Entre el amor y el juego

A veces, en la vida, cuando no pasas por buenos momentos, y además te encuentras sólo, echas de menos muchas cosas, y simplemente te quedan los recuerdos mejores de toda una vida para intentar cauterizar las heridas.

Eso me pasaba a mí cuando ví esta película, un dramón romántico con Kelly Preston, preciosa y humana, y Kevin Costner, a los que estos papeles de deportista en apuros se le dan de lujo. La historia es sencilla, el típico solterón estrella del béisbol con una novia en cada puerto, se enamora de una chica a la que ve sólo cuando va a jugar a Nueva York. Cinco años después de haberla conocido, y tras varias vicisitudes en la relación, vuelve a la ciudad y ella le dice que se va a Londres, y que todo ha terminado.

Y esa es la belleza de la película, mientras está realizando el partido perfecto en béisbol, esto es, que el equipo contrario no consiga llegar ni a primera base, y va realizando lanzamientos que van eliminando contrarios, Billy Chapel va rememorando su vida desde su más tierna infancia hasta los mejores y los peores momentos que ha vivido durante esos cinco años con Jane, y lo hace tan vívidamente que hasta se desconecta del propio partido mientras sigue jugando en un estadio repleto de público.

Me impactó cuando la ví y la recordaba con cariño, ahora que la he vuelto a ver me deja con una sonrisa en la boca recordando como estaba yo hace quince años y lo que he superado y vivido desde entonces.

Notable alto, 8. Bello drama romántico con aroma deportivo, para sentimentales.

Drama romántico dentro de un ambiente deportivo netamente estadounidense con continuos flash-back a lo largo de todo el film. Película de sentimientos y soledades con un guión y dirección muy adecuados para esta historia. La música de Basil Poledouris, muy inspirada, ambienta cada secuencia del film de forma destacable y enriquecedora. La parte final de la película, con su carga sentimental tanto en lo deportivo como en lo romántico, está bastante conseguida. Kevin Costner y Kelly Preston cumplen correctamente con sus interpretaciones, aunque personalmente creo que Kevin Costner se adapta mejor al Western en todos los aspectos.


José Antonio ZG

Eres una guapa pero desdichada madre soltera. Un día tu mierda de coche te deja tirada en la carretera sin nadie que te socorra. De repente un coche se para y de él sale David Beckham, quien, no solo te arregla el coche sino que te invita a cenar y se enamora de ti.

En vuestros comienzos te pone la cornamenta por aquello de que es el futbolista más famoso del mundo, que recorre el país casi todos los días y le queda poco tiempo para dedicarte.

No obstante se lo perdonas porque tú también estás enamorada y poco a poco os vais convirtiendo en una pareja felíz, donde hasta tu hija empieza a tener una figura paterna como Dios manda. Todo va muy bien hasta que un buen día te da por pirarte al otro lado del mundo y abandonar a Beckham.

Toda vuestra historia la recuerda tu amado futbolista en la final del mundial, en el estadio Maracaná, en el que será su último partido como profesional y mientras se dispone a chutar un penalti en el minuto 89 con 0-0 en el marcador y toda la grada presionándole.

De esto más o menos trata Entre el amor y el juego. Pero qué cojona, no me disgustó. Otra peli más de béisbol para Costner y otra típica historia de amor. Pero bueno, tal vez me pilló en un buen momento, en un momento generoso y le doy un pedazo de 6.

La vi hace muchísimo años, y me pareció muy bonita.
Una historia de amor y de beisbol. Me ha gustado mucho, tanto como la otra vez. El fracaso, el amor, la retirada del equipo y del deporte, el pase a la edad madura. La añoranza por lo que pudo ser y no fue, pero también por lo que es y será. El pase, en definitiva, a una vida diferente.
La retirada en el deporte porofesional tiene que ser muy dura.
El encadenamiento del juego del presente con el pasado que ha vivido con la chica es magnífico, como recurso narrativo es estupendo y creo que funciona bien. Desde luego no recuerdo una película que haga este tipo de fhasback narrativo de manera tan permanente y constante. Funciona, la verdad es que funciona.
El hombre maduro, vivido y trabajado por la vida, frente a la mujer joven, dicharachera y con toda la energía del mundo. Ese contraste siempre funciona.
El director tuvo algunos éxitos en el pasado y que ha trabajado mucho en televisión. Ahora se refugia en Sderman y cintas de superhéroes.
Kevin Costner y Kelly Preston son los protagonistas. Él sigue en danza, pero ella muróo este año (en julio). Esposa de otra megaestrella del cine a la que parece que le persigue la fatalidad, la muerte de un hijo, ahora ella.
Sé que es una aberración, pero para mi tiene un 8. Conecta con aspectos emocionales de mi vida, por eso me gusta. Al fin y al cabo el cine sirve para esto, para emocionar.

Entre el amor y el juego

Película que combina el drama de una estrella del béisbol en el final su carrera y su romance con una periodista en de belleza y moda.

Solo un gran director como Raimi (autor del singular género cómico-terrorífico) podía salvar una película predestinada al fracaso por sus ingredientes típicos de telefilme, con tan larga duración y abundantes imagenes del béisbol.

La película es además honesta reflejando el vacío afectivo que generan las relaciones de la sociedad sexualmente liberada, faltas de compromiso y desordenadas, con temas tales como los embarazos en jóvenes, la necesidad de un buen padre en los hogares, el anhelo que todo quisque por encontrar su media naranja y por hacer el amor en lugar de fornicar.