You must be a loged user to know your affinity with samanosuke
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

4.2
4,895
2
30 de noviembre de 2012
30 de noviembre de 2012
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Discutíamos los colegas y yo (todos contra mí) por negarme a ver esta película. Me habían arrastrado casi por obligación hasta el cine, y yo prefería ver Up in the air o, incluso, por segunda vez Avatar, antes que ésto. Pero no tuve esa suerte, ya que no me equivocaba cuando les dije que iban a salir dándome la razón: "menuda mierda de película", repetían cada uno de ellos; una crítica tajante.
No conozco, he visto ni leído nada sobre Valdemar; por desgracia, tampoco he leído ni tan siquiera lo más mínimo de Lovecraft (error a enmendar pronto). Mejor: nada de comparaciones, ni tirarme de los pelos por ver lo que han hecho con el material original. No hace falta ninguna comparación: el film es malo de narices con o sin ellas. Lleno de actuaciones pésimas (de vergüenza ajena más de una declamación), con un ritmo lento y mal marcado, y una historia sin el más mínimo interés, en la forma en que se cuenta. Con detalles horrendos, como algún efecto especial (aunque sólo alguno; el resto la verdad que es sobresaliente, lo mejor de la película sin dudas), ese inglés Aleister Crowley que debía de ser nacido más de Cádiz que de Gibraltar, o el zepelín (?) en medio de la T4 de Madrid; méritos tiene por sí solo el clímax del final, que más que dar ganas de ver la continuación, a nosotros nos las dio de colarnos en otra sala para no sentirnos estafados.
Un producto nacional de los que siguen lastrando al cine español provocando comparaciones odiosas, con sus particulares tics y errores (desnudos sin venir a cuento -aunque agradecidos, que la prostituta estaba de buen ver- o la mala elección de actores -mención especial al de Los Serrano, aunque Laia Marull también merece un premio honorífico por su enfrentamiento contra el monstruo). La próxima vez, que les den al cine, a mis colegas, y a la madre que parió al guionista, director, productor, chico de los recados, maquillador y jefe de mantenimiento todo en uno José Luis Alemán. Menos mal que no se ha llevado subvención: así esta bazofia duele un poco menos.
No conozco, he visto ni leído nada sobre Valdemar; por desgracia, tampoco he leído ni tan siquiera lo más mínimo de Lovecraft (error a enmendar pronto). Mejor: nada de comparaciones, ni tirarme de los pelos por ver lo que han hecho con el material original. No hace falta ninguna comparación: el film es malo de narices con o sin ellas. Lleno de actuaciones pésimas (de vergüenza ajena más de una declamación), con un ritmo lento y mal marcado, y una historia sin el más mínimo interés, en la forma en que se cuenta. Con detalles horrendos, como algún efecto especial (aunque sólo alguno; el resto la verdad que es sobresaliente, lo mejor de la película sin dudas), ese inglés Aleister Crowley que debía de ser nacido más de Cádiz que de Gibraltar, o el zepelín (?) en medio de la T4 de Madrid; méritos tiene por sí solo el clímax del final, que más que dar ganas de ver la continuación, a nosotros nos las dio de colarnos en otra sala para no sentirnos estafados.
Un producto nacional de los que siguen lastrando al cine español provocando comparaciones odiosas, con sus particulares tics y errores (desnudos sin venir a cuento -aunque agradecidos, que la prostituta estaba de buen ver- o la mala elección de actores -mención especial al de Los Serrano, aunque Laia Marull también merece un premio honorífico por su enfrentamiento contra el monstruo). La próxima vez, que les den al cine, a mis colegas, y a la madre que parió al guionista, director, productor, chico de los recados, maquillador y jefe de mantenimiento todo en uno José Luis Alemán. Menos mal que no se ha llevado subvención: así esta bazofia duele un poco menos.
Miniserie

7.0
5,063
6
30 de noviembre de 2012
30 de noviembre de 2012
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Interesante la propuesta de esta miniserie de ciencia ficción, en la que una llave maestra abre todas las puertas, para dar a la Habitación. Desde allí, la puerta de la habitación es capaz de llevar a quien posea la llave a cualquier lugar en el que exista una puerta.
Los 6 capítulos aquí emitidos (3 dobles en realidad) nos presentan la búsqueda de Anna, la hija de Joe, a la vez que la de los objetos desde diferentes frentes. Y es que, mientras algunos creen que reuniéndolos todos se podría llegar a hablar con Dios, otros avecinan el fin de esta realidad, y son por tanto muchos los intereses tras ella.
Entretenidos en todo momento, lo único que se le puede achacar en contra de esta miniserie son algunas agujeros o contradicciones en el guión, pero que se pueden comprender por la extensión de la miniserie, que apenas llega a las 4 horas. Por ello, los acontecimientos no tardan en sucederse uno tras otro, los personajes de encontrarse, y la historia de avanzar, lo que mantiene el interés en todo momento. El drama (demasiado facilón, tópico incluso) se mezcla con pequeñas dosis de comedia (genial el patético personaje interpretado por Roger Bart), pero sobre todo con la intriga por saber más sobre los objetos, aunque al final resulte a mi gusto mucho más floja de lo que esperaba, sin desmerecer a pesar de ello el interés por la trama hasta llegar al final, un final estupendo para la miniserie ya que, sin ser ninguna maravilla, cierra lo suficiente la historia dejando entreabierta la puerta lo suficiente para que podamos ver una continuación. No mata, pero divierte un buen rato, sin decaer, y los actores están bastante correctos.
Los 6 capítulos aquí emitidos (3 dobles en realidad) nos presentan la búsqueda de Anna, la hija de Joe, a la vez que la de los objetos desde diferentes frentes. Y es que, mientras algunos creen que reuniéndolos todos se podría llegar a hablar con Dios, otros avecinan el fin de esta realidad, y son por tanto muchos los intereses tras ella.
Entretenidos en todo momento, lo único que se le puede achacar en contra de esta miniserie son algunas agujeros o contradicciones en el guión, pero que se pueden comprender por la extensión de la miniserie, que apenas llega a las 4 horas. Por ello, los acontecimientos no tardan en sucederse uno tras otro, los personajes de encontrarse, y la historia de avanzar, lo que mantiene el interés en todo momento. El drama (demasiado facilón, tópico incluso) se mezcla con pequeñas dosis de comedia (genial el patético personaje interpretado por Roger Bart), pero sobre todo con la intriga por saber más sobre los objetos, aunque al final resulte a mi gusto mucho más floja de lo que esperaba, sin desmerecer a pesar de ello el interés por la trama hasta llegar al final, un final estupendo para la miniserie ya que, sin ser ninguna maravilla, cierra lo suficiente la historia dejando entreabierta la puerta lo suficiente para que podamos ver una continuación. No mata, pero divierte un buen rato, sin decaer, y los actores están bastante correctos.

7.4
37,807
7
3 de junio de 2015
3 de junio de 2015
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me encanta la ciencia ficción. Y me encanta, sobre todo, la ciencia ficción sin demasiados artificios, que con un presupuesto exiguo o medios bastante limitados saca adelante su propuesta gracias a la fuerza de una idea, a la confianza de quienes la manejan en la potencia de ésta, y en que hay que hay que sacarla adelante sí o sí, no puede quedarse limitada a unas cuantas personas, tiene que expandirse y que todos podamos disfrutarla. En los últimos años hay variados y buenos ejemplos de este tipo de propuestas, como Moon, Predestination, Ex Machina o Coherence (con la que The man from Earth comparte algunas similitudes), que se basan en esta premisa y se saldan con éxito, tal es la fuerza de dicha idea que nos hace obviar y no echar de menos el típico cartón piedra al que otras producciones del género recurren para tapar sus carencias. Aquí asistimos de nuevo al mismo modus operandi: un puñado de actores, una idea principal, y el desarrollo de ésta como un cuento oral (no voy a revelar nada, ni la sinopsis siquiera, y si podéis evitarla mejor, para que la descubráis como yo en toda su magnificiencia durante el visionado de la película), que fascina y confunde a sus oyentes, incluso enfada y provoca a más de uno, y que engancha por completo al espectador. Un cuento oral, cuyo protagonista es totalmente fascinante gracias a sus vivencias, y al que sólo podemos achacar que acabe tan pronto, aún no queremos irnos a la cama, porque quedamos con ganas de más y más historias, de más y más descubrimientos. Sólo esto le voy a achacar en contra, y un final que no acaba de redondear la propuesta. Pero es lo de menos, haceros con ella en cuanto podáis, y disfrutad, de nuevo, de que una idea se haya abierto camino, de que conozcamos un nuevo cuento, una vez adultos, que creíamos que lo sabíamos todo.
8
22 de abril de 2015
22 de abril de 2015
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desde el encarcelamiento, la tortura y el homicidio de un taxista afgano cualquiera tras los muros de Bagram, pasando por la infame Abu Ghraib en Irak hasta Guantánamo de una Cuba a la que se atreve a dar lecciones de moralidad, un repaso a los crímenes de guerra cometidos enarbolando la bandera de la guerra contra el terrorismo: la tortura sistemática y homologada por el gobierno de turno que muestra, una vez más, la perversa cara de una nación convertida en distorsionado ideal gracias al imperialismo y la globalización, a la mercadotecnia y la mentira institucional, todo ello vendido en formato blockbuster a todo el planeta. Cómo no, al final los grandes criminales de guerra siguen dando conferencias o en altos puestos de la empresa de seguridad privada, llenándose los bolsillos, mientras los secuaces, nada inocentes pero simples peones, pagan para que el país, mientras suena el himno de los patriotas, limpie la imagen de marca y seguir exportándola como el añorado sueño americano.
Seguramente nada nuevo para los conocedores de la historia del cínico país de las barras y estrellas más allá de lo contado por la propaganda, pero la indignación que provoca siempre servirá para que sigamos alerta ante los autodenominados salvadores y defensores de nuestras libertades, como por desgracia vivimos en nuestro país. Ojo con los que se envuelven en banderas, pues nunca sabemos lo que esconden debajo.
Seguramente nada nuevo para los conocedores de la historia del cínico país de las barras y estrellas más allá de lo contado por la propaganda, pero la indignación que provoca siempre servirá para que sigamos alerta ante los autodenominados salvadores y defensores de nuestras libertades, como por desgracia vivimos en nuestro país. Ojo con los que se envuelven en banderas, pues nunca sabemos lo que esconden debajo.

5.4
37,624
2
30 de noviembre de 2012
30 de noviembre de 2012
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vamos a ser claros desde el principio: esta película es, sin duda, una de las mayores porquerías que me he echado a la cara en tiempo.
No me malinterpretéis, la película se deja ver y es entretenida a ratos, pero quizá por la desconexión neuronal que debe provocar la cámara con tanto giro, tanta velocidad y abuso de tiempo bala. Y es que el guión toma de base unos cuantos tópicos del género, que son mal llevados argumentalmente durante toda la película, para ser rápidamente reemplazados por las escenas de acción hiperbólica (a la vez que risibles en DEMASIADAS ocasiones) en cuanto el director supone que ya han cumplido con la función del libreto y el estupor y el sueño se han apoderado de las butacas.
Con esto queda completamente definido, como os habréis dado cuenta, este blockbuster de libro. Lo peor no es que se hagan películas así, que tienen su público y arrasan en taquilla, sino el que en Hollywood aún no hayan sabido entender que las mejores películas del género se hicieron antes de que descubriéramos el tiempo bala (¡qué daño ha hecho Matrix al cine de acción!), y ahora sean axioma para cualquier producción de este tipo, venga o no a cuento. Pero oyes, que siguen consiguiendo su objetivo, y yo mismo he apoquinado gustosamente los 6 euros de la entrada. Y sí, gustosamente, porque la imagen del culamen de Angelina Jolie bien lo valen...
No me malinterpretéis, la película se deja ver y es entretenida a ratos, pero quizá por la desconexión neuronal que debe provocar la cámara con tanto giro, tanta velocidad y abuso de tiempo bala. Y es que el guión toma de base unos cuantos tópicos del género, que son mal llevados argumentalmente durante toda la película, para ser rápidamente reemplazados por las escenas de acción hiperbólica (a la vez que risibles en DEMASIADAS ocasiones) en cuanto el director supone que ya han cumplido con la función del libreto y el estupor y el sueño se han apoderado de las butacas.
Con esto queda completamente definido, como os habréis dado cuenta, este blockbuster de libro. Lo peor no es que se hagan películas así, que tienen su público y arrasan en taquilla, sino el que en Hollywood aún no hayan sabido entender que las mejores películas del género se hicieron antes de que descubriéramos el tiempo bala (¡qué daño ha hecho Matrix al cine de acción!), y ahora sean axioma para cualquier producción de este tipo, venga o no a cuento. Pero oyes, que siguen consiguiendo su objetivo, y yo mismo he apoquinado gustosamente los 6 euros de la entrada. Y sí, gustosamente, porque la imagen del culamen de Angelina Jolie bien lo valen...
Más sobre samanosuke
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here