Esto que voy a decir me duele mucho por las ganas que tenía de que me gustara, sobretodo siendo lo que todo apunta que será la última película de Miyasaki, pero me parece una película insufrible. Y no me vale que la animación y la estética son buenas, que lo son, porque eso no justifica dos horas de película. Para un videoclip la estética es suficiente, pero una película no.
Que vaya por delante que sin ser ultra fan de Miyasaki, pues no es la primera película que me parece un poco tostón, sí puedo afirmar con rotundidad que El viaje de Chihiro se encuentra entre mis 3 películas preferidas del cine y lo que me hizo sentir esa película no lo ha logrado ninguna otra. Y fui al cine pensando que, si bien no iba a ser igual (es imposible), sí podía encontrarme con otra obra magnífica. Y ni de coña. La película como pongo en mi título no hay por donde cogerla. Las películas de Miyasaki siempre tienen un toque extraño y unos personajes ambiguos, pero lo de esta película es otra cosa. O sea Chihiro tiene sus rarezas pero en ningún momento dejas de comprender el conjunto y al final se te queda un recuerdo parecido a haber vivido un sueño maravilloso. Pero esta película roza el surrealismo. Todo pasa porque sí. Se van sucediendo escenas y personajes sin explicarte nada ni profundizar en nada. No hay ninguna lógica. En serio, me da mucha pena hacer esta crítica pero es que es la verdad. Yo no me gastaría dinero en ver esta peli y si vais a verla no vayáis con niños porque es casi imposible que les guste.