A mi ME HA ENCANTADO. La he disfrutado como un enano y no soy capaz de ponerle menos de un 8 alto.
Es bastante obvio que está basada en una obra de teatro, pero creo que Wyler lo lleva fenomenal al cine, con esa comisaría donde siempre está pasando algo aparte de la acción principal. Detalles como el poli cerca de la puerta abatible que la para con el pie por pura costumbre, sabe que le va a dar. Como si fueran polis de verdad y trabajaran de verdad en esa comisaría. También me ha hecho mucha gracia el poli de la entrada al que llegan con las denuncias rutinarias, esas escenas de humor van muy bien intercaladas para quitar dramatismo de vez en cuando.
La subtrama del chaval acusado de robar por primera vez y la cabezonería de Douglas de no perdonarle (basada en una historia anterior que le ocurrió) me ha recordado mucho a la ley que puso el alcalde de Nueva York muchos años después, la llamada "Ley del primer cristal roto", que estaba basada en castigar TODOS los crímenes menores, porque el delincuente suele tener una evolución en el crimen: rompe un cristal de niño gamberro...roba un par de caramelos...mata a un gato...roba una tienda...mata a alguien. Lo curioso es que les salió bien y la criminalidad descendió muchísimo en una ciudad horrible en ese aspecto hasta entonces. Da qué pensar si lo llevas a temas actuales en España, como los asesinos de Sandra Palo o Marta del Castillo...
De las actuaciones, el dúo protagonista no me ha acabado de convencer. Pero en cambio me ha gustado mucho el comisario jefe y los dos delincuentes que tienen detenidos.
Dos líneas de guión que me han gustado mucho y me las guardo:

(comisario)-Hace años que tiré la radio por la ventana ¿Sabe por qué?. Porque no me gustan los misterios!

(denunciante que quiere quitarle la denuncia al joven)- Apuesto por caballos, ¿por qué no iba a hacerlo por un ser humano?
(K. Douglas) - Siga con los caballos, tienen un porcentaje de acierto más alto

Desde aquí mi más profunda admiración a David O. Russell. Cascarse dos pelis tan sumamente normalitas como "Silver Linings Playbook" y "La gran estafa americana" y llevarse 8 y 10 nominaciones respectivamente es de ser un auténtico CRACK de este negocio.
138 minutazos de nada envasada al vacío y perfumada con unas gotitas de éter. Con dos cojones. La gigantesca estafa americana, en efecto.

Bastante interesante y ameno este documental de lo que pasa "tras el escenario" en una competición de culturismo. Me ha interesado sobre todo descubrir que Arnie es un tío con mucho más cerebro y, sobre todo, gracia y don de gentes que ese brutote austríaco que pensé que era.
Sin embargo me he quedado con las ganas de que profundizaran un poco más en el día a día de estos "monstruitos" y nos enseñaran no sólo un par de escenas más o menos graciosas de gimnasio y alrededores (especialmente memorable el desayuno de Arnie con la familia de su gran rival), si no que se metieran más en cómo consiguen hiperdesarrollarse así, cuales eran "sus otras rutinas". Hay un momento en el que se ve (creo que a Ferrigno) ese tocador lleno de botes de pastillas y cómo se va metiendo tres de estas, dos de las otras y alguna de más allá, pero ni se pregunta qué es ni se tira por esa vía.

...Pero tienes que estar muy predispuesto a hacerlo, muy por la labor. Si no, si esperas una serie de intriga y trucos bien hilados, con un guión intrincado y lleno de sorpresas, te vas a ir defraudado.
Podría enumerar las mil y una incongruencias que sostienen esta "intriga", pero ya lo han hecho muchas críticas antes. Lo resumiría en la más grande, la que mentalmente me ha sacado de la serie durante bastantes momentos: el personaje de Lupin es un ladrón especializado en el disfraz, tanto en los libros como en la maravillosa serie japonesa de los 80-90. Si pones a un pedazo de actor afroamericano, que mide dos metros de alto por metro y medio de ancho, tiras abajo esa premisa. Es un armario ropero de tres puertas, negro como el azabache, pasando por delante de decenas de policías y agentes de seguridad que le están buscando. Es IMPOSIBLE que les esquive por ponerse una barba postiza, una peluca o un gorro. Está claro que es por la nueva moda de convertir en negro a cualquier personaje clásico, cosa que sinceramente me da igual (no consumo ese producto y listo). Pero justamente en esta serie y con este actor, se carga la premisa de base, no funciona.
Floja adaptación que entretiene por el apartado visual y porque Omar Sy rinde a muy buen nivel. Pero boba. Boba como ella sola.

Interesante peli de intriga (por decir algo). Gran trabajo de John Goodman, al que no tenía para nada visto en un papel tan serio. Pero lo que menos me ha gustado ha sido su desenlace y el cómo se llega a él, tiene cosas bastante absurdas que tienes que pasar por alto para que te cuadre el asunto. Paso a comentar la más gorda en el spoiler.

Aún con todo eso, es muy divertida, original y consigue ponerte en tensión. Un 7.