Parece ser que Mr. Shyamalan se resiste a perder la fé en el ser humano, cosa que no son capaces de asimilar aquellos que (no sé si por falta de comprensión o directamente de sensibilidad) se apuntan a la moda de vapulear sus películas.
El film conserva la mágica atmósfera de sus anteriores producciones añadiendo además un aire de independecia al más puro estilo del underground americano, y no lo digo sólo por la majestuosa interpretación de Giamatti... Costumbrismo y fantasía, melodrama y crítica sociopolítica, comedia y thriller. Un proyecto tan ambicioso que hubiese sido perfecto para una serie de calidad y tan próximo que nos hace vibrar identificándonos con sus protagonistas.
Fotografía y banda sonora redondas y un guión sobre la lucha del ser humano con aires de metacine (el cuento dentro de la película, los personajes que buscan sus roles a ciegas, el personaje del critico de cine y sus diálogos...).
De acuerdo que se hace un poco enrevesada, pero qué mejor excusa para un segundo visionado. De acuerdo que en ocasiones pierde ritmo, pero así agobia como la vida misma. Tan sólo le pediría un mayor desarrollo de personajes que se podría haber conseguido reduciendo un poco su número.
Por lo demás, sigue así M. Night, eres de lo que no hay.