Lo único que pudo salir de mi boca cuando acabé de ver La lista de Schindler fue un suspiro. Pese a que ya había visto otras películas sobre el holocausto nazi, ninguna me había llegado a sobrecoger tanto como ésta. Supongo que sería por la fotografía en blanco y negro. Un elemento muy acertado es la niña vestida de rojo; una nota de esperanza y alivio entre tanta maldad y oscuridad.

He de reconocer que Spielberg nunca me había entusiasmado demasiado pero con esta obra maestra se ha salido. El espectador se envuelve fácilmente en el hilo de la película, sus sentimientos se despiertan y pone los bellos de punta, por no hablar de la probabilidad de que se escape alguna lagrimita.

Sencillamente magnífica.

Yo soy una persona que se asusta fácilmente con las películas de miedo o que se acercan. Dead Silence pretende ser una película de miedo pero ni por asomo.

A mi no me parece que de miedo, no me dio ningún sobresalto ni hizo que saliera un ay! de mi boca. Simplemente te hace apartar la mirada de vez en cuando pero por algunas imágenes un poco desagradables, nada más. En realidad el argumento y la leyenda de la mujer de los muñecos me pareció bien pero el final se intuye rápidamente y a mi me gusta que una película me engache, me envuelva y me sorprenda.

Más que gritar lo que hice fue bostezar.

Típica historia de amor en la que chica rica y chico pobre se enamoran. Es cierto que recuerda a otras historias antes vistas pero esta no es, para nada, empalagosa. Me gustó la pasión y la fuerza de todos y cada uno de los personajes y su papel crucial en el desarrolo de la trama.

Aunque el final se puede suponer casi al principio, conmueve y es fácil que se escape alguna lágrima.

Teniendo en cuenta que vi esta película cuando tenia unos 15 años, a mi si me gustó y mucho. Me pasé la mayor parte del tiempo tapándome los ojos.

Es verdad que el argumento es parecido a muchos otros y el final predecible, pero si que da miedo.