Me parece una película diferente, no apta para todos los gustos (ni estomagos). A mi personalmente esta película me resulta entretenida, y todas las personas con las que la vi, opinaron de la misma forma. No es sobresaliente, pero esta bastante bien. ¿Los que la vieron entendieron el final? Seguro que los que la votaron muy bajo son fans de las pelis americanas de explosiones y disparos a mansalva..... Grande Miike, algunos que te seguimos.

Basándose en el manga Koroshiya 1 de Hideo Yamamoto, Miike abrió su mente para regalarnos una obra sublime, la cual marcó un antes y un después en su cine. No queremos pasarnos de listos, muchos antes han opinado lo mismo, es su obra cumbre. Si esto no es cierto como mínimo podemos afirmar que entre su extensa filmografía, Ichi representa un hito. Para afirmar esto nos basamos en su extremismo, no exento de poesía visual, sus personajes con sello de la casa, realmente es una fiesta de locura disfrutable de principio a fin.

Takashi Miike nos muestra todo su potencial en 129 minutos, sin dejarse absolutamente nada, grandes alardes técnicos, violencia extrema, todo ello calculado al milímetro y dándonos un paseo visual muy cercano al infierno. El director hace su trabajo a la perfección pero cuenta con el apoyo de un excelente guión de Sakichi Satô al cual saca todo su jugo. Es tal la perversión de Miike que nos deja un final que no permitirá dormir a más de uno. Para nosotros este final está entre los más impactantes de la historia del cine. La fotografía, curiosamente del mismo autor del manga mencionado antes, es bizarra y nos ayuda a sumergirnos en la orgia de violencia que se nos presenta. ­­Entre las partes más importantes de la cinta destacar el excelente trabajo de maquillaje de Yüichi Matsui, realmente pone los pelos de punta y seguramente acabó exhausto por la cantidad y calidad de las caracterizaciones.

Punto y aparte merecen los actores. Podríamos estar aquí horas hablando de ello, pero para abreviar destacaremos a los siguientes: Tadanobu Asano, el verdadero protagonista del film, en una palabra magistral, compone uno de los personajes con una personalidad más extrema que hayamos podido visionar; el actor y director Shin’ya Tsukamoto, realmente magnifico y que nos regala algunos momentos realmente inolvidables. Los papeles parecen escritos a medida para ellos. Como curiosidad, destacar los papeles femeninos, que cobran la mayor importancia al sufrir los más duros y explícitos castigos, no se esconde nada.

Ichi es un introvertido muchacho al cual le persigue un pasado un tanto tenebroso. Como si de Batman se tratara es una persona de dos caras. Sumamente blando en el trato cercano y la pesadilla de los yakuzas cuando su ira se desata. La venganza y la sangre serán el plato principal del cual comerá. Aunque no está solo. Oscuras fuerzas lo zarandean.

Estamos ante una de las obras del neo-punk más destacables. Para nosotros se coloca en un lugar muy destacado dentro de la historia del cine, una verdadera obra de culto imperecedera. Aún así hay que reconocer que no es de fácil digestión para todos los públicos. Obligada visión para todo amante del cine de terror y, nos atrevemos a decir, del cine en general. Masterpiece, sin duda.

http://www.terrorweekend.com/2013/02/ichi-killer-review.html

Es una especie de comedia-gore con momentos realmente impactantes no aptos para estómagos delicados, pero con toques de humor. Yo decidí verla sabiendo a lo que me exponía porque "Audición", del mismo director, me gustó mucho. Película que hay que ver con cierta predisposición de ánimo y estómago de hierro. Lo mejor: Tadanobu Asano (a quien vemos en "Zatoichi" con una imagen muy distinta). Lo peor: Ichi, que no pega nada en la película.

Surrealismo+Ultraviolencia+Yakuzas+Surrealismo+Takashi Miike=Ichi The Killer

No es cosa de seguir abundando en lo que muchos otros ya han comentado sobre lo sádico y exageradamente violento de esta "película". Sin embargo, después de ver semejante trozo necesito desahogarme un poco.

Cinematográficamente pienso que quien le haya dado 6 ó 7 estrellas, le habrá dado al menos 8 a 'El E.T.E. y el Oto' de los Hermanos Calatrava, porque al menos hace reir de mala los 5 minutos que aguantas sentado. En el caso de 'Ichi the Killer' ni siquiera te ríes; la náusea que produce tanta violencia sádica oriental gratuita -violaciones incluidas- solo dan ganas de tirar una bomba atómica lo suficientemente grande como para reventar el planeta entero ya de una triste vez. Seguro que todos los que participaron en esta peli llevan los menos 10 años con hikikomori. Si no, no se explica.

Garantizo que si la peli fuera española tendría un 2 de nota media, pero como es japonesa, con el rollo de la cultura oriental blablabla... ¡Pero qué cultura ni cultura! La peli es mala y punto. Encima hace daño solo de verla. Sigan el consejo de uno que lamentó sinceramente haberla visto incluso a medias (huelga decir que no aguanté hasta el final): no la vean. No solo pierden su precioso tiempo; además se quedan con mal cuerpo, viendo lo mal que está alguna gente.