Auténticamente macabra. Desde la gasolinera sin gasolina, el limpiador del parabrisas, el loco autoestopista, las inquietudes paranoicas del personaje de silla de ruedas, el alucinado de la sierra mecánica, el padre siniestro y el abuelo puro edor. Se consigue una malsana película.

Ir al pasado a solucionar la primera parte no es una sorpresa y desilusiona la poca inventiva para dar vuelta a la tortilla.
Todos aparecen en escena, no falta uno, pero ninguno saca brillo, más bien dan un poco de pena, incluso muere alguno, para que salga la ecuación.
Incluso en esta secuela no tenemos ni MALO, ya que parece sentenciado desde que los vengadores se ponen manos a la obra , más o menos a la hora de película.
Todos los momentos íntimos de los vengadores son ridículos, aparecen porque existen de secuelas anteriores y nada más.
Y para colmo de la originalidad batalla final de las finales.

Antes de nada comentar que he visto 18 películas de Israel, tanto dramas como comedias, y ya le he pillado el sentido del " humor Judío " y os digo que es tan divertido como en las buenas épocas el americano o el Británico.
Sin comentar detalles de la película decir que sus primeros diez minutos son los peores, no por ser malos si no por aparentar que la historia no va a dar para mucho más, pero aquí viene el milagro de esta película, a partir de los diez minutos iniciales empieza a ocurrir el milagro, cada cinco minutos se pone más divertida, y cuando parece que se estanca al final tenemos un final de verdad, lleno de una locura divertida pero terrenal.
Decir que me lo pasé PIPA.

Esta aventura espacial no es muy original ni tampoco excesivamente emocionante pero al final cumple con el título. Su humor funciona pero siempre calzado. Sus efectos digitales son buenos pero ya más vistos que el copón desde los clones. La química entre los personajes es fluida aunque algo fantasmona y la contención sexual entre el terráqueo y la verdi es lo mejor de la función. Sin duda recomendada para todos los amantes de la guerra de las galaxias.

La primera de Jon Watts tenía un pase como divertido pasatiempo pero esta secuela es una nadería.
Por un lado tenemos un adolescente(16 años) jaja si hasta tiene arrugas ejem, que persigue a otra adolescente que parece una niña jaja, Y por otro lado tenemos un malo que por arte de magia engaña hasta el mismísimo FURIA y que por desgracia nunca vemos ni intuimos algo de su personalidad, es un MISTERIO.
Y finalmente, después de casi dos horas en la que prácticamente no pasa nada , si, si, hay digitales por el camino, profesores discapacitados, amigo íntimo, el guaperas malo, etc , Spider-Man mata al malo y se va con la niña.
FIN, me pregunto que edad tiene Jon Watts.