Viendo la peli no se entiende bien como pudo fracasar tan brutalmente, hasta el punto de hundir a Carolco, la productora encargada del proyecto.
Pero es que a Mario Kassar se le fue el proyecto de las manos desde el principio. Y no es porque este buen hombre no tuviera experiencia, con la citada compañía llegó a distribuir obras como Terminator 1 y 2, Stargate o Instinto básico entre otras.
Si entramos en números fríos se entiende el desastre, $92 millones de presupuesto y sólo 10 de recaudación harían tambalearse a cualquiera.
La película en sí, está muy entretenida, buenos efectos pirotécnicos e historia resultona. Quizás uno de los problemas principales radicara en el cásting; por un lado la mujer del director, Geena Davis, que no lo hace mal, pero vamos..., y por el otro Matthew Modine, que sustituyó a Michael Douglas, cuando este último desestimó el papel, debido según dicen por desavenencias con el propio Kassar. Ni uno ni otro, eran actores especialmente queridos en la época, si bien, rompiendo una lanza en su favor, no lo hacen nada mal.
Por ahí he leído también que el rodaje se acabó convirtiendo en un festín de despilfarro, hasta el punto que Renny Harlin y su mujer se compraron un burro en Malta a cargo de la producción y se lo llevaron en avión a los USA (!).
Vale la pena verla, cine de aventuras del qué poco se hace. Lo dicho a lo mejor con el Douglas y la Stone hubiera funcionado bastante mejor.Interesante.

La verdad es que no suelo ser muy crítico con las comedias románticas, es más me gustan ya que son ligeritas, te ríes y si se encarta emerge mi lado femenido y dejo caer alguna lagrimilla... Pero la premisa de una COMEDIA romántica, es que DEBE hacer gracia, y no hace falta descojonarse por el suelo, con unas sonrisillas ya hay bastante. Y no hace puñetera gracia, nada ni una sonrisa provocada por el guión, situaciones, o gesticulación, si a eso le añadimos el exceso de azúcar, qué ReDiosssssssssss, es muchoo, pues nos queda esta puñeta de hora y media
Pero vamos al lío:
- Apestosos son los personajes (salvaría al hermanito va), en especial Heather Graham, que no sólo no tiene ni puta gracia, es que parece retrasada mental joder;
- Apestoso es el guión, histriónico, sin ningún tipo de profundidad y con algunos diálogos que me han puesto histérico;
- El tema de la liberación sexual, salir del armario o como lo queráis llamar está tratado con un penoso y paupérrimo gusto, y es que hay cosas que hacen gracia y otras vergüenza ajena (véase el lloriqueo en el ascensor hacia el final, vaya tela!).
- La tal Sue Kramer se marca unos buenos planos del culito de la Moynahan en ropa interior, y son varios....Buen culito por cierto. No se si es malo o bueno pero no hace daño comentarlo, por lo menos alegra al público heterosexual masculino y gay femenino (este comentario estaría al nivel del guión....).
En fin es mejor pasar de verla directamente, bastaría con que algún desalmado (a quien se la habré vendido que me está castigando de esta manera) os la cuente que seguro que os reís más que viéndola. Totalmente deleznable.

Depende de la mente del espectador supongo. Este actor/director es un auténtico ídolo del cine de culto japonés.
Es comprensible teniendo en cuenta el tipo de cine que triunfa allá por el país del Sol Naciente, y no hay más que ver su laureada Tetsuo, la cual no he tenido oportunidad de terminar, pero que me dejó bastante estupefacto en su día.
En la cinta que nos ocupa nos presenta a un personaje sumido en la negritud más profunda (no se ve un pijo en la mayor parte de la peli) que no tiene ni idea ni de dónde está ni cómo ha llegado ni por supuesto por qué.
Grabación en digital, con planos cortísimos e iluminación paupérrima. No se, hasta que no avanza más allá de los 30 minutos (de los 50 que dura) se puede hacer aburridota, pero en la parte final la tensión está muy conseguida, y el dolor casi se hace de uno mismo, hasta un final muy japo, que me recuerda a un corto de Miike del cual no recuerdo el nombre por desgracia.
Contiene, como marca de género, sus dosis de casquería, sangre, violencia, crueldad y una buena atmósfera opresiva, sin contar con alguna sorpresilla, y algo de interprétalo tú mismo si quieres saberlo.
En conjunto no está nada mal, se ve bien, sobretodo por lo cortita que es (le enchufa media hora y hay quién se la trague sin anestesia).
Se podría considerar un sucedáneo lejano de Hostel, algo más independiente y con un presupuesto de cena de sábado por la noche.

Pos eso, que gracia hace, por lo demás es una absoluta porquería.
Aunque que se podía esperar, con Casper Van Dien, ídolo del cine casposo, Erika Eleniak, con sus tetas lustrosas de portada Playboy y Coolio, que no se ni como describir su actuación, a ratos graciosa, a ratos asquerosa y a ratos hace que pidas tu propia muerte por dolorosa que sea.
El desarrollo es patético, el Drácula supera lo digerible y al final se les debió acabar el presupuesto o algo por qué vaya tela, telita, tela.
En fin, no esperaba absolutamente nada, así que nada, pos un 1 (ya que no hay 0, todo sea dicho).

Pues vaya, y yo que pensaba que estaba viendo una película de segunda. Casi nula repercusión internacional, poco conocida y taquillas discretas. Qué grande (e injusto) es el cine a veces.
Qué grande es el guión, dramático y comediesco a partes iguales, secundados por unos actores con una química sin igual y una puesta en escena maravillosa.
La historia es novedosa, pero es que el desarrollo es simplemente tremendo, con una dosis de mala leche impresionante y sin caer en sensiblerías te llega al alma durante todo el desarrollo. Emana sensaciones que pocas consiguen.
Directamente a pasado a ser una de mis películas preferidas, no cabe mirar los posibles errores que pueda tener cuándo te llega como lo ha hecho conmigo. Simplemente bestial.

PD: Ni efecto post-Amélie ni ostias fritas, tiene la suficiente personalidad para convertirse en una obra única. La adaptación de recursos fílmicos es normal en el cine, pero este director le imprime algo muy suyo para convertir la película en una experiencia grandiosa.