You must be a loged user to know your affinity with Cinexin
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred
5
2 de mayo de 2010
2 de mayo de 2010
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película comienza cuando en 1974 Fielding, con veintipocos años, se entera mirando las noticias en la TV que su novia, Sarah, una defensora de los derechos humanos, ha muerto víctima de una bomba de la dictadura chilena. Numerosos flash-back nos llevan a dos años antes, cuando se conocieron y se enamoraron y a todo el tiempo que pasaron juntos hasta el año en que ella muere. Y, de vez en cuando, la historia transcurre en 1983, cuando Fielding, con treinta y tantos años, se presenta a las elecciones americanas como senador, que es lo que ha querido hacer siempre. Pero no ha podido olvidar a Sarah y, de buenas a primeras, cree escucharla y verla por la calle.
Los primeros veinte minutos de la película, cuando se nos plantea la historia y se presenta a los personajes, el interés se mantiene. Pero ese interés se desvanece después de ese tiempo porque las idas y vueltas del pasado al presente y del presente al pasado se hacen pesadas y reiterativas. Discusiones políticas entre la pareja y sus amigos en un tiempo en que Estados Unidos estaba en guerra contra el Vietcong y medio país en contra de la guerra de Vietnam cuando nos trasladamos a los setenta. Y cuando la película transcurre en los ochenta, vemos los problemas de Fielding, que no puede centrarse en las elecciones porque está convencido de que Sarah está viva y quiere buscarla, pero no sabe dónde.
La ambientación de la época hippie y de la contracultura americana está lograda y las interpretaciones también, por eso le pongo un 5, aunque nos creemos más al Fielding novio de Sarah en los setenta que al aspirante a senador de los ochenta.
Nos quedamos sin saber qué se pretende en la película, si hacer una crítica política, si contar una historia de fantasmas o de amor. Y la verdad es que a medida que avanza cada vez importa menos porque, sea lo que sea lo que quiere decir, lo único que consigue es aburrirnos.
Los primeros veinte minutos de la película, cuando se nos plantea la historia y se presenta a los personajes, el interés se mantiene. Pero ese interés se desvanece después de ese tiempo porque las idas y vueltas del pasado al presente y del presente al pasado se hacen pesadas y reiterativas. Discusiones políticas entre la pareja y sus amigos en un tiempo en que Estados Unidos estaba en guerra contra el Vietcong y medio país en contra de la guerra de Vietnam cuando nos trasladamos a los setenta. Y cuando la película transcurre en los ochenta, vemos los problemas de Fielding, que no puede centrarse en las elecciones porque está convencido de que Sarah está viva y quiere buscarla, pero no sabe dónde.
La ambientación de la época hippie y de la contracultura americana está lograda y las interpretaciones también, por eso le pongo un 5, aunque nos creemos más al Fielding novio de Sarah en los setenta que al aspirante a senador de los ochenta.
Nos quedamos sin saber qué se pretende en la película, si hacer una crítica política, si contar una historia de fantasmas o de amor. Y la verdad es que a medida que avanza cada vez importa menos porque, sea lo que sea lo que quiere decir, lo único que consigue es aburrirnos.

5.8
11,371
5
7 de febrero de 2010
7 de febrero de 2010
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Meryl Streep está insoportable en esta película, lo que significa que interpreta su papel de Julia espléndidamente porque Julia es bastante insoportable. Dispone de dinero, disfruta con la buena cocina en compañía de su marido en la Francia de la posguerra y acabará siendo una mediática cocinera de gestos y tono de voz exasperantes.
Medio siglo después y en Nueva York, Julie (Amy Adams) vive con su pareja en un minúsculo y oscuro apartamento y tiene un trabajo deprimente atendiendo las quejas de los ciudadanos al teléfono. Para relajarse, cocina y lo hace muy bien. La anónima Julie decide poner en práctica las recetas de la famosa (para los americanos, al menos) Julia Child, introductora de la cocina francesa en EE.UU., y crear un blog donde comentarlas de una forma distendida.
La ambientación, sobre todo en la parte de Francia en los años cincuenta, está bastante lograda, pero las historias de ambas cocineras no son suficiente para mantener el interés durante dos horas. Tiene que gustarte mucho la cocina para no aburrirte porque la película es bastante sosa. Puede verse la parte de Meryl Streep porque es ella la que interpreta el personaje, por nada más. Y no es que Amy Adams haga mal su papel de Julie, pero es que este personaje es más ñoño que un especial de “La casa de la pradera” y llega a darte igual si se ahoga en bechamel.
Medio siglo después y en Nueva York, Julie (Amy Adams) vive con su pareja en un minúsculo y oscuro apartamento y tiene un trabajo deprimente atendiendo las quejas de los ciudadanos al teléfono. Para relajarse, cocina y lo hace muy bien. La anónima Julie decide poner en práctica las recetas de la famosa (para los americanos, al menos) Julia Child, introductora de la cocina francesa en EE.UU., y crear un blog donde comentarlas de una forma distendida.
La ambientación, sobre todo en la parte de Francia en los años cincuenta, está bastante lograda, pero las historias de ambas cocineras no son suficiente para mantener el interés durante dos horas. Tiene que gustarte mucho la cocina para no aburrirte porque la película es bastante sosa. Puede verse la parte de Meryl Streep porque es ella la que interpreta el personaje, por nada más. Y no es que Amy Adams haga mal su papel de Julie, pero es que este personaje es más ñoño que un especial de “La casa de la pradera” y llega a darte igual si se ahoga en bechamel.

4.8
54,887
5
22 de diciembre de 2009
22 de diciembre de 2009
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Hay cosa más tonta que subirnos a una montaña rusa para marearnos y que el estómago se nos ponga en la boca? Pues no, pero lo hacemos porque nos divierte esa tontería. Y eso no nos impide hacer otras cosas, digamos más inteligentes.
Está claro que no deben medirse todas las películas con el mismo rasero. ¿Le bajaríamos la puntuación a una película de Woody Allen porque no incluyera una impresionante persecución de coches por la ciudad de Nueva York? Por supuesto que no, porque no es eso lo que esperaríamos ver sino un guión interesante y unas buenas interpretaciones. Eso sí, si incluyera la persecución de coches, esperaríamos que fuera creíble al menos.
En esta película de catástrofes lo que esperamos es que los efectos especiales nos apabullen y nos dejen clavados en la silla. Pues eso hace y, además, las interpretaciones de los actores son correctas. Otra cosa son las tonterías que dicen a cada momento. Cierto, tiene un guión tontorrón y unos diálogos propios de un cómic para adolescentes. Por eso no puede clasificarse como una buena película y desde luego no va a perdurar en la historia del cine, pero tampoco creo que merezca ser considerada una película mala a rabiar. Mientras contemplas cómo se desploman las autopistas, no miras el reloj para ver si falta mucho para que termine la película. Pues eso. Un 5’5.
Está claro que no deben medirse todas las películas con el mismo rasero. ¿Le bajaríamos la puntuación a una película de Woody Allen porque no incluyera una impresionante persecución de coches por la ciudad de Nueva York? Por supuesto que no, porque no es eso lo que esperaríamos ver sino un guión interesante y unas buenas interpretaciones. Eso sí, si incluyera la persecución de coches, esperaríamos que fuera creíble al menos.
En esta película de catástrofes lo que esperamos es que los efectos especiales nos apabullen y nos dejen clavados en la silla. Pues eso hace y, además, las interpretaciones de los actores son correctas. Otra cosa son las tonterías que dicen a cada momento. Cierto, tiene un guión tontorrón y unos diálogos propios de un cómic para adolescentes. Por eso no puede clasificarse como una buena película y desde luego no va a perdurar en la historia del cine, pero tampoco creo que merezca ser considerada una película mala a rabiar. Mientras contemplas cómo se desploman las autopistas, no miras el reloj para ver si falta mucho para que termine la película. Pues eso. Un 5’5.

7.1
63,174
7
22 de diciembre de 2009
22 de diciembre de 2009
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
El principio de la película te descoloca y te llena de interrogantes que se irán desvelando a medida que la historia avanza. Se trata de un drama capaz de hacer llorar a muchos, aunque otros muchos podrán criticar que tiene un planteamiento demasiado melodramático e irreal y no mentirán. Sólo que, si somos sinceros y miramos al pasado cinematográfico, hay que aceptar que muchas buenas películas hoy clásicas eran en su día dramones con altas dosis de maniqueísmo y ese supuesto defecto se ha convertido en virtud con el tiempo.
La misma historia, mal contada y mal interpretada se convertiría en un dramón infumable, pero creo que esta película, salvo en algunos pocos minutos que la estropean, no traspasa el límite de la sensibilidad para caer en la sensiblería y tiene un guión sólido y eficazmente resuelto. Otra cosa es que la historia tenga bastante de fábula y que el mundo real tienda a ser peor. En la vida real no se redime nadie. Al contrario, va a Telecinco y cobra por contar lo mal que lo ha hecho todo y que no ha hecho absolutamente nada para repararlo. Aquí, el extraño inspector de hacienda que interpreta Will Smith quiere redimir un error del pasado y busca a las siete personas que aparecen en la lista del comienzo de la película para hacerlo.
Woody Harrelson está impagable en su papel de ciego, aunque sea corto, y Will Smith muestra un registro muy lejano del chico simpático de “Los hombres de negro” e igualmente efectivo cuando le toca hacer de hombre con una pesada carga. Su expresión contenida frente al dolor es, desde luego, conmovedora. Rosario Dawson, espléndida también.
Si se tiene oportunidad de ver la película en V.O., resulta curioso escuchar a Will Smith diciendo algunas frases en español (con no mucho acento inglés, al menos pronuncia las erres).
La misma historia, mal contada y mal interpretada se convertiría en un dramón infumable, pero creo que esta película, salvo en algunos pocos minutos que la estropean, no traspasa el límite de la sensibilidad para caer en la sensiblería y tiene un guión sólido y eficazmente resuelto. Otra cosa es que la historia tenga bastante de fábula y que el mundo real tienda a ser peor. En la vida real no se redime nadie. Al contrario, va a Telecinco y cobra por contar lo mal que lo ha hecho todo y que no ha hecho absolutamente nada para repararlo. Aquí, el extraño inspector de hacienda que interpreta Will Smith quiere redimir un error del pasado y busca a las siete personas que aparecen en la lista del comienzo de la película para hacerlo.
Woody Harrelson está impagable en su papel de ciego, aunque sea corto, y Will Smith muestra un registro muy lejano del chico simpático de “Los hombres de negro” e igualmente efectivo cuando le toca hacer de hombre con una pesada carga. Su expresión contenida frente al dolor es, desde luego, conmovedora. Rosario Dawson, espléndida también.
Si se tiene oportunidad de ver la película en V.O., resulta curioso escuchar a Will Smith diciendo algunas frases en español (con no mucho acento inglés, al menos pronuncia las erres).

5.4
8,120
5
21 de diciembre de 2009
21 de diciembre de 2009
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mientras salen los créditos aparecen también unas imágenes reales, las del atentado que sufrió el presidente Ronald Reagan en 1981. Y es que va de eso, de conspiraciones políticas para acabar con la vida del presidente de los EE.UU.
La peli comienza con Pete Garrison/Michael Douglas, agente del servicio secreto en Washington, que entra a trabajar por la mañana a la Casa Blanca como otros van a la oficina de su sucursal bancaria. Vemos cómo va pasando todos los controles de seguridad y la charla distendida entre colegas para que el espectador vaya entrando en situación.
Garrison, que salvó la vida al presidente Reagan, es ahora el guardaespaldas de la primera dama, papel que interpreta Kim Basinger. ¿Qué será que no terminamos de creérnosla ni como esposa del presidente ni tampoco como madre de Eminem en “8 millas”? Y el caso es que yo no diría que es una mala actriz sin más. Eva Longoria hace de agente del servicio secreto y tampoco hay quien se la crea. ¿Es que no se exige un mínimo de estatura en ese cuerpo? Esta actriz mide 1,57 m.
Película convencional de sospechas, investigaciones, confidentes, traidores infiltrados en el servicio secreto, carreras para capturar al principal sospechoso… lo de siempre.
Es una película ni buena ni mala, más bien tirando a esto último. Puede verse sin mayor problema, pero cualquier episodio de la serie “El ala oeste de la Casa Blanca” le gana por goleada.
La peli comienza con Pete Garrison/Michael Douglas, agente del servicio secreto en Washington, que entra a trabajar por la mañana a la Casa Blanca como otros van a la oficina de su sucursal bancaria. Vemos cómo va pasando todos los controles de seguridad y la charla distendida entre colegas para que el espectador vaya entrando en situación.
Garrison, que salvó la vida al presidente Reagan, es ahora el guardaespaldas de la primera dama, papel que interpreta Kim Basinger. ¿Qué será que no terminamos de creérnosla ni como esposa del presidente ni tampoco como madre de Eminem en “8 millas”? Y el caso es que yo no diría que es una mala actriz sin más. Eva Longoria hace de agente del servicio secreto y tampoco hay quien se la crea. ¿Es que no se exige un mínimo de estatura en ese cuerpo? Esta actriz mide 1,57 m.
Película convencional de sospechas, investigaciones, confidentes, traidores infiltrados en el servicio secreto, carreras para capturar al principal sospechoso… lo de siempre.
Es una película ni buena ni mala, más bien tirando a esto último. Puede verse sin mayor problema, pero cualquier episodio de la serie “El ala oeste de la Casa Blanca” le gana por goleada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Que el agente Garrison/Douglas entre en el restaurante donde está cenando la mujer del presidente y sortee sin mayor problema a todos sus guardaespaldas para llegar hasta ella en los lavabos es muy poco creíble.
Más sobre Cinexin
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here