Haz click aquí para copiar la URL
España España · Molina de Segura
You must be a loged user to know your affinity with Lizzypride
Críticas 14
Críticas ordenadas por utilidad
Críticas ordenadas por utilidad
24 de agosto de 2024 2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película aúna lo que suelo considerar dos defectos del último cine: la excesiva duración de las películas y la constante revisión de relatos ya contados. Creo, que el primero me afecta más que por razones físicas (las lumbares y el coxis no me dejan estar sentada tanto tiempo como antes), porque creo que un buen guion no es el que más dice, sino el que más sugiere. En cualquier caso, he de confesar que las casi tres horas de metraje de esta cinta se me pasaron volando y eso que no es una película rápida, sino que se recrea en los cuadros, en la luz, en algunos diálogos y primeros planos. No es fast-food cinematográfico y, aún así, no causa ese cansancio que te hace agitarte en la butaca, mirar la hora en el móvil o echar de menos tener comida para entretenerte masticando. Y lo logra, y ahí paso al segundo defecto, a pesar de que todos o casi todos conocemos con más o menos detalle el argumento de El conde de Montecristo, porque esta historia de traición y venganza ya ha sido versionada en series y filmes franceses y no franceses, por cómics de culto, por famosos personajes de animación amarillos,... Incluso, si no se ha leído la novela, como es mi caso, pocos estábamos ayer en la sala con el cerebro virgen sobre lo que íbamos a ver. ¿Es que hay huelga o sequía de historias nuevas? Quizá. Pero para sentarme a ver La trampa (qué larga se me hizo), prefiero que me vuelvan a contar lo que un día Alejandro Dumas convirtió en novela. ¿Os acordáis cuando el personaje de Hugh Grant lo sugiere al de Julia Roberts en Notting Hill que pruebe con una adaptación de Henry James? Pues eso, que la profundidad de un clásico permite tantas lecturas que te sientas y, si se ha hecho bien el trabajo, como ocurre con De la Patellière y Delaporte, te parece que estás viendo algo nuevo.
La película es una superproducción sin superestrellas, por lo que el dinero se ha gastado en el vestuario, las localizaciones, la escenografía,... Es posible creer que se está en la Francia napoleónica con menos medios, por supuesto, pero dudo que la inmersión sea tan profunda como la que yo viví ayer. A eso contribuyeron también la fotografía y la música. ¡Qué música! Ya la tengo en mi spotify, pero mi coche, no es un palacio, ni un barco de madera surcando el Mediterráneo. Este verano casi visito Marsella y me disuadieron. Quiero ir a Marsella, ahora, pasearme por el puerto, comer en la terraza de una mansión bañada por la luz del sol y nada por esas aguas cristalinas. Diría de cabalgar, pero es que no sé.
Si tengo que buscar un anticlímax, estaria en la elección de algunos actores. En general, están correctos, incluido el protagonista, aunque la falta de estragos del tiempo sobre ellos me chirría un poco. Sin embargo, la pareja de Haydée y Alberto no me resultan creibles, por exceso y por defecto.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Y tampoco veo lo de las caretas con las que adopta las distintas personalidades Edmundo Dantés. No sé cómo lo resuelve Dumas en la novela, pero es una historia de época y hay que ser fieles al espíritu de la misma. Que esa autocaracterización la haga Batman con su dinero en la futurista Gotham, es aceptable. Que la haga un conde del siglo XIX, pese a su dinero, rompe el realismo que tan bien se consigue.
En cuanto al significado profundo, hay un tema secundario, pero que está presente en las distintas partes de la película, que es el poder y el dinero. La historia se desarrolla en un momento histórico donde el poder de la sangre empieza a ceder por el del dinero. Sin embargo, creer en la igualdad sin ningundo de estos escudos, fue el principal pecado de Dantés en la primera parte, y ni el amor de Mercedes era aval suficiente. Su actitud constrasta con la humildad de su padre y los castiga a ambos. Sin embargo, ese no es el quid de la película. Decir que el tema es la venganza, sería certero, pero limitado, porque la sed de venganza, es un sentimiento y, como demuestran en Inside out, todos están llenos de aristas. Uno de ellos es cómo establecer la frontera entre venganza y justicia, porque esta es necesaria, aunque pueda ser dura; y otro, en el que aquí se insiste, es si la venganza revierte en felicidad al que la consigue o si lo pudre por dentro. El abate, todavía en la mazmorra le advierté qué ocurrió con los miembros de la orden. Victoria elige la vida. Su sobrino elige la muerte. ¿Qué elige el conde en realidad?.
18 de diciembre de 2019 2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hay un lenguaje en el cine, una forma de comunicarse, que lo aleja de la literatura, y del teatro, al que esta película declara su admiración, y que nos permite sentir la lágrima de otro en nuestra mejilla, o experimentar la completa rendición en nuestros músculos. Noah Baumbach me ha contado en apenas dos horas como dos personas, Nicole y Charlie, se enamoran, comparten veinte años de sus vidas y se separan. Pero las imágenes y las palabras no sólo narran, sino que te envuelven y te inmiscuyen hasta tal punto que duelen, que sientes ese amor frustrado y ese asombro ante la ruptura. Pero Baumbach no podría haberlo conseguido sin Scarlett Johansson y Adam Driver. Ellos son totalmente Nicole y Charlie, no cualquier mujer y marido que deciden no seguir con su matrimonio, no un caso más, sino ellos. Y son tan generosos siendo ellos, que es imposible no sentir pena. También están esos secundarios que los cobijan y que llenan de vida los escenarios de Nueva York y Los Ángeles, destacando a Alan Alda, como abogado con valores y a a Julie Hagerty, como súper suegra.
La mañana siguiente a ver la película en Neftlix, seguía llorando al recordar algunas escenas. De camino al trabajo, en el coche, sonreía sola al pensar en otras. Que no os asuste la idea de que os espera un dramón lacrimógeno sobre el divorcio, porque os van a contar una historia llena de humor, ternura y sentimientos, que es lo que adereza todas nuestras vidas, pero que es mucho más bello cuando lo han creado para ti.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
- Mejores escenas: cuando vuelven del estreno y él le hace su crítica, y ella no llora delante de él; cuando él está tan confuso que no sabe qué pedir en la reunión ante los abogados y lo hace ella; cuando discuten y él apaga la luz antes de salir por la puerta; cuando él se rinde, con el brazo envuelto tirado en la cocina.
- Peores escenas: en panfleto feminista de la abogada, sobre la mayor exigencia a las madres y Adam Driver cantando Being Alive. Para algunas personas es la escena por la que merece un Oscar; yo la encuentro demasiado obvia e innecesaria, y que no canta bien ;)
23 de enero de 2022 Sé el primero en valorar esta crítica
¿Cómo se consigue un buen resultado? Desde luego creyendo que es nuestro deber conseguirlo. Y esta película es un buen ejemplo. Está tan mimada como la mesa que prepara Mr. Stevens, como la plata que limpia, como la discreción que guarda. Porque hay desvelo en el guión, en las palabras que contienen los dialogos, y también en los silencios, como cualquier buena partitura; hay rigor en la recreación de tenso momento histórico, con alusión a protagonistas que podemos rastrear en la Wikipedia y de sus posibles motivaciones; hay preciosismo en la ambientación y en vestuario, captado con una cámara que se hace cómplice de la luz y de los sentimientos; hay una banda sonora que contrasta con la sobriedad de lo que vemos y acompaña a las emociones contenidas, que se hace cómplice, con el espectador. Y, por supuesto, hay unos actores que dignifican a sus personajes. Es un honor poder sumergirse en esa mansión durante dos horas y ocho minutos, y abandonarla un poco más íntegra.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Creía que la escena en la que Clint Eastwood coloca la medalla en su furgoneta, con los limpiaparabrisas desbocados, el sonido del intermitente y el reflejo de la luz roja del semáforo, era el culmen del romanticismo en una despedida. Pero ver alejarse a Enma Thomson en ese autobús, encoge el corazón, de esa manera discreta en la que viven los personajes de esta historia. Lo mismo ocurre con la sensualidad de la disputa por el libro en el despacho de Hopkins. No hace falta piel, para sentir deseo.
Ésta no es una película de historia, aunque aprendamos más de historia que en un capítulo de The Crown. Es una película de personajes, de cómo les influye su pasado, sus circunstancias, y sus limitaciones, y de cómo eso marca sus decisiones.
Me encanta la sutileza con la que enfrenta al Sr. Stevens con su rival amoroso, mientras escuchan una canción. Cómo vemos qué tienen y de qué carecen cada uno de ellos.
¿Qué es de echar de menos a una persona? Así empieza la película. Pero como acaba es una invitación a creer que a veces se puede disfrutar de lo que queda del día, aunque hayamos tenido que hacer renuncias en el camino, siempre que no nos hayamos perdido a nosotros mismos.
26 de diciembre de 2021 Sé el primero en valorar esta crítica
Nadir y Simin son una pareja iraní que ha decidido separarse. Ellos mismos se sientan frente a nosotros y nos explican sus razones en la escena inicial, unas razones que parecen ser puramente localistas y ajenas a nuestra cultura y se nos ocurre que vamos a asistir al retrato costumbrista de los vericuetos que implica deshacer un matrimonio en una sociedad islámica. Y sí que nos paseamos por las calzadas de una ciudad persa, por sus hospitales, sus colegios, sus juzgados, y nos introducimos en los pisos de clase media y los comparamos con los de las clases populares, y vemos sus ropas, y nos extrañamos de algunas normas... Pero son el atrezo y los escenarios que usa Farhadi para crear un ambiente, y cundirá la desilusión si lo que se busca es la denuncia o la exaltación de una cultura. El protagonismo absoluto lo tienen los personajes, incluidos cada uno de nosotros, pues el director nos convierte desde el primer fotograma en jueces de una separación.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Cuando una relación se rompe, hay una tendencia a buscar culpables, a acusar al "malo" y a victimizar al "bueno". La cuestión es quién pone esas etiquetas y por qué. A la mayoría de las personas no nos definen hazañas heroicas, ni nuestro terrorismo sentimental, sino esos pequeños matices que van perfilándonos en cada una se nuestras decisiones cotidianas o en cómo nos enfrentamos a los conflictos diarios. Pues ahí tenenos a Nader y Simin, acompañados de su hija y el abuelo, cada uno con sus necesidades y sus carencias. Frente a ellos, aparece en escena una asistenta, con su propia hija y matrimonio a cuestas. Y pasa algo. No mucho. Algo. Pero lo suficiente para cuestionarnos la importancia de la verdad, el honor, la familia, la libertad, esos absolutos sobre los que ni siquiera el Corán parece poder ofrecer una total claridad, porque detrás estamos las personas.
En la escena final Nader y Simil vuelven a comparecer frente a nosotros. Ya ninguno habla. Pero tenemos todas las pruebas e indicios. Sin embargo, pocos jueces-espectadores se van a sentir capaces de ofrecer un veredicto sobre su separación. Yo no he podido.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para