Es una película recomendada a todo aquel que le guste lo relacionado con el mundo de la informática/tecnología antes que nada, pero la diferencia principal en cuanto a su predecesora es que no se centra mucho en lo teórico, sino más en la acción, aunque no es tan fácil seguir el argumento(y menos en la de 1982, un tanto compleja para un servidor); aun así, la película goza de efectos gráficos así como sonoros insólitos, y no hablemos de la BSO de Daft Punk, pues yo la califico de sobresaliente aunque se limite a una sucesión de acordes en muchos casos.
En cuanto al reparto, ¡cómo no podía faltar nuestro ya envejecido Jeff Bridges! ahora veintiocho años después nos sigue sorprendiendo con su papel en este tipo de películas.
También es importante que el director no se centra sólo en la acción, destacando algunos momentos sentimentales para que no sea tan monotemático y no nos tenga todo el tiempo excitados.
Como primer largometraje dirigido por Joseph, la verdad es que se ha estrenado bien. ¡Bravo!