Copiando el argumento de una peli de hace unos años que nadie pareció ver, Chain letter es el más típico de los slashers, rodado con pretenciosidad de cine bueno a base de insertos que pretenden ser escalofriantes y no son sino basurilla new age.
El típico frikazo pajillero recibe un mensaje para que continúe la cadena. Todo aquel que no lo hace es víctima de un mazas de cara quemada y brazacos tatuados que maneja las cadenas, las reales, las de metal, como nadie. La rubia zorriki, el mazas de gimnasio y el chulito arreglacoches evidentemente no los reenvían.
Sustos bastante paletos, muertes para nada desdeñables que sin embargo pierden fuelle por los innumerables insertos y estupideces del guión.
Lo mejor: Las primeras muertes, desmembramiento y destrucción facial bastante apañadas.
Lo peor: El reparto es pésimo. A destacar el cutre profe de Historia.
Muy, muy mala.
También es que me pilla en un día crítico. Igual en uno de esos días en modo tolerante le habría dado un tres, pero ya ven por estos parámetros lo muchísimo que me ha gustado.
El debate Tecnología si, Tecnología no, acaba por destrozar sus limitadas virtudes.
La ingenuidad del final abierto a una ¿secuela? enternece por momentos mi voraz inquina hacia la cinta.