La Cosa de Carpenter me ha creado muchos sentimientos contradictorios que no se aun en que desembocan, una parte de mi le gusta; me gusta como Carpenter reparte la emociones en toda la película, también me parece alucinante la atmósfera en la que viven los personajes, la banda sonora de Morricone, la primera secuencia que me pareció brutal y funciona como un prólogo perfecto, al igual la escena de la reanimación cardio-pulmonar y por último la escena final en la que Carpenter deja una traca de acción importante con bombas e incendio incluido.

También me ha gustado el trabajo de caracterización de la cosa, la creación de ese bicho que puede adaptarse a cualquier cuerpo me ha recordado a criaturas de serie B y me han hecho disfrutar como un crio.

Pero debo de confesar que en ocasiones la cosa deja de ser una criatura terrorífica para convertirse en un objeto de risa; quizá sea el punto de vista que doy ahora después de 30 años y haya que asumir que la tecnología se ha quedado obsoleta pero queda esa nostalgia, pero aun así pienso que se trata de nostalgia y no de terror; pienso que películas de su misma generación; brillante generación de cine de terror por cierto, logran mejor su objetivo de aterrorizar que esta; hablo de La semilla del diablo, Carrie o El Resplandor. En este punto creo que la película funciona mejor como ciencia ficción que como terror y pienso que se sobrevalora cuando se dice de ella que es una obra maestra del genero.

Quizá sea producto de unas espectativas acumuladas tremendas pero debo de confesar que me sentí un poco decepcionado al visionarla.