Justo tras ver la película había escrito escrito una crítica corta y destructiva y le puse un 3, pero dos horas después seguía pensando en la película, y dándome cuenta de que no es tan vacía y simple como yo creía.

Dos amigos están haciendo un viaje en coche, deciden pararse y dar un paseo para estirar las piernas, cuando deciden volver se dan cuenta que se han perdido, al principio todo es broma, se cuentan anécdotas, unas risas... pero durante la siguiente hora y media vivimos una descomposición tanto física como moral de los personajes, cada vez hay menos diálogo y los planos son más estáticos hasta que al final con una música simple pero pesada consigue transmitirnos totalmente su estado de ánimo en una rara imagen en que no sabemos si los personajes vienen o van. La película apenas tiene historia ni argumento, transmite sensaciones. El final, por cierto, es muy bueno.

Una película NO recomendable, sólo para amantes de Gus Van Sant, si no te gustó Elephant ni consideres ver esta, y sólo para días tranquilos. Eso sí, si consigues congeniar con lo que ves, te hará pensar.