8 minutos antes de morir

La película es entretenida, pero yo voy a opinar sobre su mensaje subliminal.
Es un mensaje sucio, fascista y manipulador. No acabo de entender, cómo hay cerebros y capital suficientes en este mundo para pagar a un buen guionista para qué escriba un buen guión, a un buen equipo y a un buen director para rodar una película entretenida y, al mismo tiempo, no se invierta en centavo en evitar que se manipule y se mienta a la ciudadanía de una manera tan zafia y procaz, no se invierta un centavo en transmitir a los espectadores algo de dignidad y de auténticos valores humanos.
El mensaje que se nos transmite es una engañifa estúpida y se puede resumir en unos pocos puntos tan zafios y ramplones como indigeribles. Son estos:
1) El salvador del mundo son los Estados Unidos de América. Y no son sus universidades, sus académicos o científicos los que salvan al mundo: son sus militares.
2) El enemigo que se combate es el terrorismo. Y lo combate precisamente los Estados Unidos, una país que desde hace decenios se comporta como el máximo terrorista global: invadiendo países para implantar dictaduras, financiando a los militares de otros países para que den golpes de estado y acaben con regímenes democráticos que buscan mejoras sociales para sus ciudadanos; destruyendo países para explotar sus recursos naturales; financiando a los movimientos terroristas o permitiendo que países amigos y protegidos le financien (el integrismo islámico, financiado inicialmente por USA en la guerra ruso-afganistana y después, caso Bin Laden y el ISIS, por el régimen waabí de Arabia Saudí.
3) El héroe de la película, el salvador individual del mundo, qué casualidad, es también un militar norteamericano: un piloto que bombardea pueblos y población civil afganos impunemente desde el aire, porque USA ha invadido Afganistán porque así le ha salido de las narices. Acto seguido invadirá Irak,otro país de la zona, muy rico en petróleo y para ello el presidente Bush deberá engañar conscientemente a la opinión pública internacional, afirmando categóricamente que el régimen Sadam tiene armas químicas y nucleares y es un peligro para la humanidad. Curiosamente Sadam no utiliza ese terrible armamento para evitar la invasión y defenderse del enemigo; y esas armas tampoco aparecen después en ningún sitio, una vez terminada la guerra. Las armas no existían, era una engañifa montada por el gobierno Bush: pero la guerra terminó matando a casi un millón de afganos e iraquíes, en su mayoría civiles.. El objetivo real de la guerra no fue luchar contra el terrorismo, sino apropiarse del petróleo que tenía Irak. El gobierno Bush tampoco tuvo reparo en utilizar la base de Guantánamo para perfeccionar las técnicas de la tortura sobre las personas de manera grosera y sin ocultarse ante el mundo.
4) El terrorista de la película es un joven maléfico que pone bombas porque "el mundo es un infierno" (es decir, es enemigo del mundo actual, capitalista, dirigido por los USA). Y lo hace porque, según dice, "tenemos la posibilidad de empezar de cero, pero para ello antes hay que acabar con todo". Y ahí está el mensaje de toda la película. El terrorista, joven e inteligente, es una especie de revolucionario, porque quiere acabar con el sistema existente, con ese mundo actual que es un infierno y que comanda y auspicia USA. Es decir, el terrorista/revolucionario quiere destruir USA, pero es tan criminal y está tan loco que antes se tiene que cepillar a toda la humanidad (poniendo bombas) "para empezar de cero" (hacer la revolución e instaurar un sistema nuevo, diferente del capitalista).
En mi opinión, ese es el "bonito" mensaje que nos trasmite subrepticiamente esta película tan linda y tan bien hecha.

La inventiva de Duncan Jones al servicio del espectador, aunque originalmente la historia no es suya, fue contratado para el proyecto con el guión ya escrito, el bueno de Duncan se hace con la película dándole su toque al estilo Moon, pero esta vez mucho mas comercial.
Aunque el film me ha parecido bastante predecible, tanto en su desarrollo como en su final, la historia en si, me ha gustado mucho así como la forma de contarlo.
Es difícil tratar el tema de los saltos en el tiempo en su línea mas amplia, sin caer en clichés o resultar repetitivo con respecto a otras películas que trataron de lo mismo.
Y es que son viajes al pasado sin viajar aparentemente a ningún sitio que no sea en la mente, o si? En cualquier lugar la peli te hace estar pegado a la butaca, prestar atención a las pistas que da el director, y pasar un buen rato.
Como siempre fantástico Jake Gyllenhaal, no de los mejores nuevos actores que se nos presentan que ya me deslumbro en Donnie Darko.
Lo dicho disfruten, beban de la fuente, y sigan a este gran director.

Me daba miedo verla porque al haber leído tantas críticas negativas, me enfrentaba a coincidir y, eso siempre es una mala noticia. No me meto a analizar los "fallos" del experimento ni, los temas técnico/científicos del asunto porque sería una chorrada, del mismo modo que no cuestiono la técnica aerodinámica del traje Superman ni, porqué a Spiderman no se le termina nunca el lanza telarañas, la verdad. Para eso es ciencia-ficción y, además: yo de ciencias poco puedo discutir. Una vez que te sitúas y das por buena la historia que te plantéan, caes en la cuenta de que la peli es interesante, entretenida y, se resuelve de una de las maneras en las que cabía finiquitarla. No es excesivamente original porque el tema viajes en el tiempo no es nuevo pero, no por ello vamos a invalidar todo lo hecho desde "La máquina del tiempo" y, por ende, la clásica saga de "Regreso al futuro". Vamos que está claro que una vez que introduces esa premisa de poder viajar al pasado, evidentemente, surgen las mismas cuestiones: si se puede o no modificar el futuro desde allí y, en qué manera afecta a la moral o a otros aspectos; si se puede contactar o no con "yos" alternativos temporales, etc... pero claro, eso ya es más un tema filosófico que mero entretenimiento. Está bien plateada, no es demasiado enrevesada como para volverte majara... (estoy pensando en "Primer" del rayado de Carruth) y, al fin y al cabo, está por encima de la media actual en cuanto a calidad y, buen hacer.

La aparición de jóvenes realizadores con una personalidad propia siempre es reconfortante, le ayuda a uno a pensar que el cine americano siempre estará cargado de nuevas ideas, y que incluso el cine más comercial será capaz de apreciarlas.

Duncan Jones fue una auténtica revelación con su primera película, Moon, y con esta segunda, pese a quien pese, confirma su sabiduría y todo lo que tiene – todavía – por decir en el mundo del cine.

Aunque algunos de los que aplaudieron una experiencia tan arriesgada como Moon han atacado a Código Fuente por plegarse más a los convencionalismos de Hollywood, es innegable que esta segunda película del joven realizador es una bocanada de aire fresco en el cine comercial y en los géneros del thriller, acción y ciencia ficción.

Porque Jones sabe manejar todos los elementos de su película a la perfección, sabe dar inteligencia a una historia de acción pero teniendo en cuenta que el espectador entienda los tecnicismos más complicados, y sobre todo es capaz de mantener al espectador pegado a la butaca con el handicap de que su película es una única escena repetida interminablemente durante todo el metraje.

En este sentido, el director goza de una sabiduría total en el uso del ritmo, de las localizaciones y de la planificación de las escenas de acción. Pero además, Código Fuente está cargada de sorpresas y de pronto, es capaz de dar un puñetazo a los sentidos del espectador convirtiendo su fantasía en un emotivo drama romántico.

Código Fuente es pues nuevo cine en su máxima expresión, una película adrenalínica, realizada con gusto y originalidad y con tres actores tan carismáticos como Jake Gyllenhaal, Michelle Monaghan y Vera Farmiga, que saben entregar emoción a una historia mucho más profunda de lo que parece.

¿Han visto esos dos monufentales películas, hitos en la historia del cine, "Atrapado en el tiempo" (de Harold Ramis, USA 1993) y "Johnny cogió su fusil" (de Dalton Trumbo, USA 1971)?

Pues si han visto ambas películas, sepan que "Código Fuente" no es más que una cópula o acoplamiento de las dos susodichas películas, intentando crear una especie de "hijo o criatura" propia.

Como quiera, "Código Fuente" se ve con interés, sobre todo para los amantes de la ciencia ficción, gente religiosa, personas positivas o simplemente que mantienen activo su poder o el poder de la esperanza, porque incluso "Código Fuente" conlleva un mensaje esperanzador muy propio de esta fechas de Semana Santa y llegada de la Pascual triunfal de Resurrección, en que se está estrenando el presente filme.