la televisión

Los cazafantasmas sólo su nombre hace pensar una película divertida y llena de acción. Si le sumas Bill Murray la cosa promete.

Pero en mi opinión esta película es decepcionante, aburrida, lenta, más centrada en una historia de amor sin sentido que en la acción y en cazar fantasmas. Unos cazafantasmas que casi no cazan fantasmas y practicamente no hacen nada que haga de ella una película interesante.

Mucho mejor la serie de dibujos que veía de pequeño que esta mala versión.

Su primera temporada fue genial, situaciones con tensión, con intriga con mucha acción. No me perdía ningún capítulo y eso que no soy mucho de ver este tipo de series.

Pero eso fue la primera temporada, las siguiente ya no ha sido la mismo.

Es una serie que está sobrevalorada por su buen inicio que ha acabado siendo una serie mediocre.

Hay películas que marcan una infancia, que de pequeño las puedes ver muchas veces y que cuando creces parecen de poca calidad pero son las películas que de pequeño te entretenían y te lo hacían pasar bien.

Entre esta descripción Beethoven uno más en la familia tiene un espacio destacado y como tal hay que valorarla. Una vez crecidos no las vemos igual pero lo que cuenta es lo vivido antaño con ellas.

Película familiar, por momentos entrañable y con sus momentos gamberros: película divertida