Como segunda entrega de la película original si deja algunas dudas, pero aun así es una película entretenida y visualmente magistral. Viendo la saga desde cierto ángulo, la película original no era exactamente una película sobre los Looney Tunes, sino más bien una película en la que el antagonista buscaba una nueva atracción, que en este caso fueron los Looney Tunes, que fueron escogidos por su gran popularidad y por eso tuvieron mucha participación en la película. En esta segunda película se va más allá de eso, adentrándose al universo de la Warner Bros, no solamente trayendo a los Looney Tunes de nuevo, sino también mostrando muchos escenarios y personajes de muchas películas y series creadas por dicha compañía, lo cual para un cinéfilo como yo es algo hermoso. Ver a muchos personajes de las películas y series que Warner Bros produjo a lo largo de los años reunidos en una gran audiencia es simplemente maravilloso. La única falla fue que no todos los Looney Tunes estuvieran presentes, lo cual sí llego a ser decepcionante, pero en este segundo capítulo ya no se trata sobre los Looney Tunes, sino del universo compuesto por todas las películas y series espectaculares que ha creado la Warner Bros y me encanta como han decidido ampliar eso. Se podría haber hecho mucho más y aunque no está a la altura de la película original, igualmente es un film decente y disfrutable. Mi calificación para esta película es un 8/10.

Se puede decir que muchas de las opiniones negativas que esta película recibe son de personas con un carente desarrollo intelectual, pero claramente The Queen Mary es una película que no fue hecha para el público promedio, ni siquiera para los críticos más convencionales. Aunque Gary Shore sigue siendo a la fecha un director novato que empezó su carrera con Dracula Untold, esta vez logro hacer una película que en términos cinematográficos es una obra de arte. Tiene una magistral calidad visual que se puede apreciar en la producción, especialmente en la historia ubicada en los años 30. Esta película usa una mezcla de técnicas cinematográficas modernas con un poco de técnica cinematográfica antigua. El uso de fotografías en algunas escenas son algo claramente extraído de las últimas películas de Martin Scorsese. No se puede dejar de lado la representación ficticia que incluyeron del icono del cine musical Fred Astaire en una estupenda secuencia de baile. Aunque tiene pocos jump scares, el terror de esta película se inclina a lo psicológico y lo ambiental. Eso da una sensación de que la película toma bastante de The Shinning y sabe aprovecharlo para que lentamente la experiencia se vuelva más surrealista. La película es realmente una experiencia visual atractiva. Aunque la trama se basa solo en un rumor de que el verdadero Queen Mary está embrujado, la película usó eso para crear un mito que la vuelven quizás la mejor película que se ha hecho de un barco embrujado. Seguramente llega a superar la cinta Ghost Ship que fue producida por Robert Zemeckis. Lo que hace que esta película sea muy poco convencional y que no sea del agrado del público promedio o mediocre es su narrativa. La película se divide en dos historias en diferentes épocas. La primera historia transcurre en los años 30 que va explicando como comenzaron los asesinatos de la introducción por medio de una familia. La segunda historia transcurre en la actualidad con una familia que se vuelve presa de la entidad del Queen Mary y que servirán como medio para explicar la mitología que hay en la película. Al estar las dos historias mezcladas, la película se vuelve críptica y hay que ir encajando las piezas. Ya en el tercer acto es cuando las dos historias se cruzan para cerrar la conexión y aclarar de forma indirecta la maldición del barco. Es fácil poder perderse debido a que la narrativa no es directa y guarda algunas cosas para dar giros inesperados. Aunque puede dejar algunas preguntas sueltas y otras cosas fuera para conocer más acerca del lore, The Queen Mary es una magistral película de arte y surrealismo que se aleja de lo convencional y ofrece una fascinante mitología. Una película bastante inteligente que cualquiera no será capaz de apreciar. Mi calificación final para esta película es un 9/10.

Fede Álvarez demostró ser un buen cineasta del género de terror con la recreación de Evil Dead y la saga Don't Breath. Aunque no tuvo mucha suerte con la novena entrega de The Texas Chainsaw Massacre que se estrenó en Netflix, hay que reconocer que tiene un buen estilo para hacer este tipo de películas. Esta séptima entrega de Alien logra poner en su lugar a la saga después de que Alien: Covenant no fuera tan convincente. Aun así, esta película aporta bastante al lore de la saga tomando en cuenta elementos esenciales de la saga. La participación de Ridley Scott en la producción se puede considerar un buen aporte y hasta una compensación para él después de Covenant.

Para empezar, esta película es una historia en solitario con personajes distintos, pero que conecta directamente con la primera película. Aquí explican qué sucedió realmente con el xenomorfo de la película original y al menos aclaran cuál era la finalidad que tenía la compañía con esta criatura. Siempre se pensó que la finalidad era usar al xenomorfo como arma, pero es claro que había algo más. Por algo es que se empeñaban en estudiarlos por muy arriesgado que fuera. Alien: Romulus se vuelve una pieza importante para comprender eso. Elementos fundamentales de la saga que la película toma son la hibridación que es relevante para el nacimiento de los xenomorfos y su material bioquímico visto en Prometheus y Alien:Covenant. La película tiene situaciones muy extrañas con las criaturas, pero tomando en cuenta lo visto desde Alien 3 hasta Alien: Covenant, la forma en que los xenomorfos son engendrados puede variar dependiendo del material genético que obtienen por medio de sus huéspedes. En Prometheus ya daban una pista sobre el objetivo de la compañía que era descubrir la inmortalidad con la biotecnología de Los Ingenieros. Alien: Romulus aclara bastante eso y aunque no se explica del todo como obtuvieron a los abrazacaras, lo único que se podría teorizar es que eso de algún modo puede estar vinculado con el final de Alien: Covenant.

Con respeto a la película en sí y su ejecución, hay que admitir que logra ser la terrorífica actualización que la saga necesitaba. En los escenarios, diálogos y escenas se pueden encontrar algunas referencias a las películas anteriores, especialmente a la original. No solo tiene ese suspenso y tensión que tanto caracterizaba a la película original, sino que ofrece una atmósfera muy orientada al terror. Se puede decir, que esta es hasta el momento actual la película más aterradora de la saga. No tiene el gore y la carnicería de la tercera y cuarta entrega o la de Alien Vs. Predator: Requiem, pero tiene bastante de la intensidad de la película original. Alien no contaba con muchísimos recursos en su momento, pero se las había ingeniado para ser una excelente película por medio del suspenso y la sutileza. Alien: Romulus logra hacer lo mismo en gran parte de su metraje con pocos personajes y un ritmo estable. La banda sonora incluso ofrece una muy buena ambientación de terror y tensión. Se puede apreciar el uso de efectos prácticos en algunas que logran convivir con el buen uso de CGI. A los xenomorfos les dieron un buen balance entre ser veloces y ser sigilosos.

El veredicto final es que Alien: Romulus es una digna entrega que aporta bastante al lore de la saga y aunque algunas cosas pueden parecer algo repetitivas, la película le devuelve a la saga su integridad de una manera aceptable después de 7 años de inactividad. Mi calificación final para esta película es un 9/10.

Esta sexta película logra expandir mucho más la franquicia, ampliando el legado de Ghostface y tomándose la molestia de conectar con las películas anteriores. Así como el mismo film lo expresa, es una expansión de la franquicia. De la misma manera en que sus predecesoras parodiaban o criticaban la forma de construir una saga, esta película describe muy bien la forma de ampliar una franquicia, yendo más allá de lo que uno ya está acostumbrado a ver en la primera entrega de una saga o sus secuelas continuas. Esta película juega la misma fórmula de Halloween Kills que es una versión alterna de la segunda entrega original. Además, puedo decir que tenemos más muertes y sangre y es extraordinario la forma en que amplía la franquicia tomando en los antecedentes que Ghostface dejó en las entregas anteriores. También hace bien en centrarse en el linaje de Billy Loomis, ya que desde la primera a la cuarta entrega solo se centró en el linaje familiar de Sydney. Ya en la quinta se empezó a explorar la línea sanguínea de Billy Loomis. La saga hace muy bien en tomar ese camino para profundizar más el legado que Billy dejó tanto en su hija como en la máscara de Ghostface. La historia de Sydney y su pasado está concluida y ahora toca explorar el linaje que Billy dejo a lo largo de la saga. Muy bien hecha realmente con buenas dosis de suspenso, esta sexta película ocupa un lugar muy alto junto a las primeras 2 entregas. Mi calificación final para esta película es un 10/10.

Basada en uno de los cortos relatos de Stephen King, esta película es una adaptación libre que narra una historia paralela a la ya conocida en el libro Night Shift. Aquí, la historia narrada por Lester es resumida en una sola escena para dar lugar a una nueva historia en la que el Doctor Harper no es el Boogeyman disfrazado como en el relato original. Aquí es un hombre común y corriente con dos hijas que van a ser las protagonistas de la historia. El Boogeyman de esta película deja a un lado las características más comunes del mismo y es presentado como la versión de aquel monstruo que se oculta en los armarios o debajo de la cama. El diseño de la criatura es bastante bueno y aterrador, mostrándonos un Boogeyman que acecha en la oscura y aparece para brindar unos buenos sustos. Aparte de presentar una muy buena actualización del monstruo del armario, la película toma en cuenta aquello que ha hecho del Boogeyman un ser muy aterrador para los niños. Se usa muchísimo la oscuridad como recurso ofreciendo un ambiente lleno de tensión. El miedo a la oscuridad siempre ha sido algo común en los niños y la película utiliza eso bastante bien, haciendo que cada vez que aparezca el Boogeyman acechando, sea una experiencia aterradora. La película de cierta manera revive perfectamente el terror de la infancia hacia la oscuridad y los monstruos ocultos en ella. Los efectos de sonido aportan muchísimo para la tensión y para cuando llega la hora de asustar. Es una película de terror muy bien desarrollada, incluso para ser de calificación PG13. Aunque sea una adaptación libre, es sin duda la película más terrorífica del Boogeyman hasta el momento. Mi calificación final para esta película es un 9/10.