La película es superior desde la primera escena, incluso las escenas que se repiten se hacen distintas por su propia duración o por las escenas que las suceden o preceden.

Menos acción en proporción al metraje total, más desarrollo de personajes, mas aire para respirar drama y entender la historia. Aunque la mayor parte de las escenas siguen siendo con la luz del atardecer…

La versión de 2017 me pareció muy olvidable, y sin embargo ésta me ha tenido enganchado.

Técnicamente y visualmente es la primera vez que veo el 3D también aplicado, no quiere decir que sea perfecto pero funciona realmente bien.
En cuanto a la narrativa, los episodios son sota caballo rey, dos personajes se enfrentan el primero parece que va a ganar, Tenemos un Flash Back de uno de los dos,el segundo se levanta y tumba al primero, usan las mismas frases Del tipo “yo soy el más fuerte “ Repetitivamente una y otra vez, es cierto que en el anime es un clásico, pero al ser las tramas tan escasas o aburridas y suceder las luchas tan constantes se hace muy cansino.
luchadores clásicos del anime de lucha, sin llegar a lo sobrenatural con mismas motivaciones entre ellos, ser el más fuerte, vencer a todos los demás, demostrar que los demás son unos débiles.
Las peleas son rápidas, las tramas son pasables, y el sentido del humor muy escaso o pobre.

Al ser un mundo distópico hay muchas cosas que explicar, esto se complica cuando presentas a muchos personajes a lo largo de episodios, alternando sus tramas y sus flashbacks hacen que todo sea algo lento.

No ayuda el se busque la belleza dramática constante, que hace que abunden planos largos, miradas intensas y moralinas repetitivas.

La tramas principales además tardan en suceder, sabes el objetivo desde el principio y van y vienen con otras cosas mientras lo primero nunca llega y el personaje principal es bastante soso, y su presencia se asemeja más a un Macguffin que aun protagonista.

En el cine el sentido del humor está infravalorado, por suerte hay alternativas y el mejor ejemplo es el anime, la primera temporada de One Punch Man es una obra maestra, una trama sencilla, un héroe misterioso, de corazón puro, físicamente tan sobrado que está hastiado del mundo pero con la cabeza justa para acordarse de respirar, los 3 elementos que hacen que los mejores (Superman, Goku…) quepan en cualquier historia notable (de qué nos serviría un Superman super inteligente, sería indestructible y las historias serían un tostón) bien, pues si le quitamos algún punto débil al personaje, sólo nos queda ofrecérselo a través de su frustración existencial, aquí es donde la serie despunta en su primera temporada, peor que en esta segunda le cuesta algo mantener.

Creo que la parte la mas esperada de la saga, donde deberían haber puesto mas recursos y cuidados, y se va todo por la borda con este director quizás demasiado novato?

Es un gran guionista, pero está claro que después alguien tiene que saber transmitirlos en un a película y queda probada la importancia de un buen director supervisando a los guionistas

He salido con ganas de ver alguna de las anteriores para emocionarme un poco