Tengo ganas de ver a Cara Delevigne hacer un personaje inolvidable y cuando leí sobre la serie pensé que además la trama política podría atraparme. No ha sucedido ninguna de las dos cosas. Salvo en algunos momentos de los primeros 2 ó 3 episodios, me ha costado mucho avanzar. Casi la dejo a medias. La trama principal me ha parecido previsible y dejó de interesarme pronto. Y el telón de fondo de la historia, un mundo de hadas y hombres con tensiones de clase, raciales y morales, carece de sutileza, desarrollo y profundidad. Todos los mensajes son muy explícitos y la narrativa es un poco pedante y profesoral. Y además de la historia, creo que cada capítulo tiene problemas de ritmo. Todas las escenas quieren ser intensas y barrocas. No hay humor. Todos los personajes están siempre serios y atormentados. La cámara se pasa el rato tratando de sacar partido a la bizarría de los personajes y los escenarios, pero no ayuda a la narrativa visual. Hay también algunas ideas originales, pero diría que quedan un poco aplastadas por tanta solemnidad.

Uno no puede dejar de maravillarse de la capacidad profesional de los directores artísticos, de los diseñadores de producción, vestuario, iluminación, efectos especiales... y de todos sus equipos en todas las faceta posibles para, si se hace bien como es el caso, transportarnos en el tiempo y en el espacio a cualquier lugar pasado o futuro, real o imaginario. Por no hablar de la cantidad de empleos de todo tipo que ello genera y que algunos que desprecian el mundo del cine y la cultura en general no tienen en consideración. En este sentido este carnaval de especies, donde la humana como es habitual suele ser la más monstruosa de todas, habita un mundo fantástico de estética "steampunk" plagado de referencias shakesperianas en el que nos vemos inmersos desde el primer capítulo.

Si a uno le gusta el género, que le gusta, la serie se ve de un tirón y si bien su guión se ciñe a patrones básicos acierta, a mi juicio, al diversificarse en un abanico de tramas bien hiladas que tocan diferentes palos, desde el cuento gótico del asesino en serie, al político, fanatismo religioso, a la historia dickensiana tradicional de clases, a la integración racial, al cuento romántico y todo tipo de referencias pasadas y presentes de como utilizar el miedo al diferente para justificar el poder absolutista. El elenco funciona sin fisuras con un Orlando Bloom que ha madurado física y actoralmente haciendo buenas migas por no ser repetitivo con eso de la química, con una Cara Delevigne estupenda.

Hadas, pucks (faunos), humanos, darkashers (especie de Golem), kobolds, licántropos, centauros, Trows, desfilan en este carnaval para nuestro entretenimiento sin renunciar a la reflexión. Habra segunda temporada.

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Carnival Row es una serie realizada con mimo y cuidado. De eso, cualquier observador puede cerciorarse tras unos minutos de visualizado. El decorado, la perfecta ambientación que nos traslada a una época victoriana, la escenografía, la fotografía… Todos sus aspectos dan cuenta de ello. A eso podemos remitirnos cuando hablamos del aspecto formal de la serie, con el que cumple de sobra.


Además de ello, el discurso y la moraleja de la historia que se nos presenta, esta de rabiosa actualidad. Por lo que nos encontramos ante una serie de fantasía sobrenatural que combina el thriller y el realismo. La acción se desarrolla en una ciudad llamada Burgo, en la que una variopinta galería de personajes se entremezcla. En sus calles podemos encontrar seres humanos, centauros, faunos, elfos, hadas, brujas y demás seres mitológicos y extraños. Sin embargo, existen notables diferencias entre ellos. Diferencias que van mucho más allá de la raza o el aspecto físico. Los humanos son los señores y dueños de la ciudad, mientras que los seres mitológicos o ‘’criaturas’’ como los llaman, llegan hasta ella huyendo de las guerras que asolan sus países. La mayoría aparece en la ciudad como inmigrantes pertenecientes a algún naufragio que intento buscar una vida mejor en una ciudad aparentemente tolerante. El racismo imperante opera desde el principio, ya que ‘’las criaturas’’ deben ejercer trabajos extremadamente precarios, que incluso se podrían tildar de esclavitud. No son aceptados por el resto de habitantes y en casi su exclusiva totalidad deben permanecer en un barrio llamado Carnival Row. A todo esto, se une una serie de asesinatos violentos de los que son víctimas y que ejerce como trama principal de la historia dominante.



Como decía antes, a pesar del carácter fantasioso de lo narrado, lo que se nos cuenta es un reflejo fiel de la realidad que vivimos a diario. Este es el punto más atractivo para visualizar los ocho primeros capítulos emitidos de esta serie. Ya que su trama no se aleja en ningún momento de la actualidad o de los conflictos y pasiones humanas que puede sentir cualquier espectador visualizándola.



Con un elenco notable de actores que hicieron interpretaciones bastante sobresalientes en otras series, podemos contar con nombres como los de Indira Varma( Juego de Tronos), Jared Harris ( Chernobyl) o Tanzim Merchant ( Los Tudor), entre otros…. Destacando especialmente los papeles de Imogen y Agreus, interpretados por Tanzim Merchant y David Gyasi, que para mí son la pareja protagonista por excelencia de la serie. He de reconocer que tanto Orlando Bloom como Cara Delevigne realizan a su vez interpretaciones bastante dignas de sus personajes. No soy muy fan de ninguno de los dos, pero en esta serie me han gustado ambos….



La única pega que le puedo encontrar es su final algo previsible. No obstante, estoy segura que de ‘’Carnival Row’’ ha llegado para erigirse como una serie a la que tener en cuenta en el futuro y que todavía tiene mucho que contarnos y con lo que deleitarnos. Estaremos atentos a su desarrollo posterior.…

Al ver el anuncio y trailer de esta serie tenía la certeza de que iba a ser buena por su temática y ambientación, pero la verdad me dejo muy inconforme.

Carnival Row inicia bien, la marginalidad de las hadas en una época ficticia en el siglo XVII, un asesino serial de hadas que al parecer es un monstruo, hasta ahí todo bien pero según avanza la serie el guión decae, volviéndola monótona y bastante aburrida, a pesar de 2 episodios el resto son puro relleno, diálogos carentes de enganche y no termina de despegar, por mas de que veas la belleza recurrente de Cara Delevingne en cada episodio no te va a terminar de convencer, serie que daba para mucho más según lo anunciado, le doy un 6 por su buena fotografía y la ambientación, pero guión bastante flojo la verdad.

Comencé a verla sin más pretensión que la de entretenerme, la verdad, pero poco a poco me he ido sumergiendo en una trama interesante, con giros inesperados, con una ambientación impecable, interpretaciones inmejorables y...tantas cosas. Nunca he sido admiradora de Orlando, pero con este papel me ha ganado totalmente Y no deja de ser sorprendente el realismo a pesar del popurrí de razas, magia y similares, y es que simplemente ves retratada a la misma humanidad con sus virtudes y defectos, es perturbadoramente tan real.