Si bien es cierto que la base podría ser tratada en una película, ésta no es más que una mala excusa para mostrar no idioteces, no, sino acciones soeces, torpes, burdas, y de mal gusto, que nadan tiene que ver con el objetivo final (si es que es cierto y no una mera excusa como digo para exponer sexo o genitalidad gratuitamente, tema que no tiene que ver con la idiotez o al menos no reiterarse hasta la saciedad, a la que nunca parece llegar este director). Cojan el diccionario y busquen sinónimos de los epítetos anteriores y ya habrán visto la película. Hay gente que tras leer la crítica a una película tan mala se animan y la veen. No lo hagan, y si lo hacen, espero que ayuden a cualquier amante del arte cinematográfico a evitar estas obras de gañán.

Me desconsuela recordar con esta película que el cine español sige actuando bajo la premisa de captar espectadores sobre una base exclusivamente sexual, ya sea en cualquiera de sus versiones (en este caso el sexo en personas obesas). Ello, claro está, debe ser camuflado mediante lo que se viene a denominar "argumento", que no debiera confundirse con "la justificación" de la película, cual es conseguir dinero dinero en una actividad mercantil, bien mediante taquilla, bien mediante subvenciones de las administraciones. Parace que se trata del "estudio de los complejos, las fobias, las obsesiones, los traumas, los errores, la culpa, los deseos, las ilusiones, los retos, los compromisos, las metas, las relaciones, el amor, el sexo, la salud, la familia,etc".
Por contra, lo que he visto es gratuidad de genitalidad oronda con puesta en práctica de la sexualidad, y mofa del cristianismo en uno de los intérpretes (que por cierto no era gordo).
Aquellos a quien les "ponga" directamente el sexo de orondos valorarán bien esta película, bien por tener dicha "filia", o bien por simple y puro morbo.