...pero contundente, humilde, único y divertido...

"CHUD" es parte de aquel cine de serie B ochentero que se inspiraba sobre todo en los zombis de Romero y las deformidades físicas de las pelis de Cronenberg, que mezclaba elementos del terror propiamente dicho y la ciencia ficción con algo de crítica social, y que estaba protagonizado por seres que habían mutado debido directa o indirectamente a la contaminación y la guarrería de la sociedad. Unas pelis que se hacían en el circuito del cine independiente más barato y solían ser carne de videoclub más que nada, pero que tuvieron su momento (y su influencia).

Es un filme bastante modesto, y con bastantes fallos: su ritmo es algo irregular, su crítica a las autoridades y su mensaje medio ecologista son más voluntariosos que eficaces, y su aspecto técnico es bastante austero por no decir otra cosa, pero todo se le perdona por su lograda ambientación en ese Nueva York cochambroso de entonces, por su intento de hacer cine "con mensaje" en un momento en que eso era ir contracorriente, por el carismático personaje que interpreta Daniel Stern (el "reverendo"), por la atmósfera que consigue en las escenas terroríficas, por su excelente música tenebrosa, por sus entrañables muñecos de plasticazo verde y por sus resultonas escenas gore.

Un clásico de aquellas entrañables pelis hechas con un duro, pero con imaginación, oficio y gracia.