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Voto de Migatoyyo:
7
7.0
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Drama
El conflicto palestino-israelí sirve de telón de fondo a este drama. Salma, una viuda palestina, tiene un litigio con el ministro de Defensa israelí. La casa de éste, en la frontera palestino-israelí, linda con su campo de limoneros. Cuando las autoridades deciden que los árboles deben ser talados porque representan una amenaza para el ministro de Defensa y su familia, Salma decide emprender una batalla legal para salvar sus limoneros. (FILMAFFINITY) [+]
26 de diciembre de 2008
16 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
La mejor forma de entender un problema complejo es siempre a través de un ejemplo. En este caso el ejemplo se transforma en metáfora precisa y emocionante. Dos culturas conviven, pegadas una a la otra, impregnándose en muchas ocasiones de la vecina, enriqueciéndose entre ambas; pero entre ellas hay una distancia tan mínima como insalvable. Todo el tiempo nos queda la esperanza de que el conflicto, encarnado en dos mujeres serenas y sensatas, se resuelva del modo más sencillo, acercándose una a la otra y hablándose con respeto... pero nada favorece ese encuentro.
La película no es neutral, no puede evitar simpatizar con el débil, con el agraviado, con el que estaba allí y va a ser expulsado de su modesto paraíso; no puede evitar describir una cierta soberbia en el comportamiento de los israelitas, tal vez porque la fracción de la sociedad retratada es la poderosa y se centra en un político, un político que conoce la solución pero se niega a rebajarse a tomarla. Pero aún así, no demoniza, no se excede en castigar al culpable, es más en un final genial, advierte que, en ocasiones, lo peor que puede ocurrir es salir victorioso, si se paga un precio tan alto por la victoria.
Meritorio filmcon mensaje, con excelente desarrollo y muy apreciables interpretaciones.
La película no es neutral, no puede evitar simpatizar con el débil, con el agraviado, con el que estaba allí y va a ser expulsado de su modesto paraíso; no puede evitar describir una cierta soberbia en el comportamiento de los israelitas, tal vez porque la fracción de la sociedad retratada es la poderosa y se centra en un político, un político que conoce la solución pero se niega a rebajarse a tomarla. Pero aún así, no demoniza, no se excede en castigar al culpable, es más en un final genial, advierte que, en ocasiones, lo peor que puede ocurrir es salir victorioso, si se paga un precio tan alto por la victoria.
Meritorio filmcon mensaje, con excelente desarrollo y muy apreciables interpretaciones.