Sublime, a partir de esta película el cine "occidental" de terror se regenera, las péliculas de miedo pueden tener una carga dramática al mismo tiempo que nos pueden mantener en vilo. La soledad, la tensión del ambiente, el miedo a lo desconocido. Bruce Willis nos da una lección de interpretación, nos demuestra que no tiene por que hacer de duro o de graciosillo ligón, lo vemos en un registro nuevo. Joel Osment en su primer papel despues de Forrest Gump lo borda, lo de "en ocasiones veo..." es genial, ya es una frase de la historia del cine.
Shyamalan con su segunda película hace su presentación en la alta sociedad del cine, en el cine de los elegidos.