John Huston dirigió en 1941 uno de los grandes clásicos del cine negro, que se ha convertido en una de las películas más memorables del séptimo arte.
Siempre había querido verla, pero hasta ahora no había tenido la oportunidad, y debo decir que me ha entretenido, pero me esperaba muchísimo más. Después de oír solo alabanzas de esta historia, me imaginaba una trama que me enganchara de tal manera que me pegara al sofá.
Me he encontrado con una película que resulta interesante y entretenida, pero al final toda la investigación no me ha llegado a cautivar tanto como deseaba. Me ha resultado un poco flojo el desarrollo, haciendo que en algunos momentos no me convenza lo que sucede.
Me imagino que para los amantes del cine estos comentarios serán una especie de sacrilegio, pero la verdad es que a mi únicamente me ha entretenido, pero no me ha parecido tan obra maestra como se habla de ella. Una obra maestra que a mí me parece que ha perdido con el paso de los años.
No quiero decir que la película no sea entretenida, porque sí que es así. Distrae y la historia engancha, y con ella uno pasa el rato, pero no me hizo vibrar.
Por otro lado, debo decir que no soy muy fan de Humphrey Bogart. No es mal actor ni por un asomo, pero creo que casi siempre está en la misma tesitura. No me ha decepcionado su actuación, pero tampoco me ha entusiasmado.
En fin, "El halcón maltés" es un clásico del cine negro que cuenta con una estética muy atrayente gracias a un vestuario y una buena decoración. Además, cuenta con una fotografía que sí hipnotiza, y eso crea una atmósfera que te envuelve técnicamente. En definitiva es una película que funciona en partes, pero de la que me esperaba más. Aun así, un clásico que se debe ver y que resulta interesante.