Una película claramente producida para dar algo de trabajo a gente que está necesitada de ingresos en Hollywood, tened en cuenta que con ésto se justifica pagar a un montón de gente, si no lo creéis mirad los créditos. El cine no sólo de hace para gustar al espectador, hay muchos intereses económicos y sólo con vender el filme a unos cuantos canales de televisión cubren gastos, y ya se sabe que la televisión saca la pasta de la publicidad así que todos contentos, bueno... todos menos los espectadores, pero; eso que importa! Ya sabemos desde hace tiempo que somos lo de menos. El cheque más caro habrá sido el de Dolf Lundgreen seguido de una Denise Richards venida a menos, que por cierto con lo mona que es, se le está poniendo una expresión horrible en la boca. Dentro de unos años será candidata perfecta a madrastra de Blancanieves ó cualquier otra bruja guapa.
El tema de la credibilidad empieza a ser algo totalmente banal en el cine de Hollywood; aunque en casos como Fast&Furious al menos le dan importancia a la espectacularidad, pero en ésta peli ni eso, tan descarado que resulta hilarante y ya no te extrañaría ver aparecer de repente algún vampiro al estilo Tarantino, pero digno de comentar en spoilers.

Leyendo las críticas que hay, y ya no en éste si no en todas las películas, esta claro que cualquier película a unos les parece genial y a otros pésima. Lo que tira por tierra la frase de que; sobre gustos no hay nada escrito, aquí hay literatura para hartarse. Pero una vez más me planteo porqué ocurre ésto y nunca estamos todos de acuerdo en algo? Creo que una de las razones es porque hay dos tipos de personas, las que necesitan un porqué y las que no.
En éste film el "porqué" si es que existe, se lo guarda el director y deja que el espectador trate de adivinarlo, ya que está visto que hacer a un montón de gente preguntarse que coj..s pasaba, es una fórmula ideal para que alguien la califique de magnífica. Pero a otros muchos entre los que me incluyo, no nos vale con ese recurso.
Cierto es que en ocasiones maneja bien la tensión, sobre todo generando escenas constantemente en las que crees que va a ocurrir algo y finalmente no ocurre nada, esa es la tensión opresiva que algunos comentan, pero no es magia ni arte ninguno. solo me parece un truco del tipo que ha aprendido cuatro técnicas en la escuela de cine, y las explota hasta la saciedad. El desarrollo lento se cruza con brevísimas escenas que parecen sacadas de un videoclip de Marilyn Manson y que tampoco explican nada, hasta llegar al final de la película en que por fin se ven un par de acontecimientos explícitos, una chica que llora y The End. Es que ahora los demonios se han vuelto de un parco que lo flipas!
De verdad que si me dan a mi carta blanca para hacer cualquier cosa, sin tener que explicar nada al final, soy capaz de hacer la historia mas acojonante y terrorífica jamás contada, y mejor que ésto sin duda. Lástima que no considero ético, hacer pasar noventa minutos a nadie viendo algo que yo he creado sin darles la más mínima explicación. Directamente tiene pinta de ser la película rodada a partir de un cortometraje de 15 minutos (no sería la primera vez) y que al director y guionistas, tantos metros de cinta, se les han quedado un poco grandes.

No voy a decir apenas nada de la película que no hayan hecho ya muchos grandes comentarios. Por supuesto estoy de acuerdo con todos ellos. Pero lo que me ha llamado la atención, son las críticas negativas! Ya que en la mayoría de comentarios me da sensación total de que están hablando de otra película. Como si la hubieran visto de una forma totalmente diferente a los demás que nos ha gustado. Porque a los que nos ha gustado hemos sentido la película y nos hemos sentido partícipes de ella, porque el mensaje que tiene, a poco que tengas corazón... te llega, y en algún momento entiendes que el mensaje también es para ti y como encaja en tu vida, y sientes a Will Smith mirándote a ti a través de la pantalla, y sintiendo que tenías que ver esa película, por algo.
Los que solo han visto una película de golf, con un toque romántico y una moralina que aprende el protagonista, es que no se han dado cuenta de que esta película cuenta con el espectador para que sea también receptor del mensaje. Pero quien la ha visto pero no la ha sentido, es obviamente porque debe ser alguien que debe pensar que no tiene mucha sensibilidad, ó bien si la tiene, piensa que él no necesita de esos consejos que deben ser para otros pero no para mí. Evidencia de que entonces uno siente que es un campeón , un triunfador y estas cosas, estas lecciones sobre como buscar tu camino correcto y dar los pasos adecuados, no las necesitan ellos. Pues bien, les felicito por su inmejorable vida, pero el camino no acaba nunca. Pero dejan de perderse la oportunidad de conectar con lo más valioso de esta película; saber que hay que avanzar, superar los errores, los problemas y sobre todo, superarnos a nosotros mismos a sacar lo mejor de nosotros, a no conformarnos, y no quedarnos en el YO pasivo, en el YO a medias.
No se los demás, pero yo he encontrado unas cuantas cosas en mi vida que tenía pendientes de hacer, que quizás seguirían pendientes, si no hubiese visto ésta película. Y si una película consigue ésto con un puñado de nosotros, ya vale su peso en oro.

Es obvio que a la gente si le gusta algo le gusta, y si le gusta un helado de lentejas con pistachos, pues ¿Quien soy yo para decirles que tienen mal gusto? Allá se jarten!
Yo hablo por mi, no hablo de las diferentes emociones que me ha provocado durante el visionado, ni pienso que cambiarme el estado de ánimo de golpe sea algo digno de valorar, máxime cuando el cambio es a mal y de mal a peor, esta película se resume en cuanto a emociones muy similar a como un niño que sonríe agitando su algodón de azúcar, extasiado de felicidad subido al caballito del tiovivo y de repente pierde mano a la barra, con ello el equilibrio y por efecto de la inmisericorde fuerza centrífuga, va a parar con su frente y dientes contra el coche de bomberos! Si le preguntas al niño como lo ha pasado en la feria, probablemente ni se acuerde del algodón de azúcar, ni de los coches de choque, y si le mentas el tiovivo probablemente se ponga a llorar,
Esta es la maldita sensación que me dejó esta película, yo me encontraba en el 7 que le habría puesto, y aquella segunda parte me ha hecho quitarle los otros tres puntos hasta quedarse en un 4. Curiosos que el mismo efecto justo en otra gente ha hecho que la nota le suba hasta el 9 ó el 10. Pues sí, debió ser que la ví el día justo en que no me apetecía llorar.
Me gusta llorar de felicidad, con esas situaciones conmovedoras de entrega, incluso llorar de amor ó desamor, pero llorar por desgracias... ya hay suficientes en la vida real como para llorar por desgracias tan gratuitas, absurdas y forzadas como las de esta película.
Parece se que se puso de moda lo de "darle un giro argumental" a las películas, y ya con eso te vale para que la crítica te valore como un genio. Podía Clints Eastwood haber rodado la matanza de los Teletubies y al menos sentiría que se ha hecho justicia, pero hacer este truco tan barato en una película digamos seria, la ha convertido en una comedia de humor negro!

El título de la película que he puesto, la para mí, magnifica película interpretada por Will Smith, sería tanto la descripción del camino realista de la búsqueda de la felicidad, como el desarrollo ideal de una trama que intenta ser coherente con la realidad. En Bliss, el camino que propone el director es uno muy distinto, pero que igualmente nos hace enfrentarnos a la realidad, aunque ésta sea una mierda.
Normalmente soy de los que esperan que la historia en sí, los personajes y el desenlace tengan coherencia, lo que se diría un argumento redondo, y eso es lo que la mayoría de las críticas han reflejado. Pero casualmente hoy (desde hace tiempo tengo claro que cada película se siente diferente dependiendo del momento personal de cada uno) , pues me sentía menos pragmático y menos exigente, y posiblemente por eso la película me ha pasado bastante bien. A partir de la primera media hora en adelante, te das cuenta de que la película no esta hilada y tiene muchos flecos, pero creo que probablemente no lo pretendía, precísamente porque quería hacer constante esa sensación de irrealidad, como en los sueños no todo tiene que ser creíble para que nos parezca estar viviéndolo, en los sueños ocurren cosas extrañas que tienen más que ver con nuestras preocupaciones y emociones internas, y eso ocurre en los sueños, y un poco más allá en los "viajes" alucinogénicos. Lo que es en el fondo (a mi entender) el pilar fundamental sobre el que gira toda la película. La posibilidad irreal de sentirse bien en medio del desastre, y la de evadirse y encontrar la felicidad aunque solo sea momentáneamente y la lucha personal de cada uno por reconocer lo que es realmente importante, y si merece la pena la pena aferrarse a las buenas pocas cosas reales que se tienen, ó te dejas llevar por el camino fácil de perder el contacto con la realidad y tus seres queridos. Seres a los que no sabes si les quieres, les quisiste o no te importan nada, cuando uno deja de quererse a si mismo, pierde la capacidad de querer a los demás.
Quizás para muchos de nosotros que no tenemos esos problemas, la película no aporte nada, pero es una realidad de muchos suburbios de muchas ciudades, donde hay cientos y miles de personas atrapadas en ese mundo, donde tienen sus propios sentimientos secuestrados por sustancias químicas que les arrastran continuamente a vivir en una pseudo realidad, que les merma la conciencia y les hace ver Disneylandia mientras viajan en una cunda sucia y maloliente de vuelta de haber consumido su última dosis.
Quizás alguna de estas personas si vieran este film en un momento de lucidez, podrían cambiar sus vidas, pero me da pena el pensar que no serán capaces de entender nada.