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España España · BILBAO
Voto de shevat:
6
Drama El planeta ha sido arrasado por un misterioso cataclismo y, en medio de la desolación, un padre y su hijo se dirigen hacia la costa en busca de un lugar seguro donde asentarse. Durante el viaje se cruzarán con otros supervivientes: unos se han vuelto locos, otros se han convertido en caníbales. Adaptación de una novela de Cormac McCarthy, autor de "No es país para viejos". (FILMAFFINITY)
28 de febrero de 2010
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuarto largometraje del realizador y guionista australiano John Hillcoat, director de documentales y videoclips fundamentalmente, que se prodiga poco en la gran pantalla pero siempre con bastante acierto (Ghosts... of the Civil Dead, The Proposition…).

En esta ocasión Hillcoat adapta la novela de Cormac McCarthy, del mismo título que la película, galardonada con el Premio Pulitzer 2007 en la categoría de ficción. McCarthy es uno de los escritores estadounidenses más importantes de la actualidad y ésta no es la primera de sus novelas que es llevada al cine (No es país para viejos, ganadora de los Oscars del 2009). Escritor de género post-apocalíptico y novela “gótica”, McCarthy se inspiró en la relación que tenía con su hijo de once años para escribir The Road.

Fiel a la naturaleza de la novela, el ambiente de la película es opresivo, con un perpetuo cielo plomizo y el frío y la humedad en todos los rincones, unido a la situación de desesperación y terror que viven los protagonistas, lo que provoca gran ansiedad en el espectador. Para conseguir esta ambientación, el rodaje se realizó en exteriores de Pensylvania, Nueva Orleans y Oregon, durante el invierno y en zonas poco habitadas o abandonadas, como la zona arrasada por el Katrina de Nueva Orleans.

Como casi siempre en las películas donde hay un niño protagonista, Kodi Smit-McPhee destaca sobre el resto del reparto, eclipsando a los anodinos Viggo Mortensen y Charlize Theron. El veterano Robert Duvall también hace un trabajo notable.

Comentar que, aunque la historia gire en torno a un padre y un hijo, no es una película para niños. Me llamó la atención un espectador desaprensivo que acudió a la sala con sus dos hijos, de unos ocho o diez años, y a los diez minutos se tuvo que marchar porque los críos estaban aterrorizados.
shevat
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