Para hacerle creer que tiene un buen sueldo y que ha triunfado en la ciudad, Harold envía a su prometida un colgante y una cadena en un segundo envío. De modo que ella, pensando que está ganando mucho dinero y tiene una gran posición, decide ir a visitarle por sorpresa. El problema es que Harold apenas puede pagar el alquiler e incluso tuvo que quedarse sin comer para comprar la cadena. Cuándo ella se presenta por sorpresa en su trabajo, Harold se hace pasar por uno de los jefes y por una confusión, llega incluso a hacerse pasar el por el director. En un momento dado, escucha que el director le dará mil dólares a quién consiga atraer una multitud de personas a los almacenes y se le ocurre una idea para ganar ese premio y de ese modo no tener que contar la verdad a su prometida. Se pone de acuerdo con su amigo, que tiene facilidad para escalar edificios, para que al día siguiente escale el edificio en el que se encuentran los almacenes y, de ese modo, atraer la atención de una muchedumbre. Sin embargo, el día del evento, un policía con el que el amigo tuvo un desencuentro, estará esperando para detenerlo. De modo que acuerda que Harold subirá sólo un par de plantas mientras el amigo despista al policía y luego harán un intercambio sin que nadie lo note. Pero el policía no es fácil de despistar y, de ese modo, Harold acaba escalando poco a poco todo el edificio y encontrándose con divertidas situaciones y trabas en cada una de las plantas.

La verdad es que hay ocurrencias que, a pesar de los años, me han parecido muy divertidas:
- Cuándo al comienzo de la película, la casera va a cobrar y ambos se esconden colgados de los abrigos en la pared. Y luego Harold vuelve a tocar en la pared para que su amigo vuelva a esconderse y poder sentarse.
- Que se le ocurra hacerse el desmayado para que le lleve la ambulancia.
- Harold caminando a gatas por la tienda.
- Cuándo se contagia del gesto con las manos del vendedor al que compra la cadena.
- La forma de medir una yarda y media usando a la mujer corpulenta y la mujer delgada.
- La confusión del gato por la bufanda de visón.
- La ocurrencia del 'Kick Me' con tiza en la pared.
- El tablón de madera durante la escalada.
- El baile para deshacerse del ratón.

Y algunos momentos más.

Si no quieres saber cómo se rodó la película no sigas leyendo.



Aunque al parecer Harold estaba en buena forma física y rodó gran parte de las escenas de la escalada, fue un doble quien rodó las partes más difíciles. Para que ninguno de los dos estuviera en peligro, para rodar las escenas de las plantas más altas, se preparó un escenario con esas dos plantas en la azotea del edificio. De modo que con el ángulo adecuado, al rodar las escenas, se mostraban los tejados de la avenida y parecía que estuvieran escalando a esa altura. Pero la caída sería como mucho de dos o tres metros y sobre unos colchones.

Cómo curiosidad, Harold probó la caída con un muñeco, y éste rebotó en los colchones y acabó saltando por encima de la azotea y cayendo a la avenida. Y otro detalle curioso es que a Harold le faltaban tres dedos de la mano derecha, que perdió en una explosión grabando otra película. Y siempre rodaba con un guante especial para que no se le notara en ningún momento. Por eso siempre se agarra al edificio con la mano izquierda.
A Harold Lloyd le faltaban

La historia muestra muy bien la dinámica de la época: Dado que las mujeres generalmente no trabajaban, la única esperanza económicamente de una familia que sólo tenía hijas, era conseguir matrimonios ventajosos para ellas. Se muestra también cómo incluso el hogar familiar estaba en peligro, al no poder heredar las mujeres y, pasar por tanto todas las propiedades del padre a un sobrino, en caso de muerte de este.

La película trata de la familia Bennet que tienen cinco hijas y acuden al baile de bienvenida del señor Bingley, un soltero rico de la ciudad que viene de visita a su casa verano, con la intención de encontrarles marido a Jane, la mayor de ellas. Según se nos cuenta después, era costumbre que las hijas se casaran en orden de edad, o como mínimo, estaba mal visto presentar a las hijas pequeñas sin que las mayores estuvieran prometidas. En ese baile conocemos también a Lizzie, que se niega a representar el rol de dama de aquella época y demuestra ser inteligente, culta y con carácter propio. Lizzie conoce al señor Darcy, que acompaña al señor Bingley y cuya primera impresión es que se trata de alguien arrogante, orgulloso y que tiene por costumbre 'No bailar si puede evitarlo'.

Quizás la parte más floja del guión, es que desde esos primeros momentos del baile, es muy previsible lo que va a pasar en la trama principal, y cómo, probablemente, Lizzie y Darcy van a jugar constantemente al ratón y el gato. Pero he de reconocer que, al menos para mí, eso no me ha impedido disfrutar igualmente de la historia.

En la película hay varias tramas que se van entrecruzando, todas ellas relacionadas con alguna de las hermanas Bennet.

Jane, la mayor, prácticamente se promete en ese baile. Pero, en algún momento, Bingley vuelve a Londres sin terminar de llevar a cabo la pedida de mano. Su hermana además, le desaconseja totalmente prometerse con alguien de origen tan humilde con y esa familia. Jane se va a Londres un tiempo con la esperanza de verle allí, pero al parecer no consiguen encontrarse. Finalmente se vuelve al pueblo a vivir con su familia y, en un momento dado, Bingley volverá para prometerse con ella.

Lizzie va indignándose cada vez más con Darcy a cada historia o detalle que va conociendo de él. Pero, vemos que por otro lado también se va enamorando. Hay momento concreto en el que Darcy confiesa su amor a Lizzie y ella le recrimina sobre una historia del pasado con un amigo suyo. Y él además le confiesa que es quien fue responsable en parte de que Bingley dejara de cortejar a Jane. Por lo que Lizzie le dice que en la vida se prometería con él. Sin embargo, Darcy le deja una carta en la que explica todo, demostrando que en realidad ha sido 'prejuzgado' por Jane. En un momento dado, vuelve a interferir para volver a unir a Bingley y Jane, porque él también había juzgado erróneamente los sentimientos de Jane, y ayudando a encontrar a la hermana fugada. Demostrando su generosidad hacia la familia Bennet y su amor por Lizzie. Y, finalmente, ambos acaban comprometiéndose al final de la película. Con el padre de Lizzie apoyándola en la decisión.

La hermana pequeñas que se fuga con el capitán, amigo de Darcy y corre el riesgo de deshonrar a toda la familia. Acaba casándose con él, gracias a que Darcy le da una prima económica al capitán y el padre de la chica le promete una asignación mensual.

Vemos también cómo el señor Collins, primo de las hermanas, y heredero de las tierras y la casa familiar. Deseaba inicialmente casarse con Jane, corteja después a Lizzie al estar Jane comprometida, cómo ella se niega a seguir el rol de la época y le rechaza por no ser el tipo de relación que busca y cómo entonces acaba casándose con la mejor amiga de esta.

Y se nos muestran otros detalles como una madre vulgar, gritona y charlatana debido a su poca educación. La búsqueda constante de un matrimonio ventajoso y un esposo incluso entre los militares. La arrogancia de la aristocracia y un padre 'moderno' que apoya a su hija más rebelde.

La historia es muy original, y trata del directivo MacNamara de la sucursal de Coca Cola en Berlín Occidental que tiene que cuidar durante dos semanas, que después se convertirán en más de dos meses, de Scarlett, la hija adolescente de unos de los directivos de la empresa cómo un favor a este. Y a lo que accede, entre otros motivos, con la esperanza de, en agradecimiento, le trasladen por fin a la sucursal de Londres. Algo con lo que lleva soñando desde hace muchos años.

Se mezclan en esta trama principal, la subtrama en las que MacNamara intenta exportar la Coca Cola a la URSS, pero tiene que cancelar la operación porque no es aprobada en las altas esferas. Y el romance de MacNamara con su secretaria y sus problemas conyugales a consecuencia de ese romance.

La trama principal empieza cuándo los padres de Scarlett comienzan una gira por Europa con la intención de acabar en Berlín y recoger a su hija. Desafortunadamente para MacNamara, cuándo le llaman para decirle que llegarán a Berlín en menos de 48 horas, éste descubre que Scarlett ha estado escapándose por las noches a Berlín Oriental y acaba casada con Otto, un joven comunista. Por lo que teme que no sólo no conseguirá el ascenso y traslado a Londres que esperaba, sino que incluso es posible que le despidan de la empresa. Y emprende una serie de alocados planes para encontrar a Scarlett y hace desaparecer a Otto.

Su primer plan para deshacerse de Otto y evitar que los jóvenes huyan a Moscú, es regalarle a este un reloj cuco que toca una melodía americana, y poner un globo en el tubo de escape de su sidecar que ponga 'Rusos, Volved a Casa', para que le detenga la policía alemana. Y, una vez que consigue que la policía le detenga, pide a su abogado que anule el matrimonio de estos. Sin embargo, Scarlett se desmaya y el doctor le dice que está embarazada. Por lo que ahora tiene que deshacer todo el plan: Rescatar al joven Otto de la cárcel alemana, y volver a incluir el matrimonio en el registro. Para ello usará como cebo a su secretaria con la delegación rusa con la que estuvo negociando la exportación de la Coca Cola y la ayuda también de su asistente Alemán. Se internarán en un plan totalmente loco en la Alemania Oriental dando lugar a momentos realmente divertidos. Como el baile de Scarlett en el hotel ruso o la persecución de los coches.

Una vez que consiguen rescatar a Otto, hará todo lo posible por convertirle en sólo unas horas, en un joven de la aristocracia europea, comprándole la ropa y joyas necesarias, enseñándole modales e, incluso, comprando un certificado de adopción.

Finalmente, el joven Otto, que rechaza en todo momento el convertirse en un capitalista, pero accede por amor a Scarlett, simula tan bien su papel de aristócrata, que le dan a él la plaza de Londres, y a MacNamara la de Atlanta, contentando de ese modo este a su mujer. Y, la secretaria, acaba trabajando para uno de los representantes rusos.

La película tiene muy buenos gags. Prácticamente todos los diálogos son una sátira del capitalismo, el comunismo y algunas de las costumbres de la época. Y están elaborados de forma inteligente y con mucho humor. Además hay secuencias de tipo humor absurdo que han inspirado muchísimas de las películas posteriores.

Es cierto que la película, dada la época en la que fue rodada, tiene también bastantes momentos de humor machista, y muestra a las mujeres como meras mujeres floreros (la esposa de MacNamara), poco inteligentes (Scarlett) o interesadas únicamente en la moda (la secretaria). Pero eso se puede tomar también como parte de la sátira y crítica, y perdonar por ser algo histórico del momento.

El final es buenísimo, cuándo en el aeropuerto, MacNamara saca unos refrescos de una máquina expendedora y resultan ser de Pepsi.