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Voto de Talía666:
9
6.8
5,106
Drama
Tom tiene 28 años y está destinado a seguir los pasos de su padre en el sórdido y a veces brutal negocio inmobiliario. Sin embargo, gracias a un encuentro casual, concibe la ilusión de llegar a ser pianista como su madre. Con gran determinación, empieza a prepararse para una audición con una experta pianista china. Como ella no habla francés, la música será el único medio de comunicación entre ambos. En estas circunstancias, su trabajo ... [+]
21 de diciembre de 2010
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Exquisita representación de la dualidad sensibilidad-violencia que anida en todo ser humano en mayor o menos medida, con predominio de una o de otra, pero siempre presente. El protagonista oscila entre el sórdido mundo de las trapalerías del negocio inmobiliario y su irresistible pasión por la música. Y así lo vemos apalizar a un grupo de inmigrantes para echarlos de un inmueble que le interesa un rato antes de interpretar al piano con maestría y entrega totales una pieza musical.
El personaje principal es sencillamente fascinante, y el actor que lo interpreta, además de tener un morbazo que te mueres, consigue bordar esa dualidad. Es al mismo tiempo agresivo y tierno, brutal y delicado, apasionado y frío. Es algo muy difícil de explicar, indudablemente hay que verlo para entender hasta qué punto consigue dar credibilidad a una personalidad tan contradictoria.
La representación de las relaciones que se establecen entre el protagonista y el resto de los personajes contribuye también a reflejar ese mundo contrapuesto: el recuerdo de su madre muerta, la extorsión sentimental permanente a la que lo somete el padre para que le haga los trabajos sucios, las relaciones "laborales" con sus compañeros, su pasión secreta hacia la mujer de uno de ellos, y sobre todo, la relación fundamental, la que establece con su profesora de piano. Con todos y cada uno de ellos el protagonista va desnudando una u otra parte de su compleja personalidad, cuando no las dos al unísono (por ejemplo, cuando se violenta con la profesora porque no consigue interpretar a su gusto).
En fin, imprescindible para todos los amantes del cine francés, y para los amantes del cine en general.
Y para las tías y el público gay, imprescindible el maromo. Madre mía, qué morbazo!
El personaje principal es sencillamente fascinante, y el actor que lo interpreta, además de tener un morbazo que te mueres, consigue bordar esa dualidad. Es al mismo tiempo agresivo y tierno, brutal y delicado, apasionado y frío. Es algo muy difícil de explicar, indudablemente hay que verlo para entender hasta qué punto consigue dar credibilidad a una personalidad tan contradictoria.
La representación de las relaciones que se establecen entre el protagonista y el resto de los personajes contribuye también a reflejar ese mundo contrapuesto: el recuerdo de su madre muerta, la extorsión sentimental permanente a la que lo somete el padre para que le haga los trabajos sucios, las relaciones "laborales" con sus compañeros, su pasión secreta hacia la mujer de uno de ellos, y sobre todo, la relación fundamental, la que establece con su profesora de piano. Con todos y cada uno de ellos el protagonista va desnudando una u otra parte de su compleja personalidad, cuando no las dos al unísono (por ejemplo, cuando se violenta con la profesora porque no consigue interpretar a su gusto).
En fin, imprescindible para todos los amantes del cine francés, y para los amantes del cine en general.
Y para las tías y el público gay, imprescindible el maromo. Madre mía, qué morbazo!
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Lo único que no me cuadra del todo es lo de las correrías nocturnas para desocupar inmuebles. No sé demasiado del negocio inmobiliario pero tengo la impresión de que los que se forran a costa de la especulación con terrenos y locales no son los mismos que luego van a acojonar o a apalear o a extorsionar a los inquilinos o a los okupas. Siempre he creído que estos trabajos sucios corrían a cargo de profesionales del sector criminal y no de los mismos ejecutivos. Igual estoy equivocada, y los ejecutivos acostumbran a quitarse el traje por la noche y se dedican a soltar ratas por ahí.