El silencio del agua, no pasará a la posteridad, y con toda certeza, dentro de unos años nadie la recordará. Carece de garra, así como de una historia que nos conmueva. Se trata de una simple película que nos llega de una tierra lejana y para los occidentales exótica, y tal vez ahí radica su único punto de interés.
En ocasiones, circunstancias ajenas hacen que ciertas películas a las que ves con cariño, termines ignorando sus defectos. Puede que este sea el caso. Pero a decir verdad la película tiene muy poquito que ofrecer… Con infinita generosidad la he valorado con un 5.