No merece más palabras.
Realmente la página no deja poner las escasas letras que se deben emplear para definir un desastre: todo impostado, falso, ridículo. Los actores, lamentables.
La dirección... ¿Hay dirección? Solo sospechamos que sí porque si no es con cierto trabajo es imposible que algo sea tan penoso.
¿Puedo subirlo ya o hace falta que siga?

El mundo de los adultos se divide en dos clases de personas: buenos, sin fisuras, defectos ni malos momentos. Y, claro, malos pero malísimos que están sucios hasta el fondo de sus almas. Estos suelen ser padres y madres.
Por otro lado están los nños, buenos no, buenísimos. En realidad si en algo no son perfectos es porque no los queremos lo suficiente. En plan Rousseau. Buenismo dulzón y falso de principio a fin de la película.